-¿Recuerdas que dijimos que todo sería un proceso y que aprenderíamos en el camino? Sé que lo haremos y yo no quiero hacerlo sin ti, yo si te necesito y no volveré a permitir que mi familia, ni nadie lo dude nunca más...
El un bibliotecario amante d...
Mi celular comenzó a sonar desde la cocina, ya que ahí lo había dejado cargando antes de subir a la habitación, desperté al escucharlo e intenté levantarme del sofá sin despertar a NamJoon quien estaba aferrado a mi cintura con sus brazos, se quejó un poco cuando logre salir del sofá pero continuo descansando esta ves abrazando una de las almohadas, corrí a la cocina y tome el celular para atender a mi suegra quien estaba llamando por tercera vez.
-Hola Gi -atendí- ya vi las llamadas, discúlpeme acabo de despertar.
-Que floja eres Isabella y estas contagiando a mi hijo -comenzó a reír- estoy yendo en camino, hoy es día de practicar recetas, necesitaremos ir de compras al mercado.
-Discúlpeme pero el culpable de que me levante tarde hoy, es su hijo, anoche llego borracho he incluso se largó a pelear con un vecino -suspire-
-¿Qué Namjoon hizo qué? -hablo sorprendida-
-Así como lo oye, le contare todo cuando él se valla, hoy tiene que llevar a Soobin con su psicóloga -camine hacia la heladera para tomar ingredientes para preparar el desayuno- haré el desayuno mientras la espero
-mucho mejor, así podemos hablar de él en su ausencia -ambas comenzamos a reír- está bien cariño, nos vemos pronto -corto la llamada-
Luego de preparar el desayuno, lo serví a la mesa y subí a mi cuarto donde estaba Soobin, para despertarlo con unos deliciosos besos, prepare su ropita y después de arreglarme, fui al baño para ayudarlo a lavar sus dientes, rostro, manos y peinar su cabello. Hice lo mismo conmigo y una vez listos bajamos a la sala, luego de varios intentos logramos despertar con un fuerte dolor de cabeza y unas grandes ojeras a Namjoon, subió al baño para lavar un poco su rostro, luego bajo y se sentó en la mesa para beber de su café quejándose por su resaca.
-Ten mi amor -tome de la cocina una pastilla para el dolor de cabeza y se la acerque a la boca- debería dejar que vallas al trabajo así como estas -lo mire fingiendo estar molesta con el, me sentaba en mi lugar despues de que me recibio la pastilla y tome un sorbo de mi taza con café-
-Gracias mi amor -tomo la pastilla apenado y se acercó a Soobin, quien estaba sentado a su lado en la mesa, para besar su mejilla- ¿puedes perdonar a Papi? Ayer se portó como un tonto, lamento haberte asustado a ti y haberle gritado a Mamá
-Te perdono Papi -asintió mirándolo- pero no vuelvas a hacerlo, con Mami nos quedamos muy tristes
-Lo sé mi amor, lo sé, perdóname -lo abrazo fuerte y luego se acomodó mirándome- lo siento amor, de verdad lo siento -acaricio mi mano- Yo confío en ti
-Espero que si mi amor, espero que lo hagas -sonreí de lado mirando nuestras manos, entrelace nuestros dedos y me acerque a el- te amo con mi vida -bese sus labios- grábatelo -lo mire- termina y lleva a nuestro bebé con su psicóloga
-Si mi amor, lo hare -iba a soltar nuestras manos pero Namjoon no lo permitió y así, tomamos el desayuno con nuestras manos juntas.
Pronto Lee Gi se nos unió, le pedí en secreto que esperáramos a que Namjoon y Soobin se fueran de casa, para hablar sobre lo que ocurrió la noche anterior. Asi que mi hombre al terminar su desayuno, subió al cuarto a prepararse para el trabajo mientras con mi suegra, nos metimos en la cocina para revisar los ingredientes que necesitaríamos para las recetas que practicaríamos hoy, anotamos todo en una lista de compra y subí al cuarto para buscar mi bolso.
-¿Cielo crees que haces tiempo de alcanzarnos al mercado? -Sonreí mirándolo y me acerque a él para acomodar el cuello de su camisa-
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