aún recuerdo perfectamente lo que decías, el como cada noche me prometías que lo harías, pero eso no sucedía y yo despertaba solo en una cama. quizás siempre fue mi error el creer en lo que decías, el dejarme llevar por tus mentiras y tus caricias; pero estas a la mañana siguiente se iban, desaparecían porque eran una vil mentira en la cual me tenías.
y sin querer yo ya dependía de lo nuestro, me creía poco suficiente, porque dejaba que me pisaras cuando no debía hacerlo; porque dejaba que me usaras como tu reserva cuando no estaba él.
y es que siempre fue él el amor de tu vida, pero eras tan miserable que ni con eso podías, porque no lo merecías, no nos merecías, y llegué muy tarde para darme cuenta que no me querías, que solo jugabas conmigo y con lo que sentía.
porque le tenías en tus manos y no quería verlo, porque cada noche bajo tus roces yo creía que esto sería eterno, pero tan solo era algo efímero que se lo llevaría el viento, y de paso con ello espero que se lleve mi sufrimiento, porque me enoja saber que aún despierto esperando un mensaje de tu parte, espetando que me busques cómo solías hacerlo, porque te pienso aún cuando no debo.
y es lo que más me duele, que me hiciste daño y yo sigo aquí enamorado de una mentira que me dejó lastimado.
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