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10. Un sábado diferente

—Jisung—

Jisung se despertó temprano para ducharse y arreglarse con tiempo, a pesar de que Minho lo citó en un parque alejado del centro por el medio día, pero quería hacer un par de cosas antes de salir. Jisung quería hacer todo lo que se propuso la noche anterior, y estar fuera toda la tarde le quitaría mucho tiempo, por lo que debía adelantar lo máximo posible.

Antes de salir de su piso, se puso una gorra y metió gafas de sol en su pequeño bolso, por si debía ir con Minho de incógnito. No le gustaba llamar mucho la atención. Se miró un par de minutos al espejo, suspiró y sonrió.

—Vale, creo que llevo todo...— se dijo a sí mismo mientras cerraba la puerta con llave, bajando por las escaleras del edificio hasta salir afuera.

Caminó un par de minutos hasta la parada de metro más cercana, pasó su tarjeta y esperó pacientemente al metro. En menos de diez minutos ya llegó a la zona que quería, solo tenía que caminar unos cinco minutos hasta ver el parque.

—¿Habré llegado muy temprano?— se preguntó a sí mismo mientras se sentaba en un banco, encendiendo su móvil para ponerse a responder unos emails al comprobar que quedaban diez minutos para la quedada.

—¡Jisung!— gritó Minho a lo lejos.

El menor se asustó un poco, ya que no se esperaba que el mayor llegara también pronto a la quedada.

—¿Llevas mucho tiempo esperando? Quise llegar pronto, pero ya vi que me superaste...— dijo sonriendo Minho, pasando su mano por la nuca, ya que llevaba un gorro negro sobre su cabeza.

—Tranquilo, literalmente acabo de llegar— respondió sonriente Jisung, levantándose del banco—. Bueno... ¿adónde iremos?

—¿Tienes hambre?— le preguntó Minho. Jisung negó con la cabeza—. De acuerdo... entonces, sígueme.

Le cogió de la mano y empezaron a caminar.

—Oye... ¿adónde vamos?— preguntó Jisung confuso, mientras veía su mano unida a la de Minho.

Al salir del parque, se subieron al coche negro elegante de Minho. El conductor al instante arrancó el coche, como si supiera adónde llevarles sin necesidad de decir nada.

—Solo déjate llevar— le respondió con una radiante sonrisa Minho que hizo latir el corazón de Jisung a mil.

*:・゚✧

Hoy era 20 de octubre, a Hyunjin no le gustaba pasar ese día solo, pero Jisung estaba en su cita, casi todos sus amigos ocupados y Jeongin le rechazó la quedada, por lo que este año se había quedado sin plan.

Debido a eso, decidió mantenerse ocupado, organizando su vestidor por colores, viendo cómo algunas prendas escondidas no se las ponía, por lo que decidió hacer una caja de donación y llegó a recopilar bastante. Luego estiró sus brazos hacia la estantería más alta de la habitación, viendo que había grandes cajas llenas de a saber qué.

—Llevaba sin abrir estas cajas desde que me mudé aquí hace años...— susurró Hyunjin sentándose en el suelo con la caja, abriéndola curioso.

Recuerdos de su adolescencia y primeros años de carrera cinematográficas se mostraron ante él, Hyunjin sonrió al ojear una carpeta con sus primeros contratos y pósteres de sus películas. Puede que lleve desde que es un niño en el mundo del cine, pero para Hyunjin parece que fue ayer...

Película sin cámaras ~ HyuninDonde viven las historias. Descúbrelo ahora