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13. Calma o huracán

—Chan—

A Chan siempre le gustó el cine, desde que vio su primera película. Consumía todo tipo de material audiovisual, luego empezó a grabar sus cortos con el móvil de sus padres, hasta llegar el punto de querer dedicarse al cine. Estudió bellas artes y se centró en las artes audiovisuales, empezó a grabar sus cortos de manera más profesional y probó suerte en varias entrevistas de trabajo, pero nunca parecía ser suficiente.

Las pocas veces que le aceptaban, solo era para servirle el café a sus jefes. Sus escritos y guiones pasaban a un montón de papeles que los grandes directores dejaban de lado.

La oportunidad que Jungkook le brindó fue un gran paso, ya que fue de los pocos que abogó por él y le aceptó como ayudante.

—Necesitarás experiencia para el futuro, y espero que la puedas conseguir trabajando conmigo— le dijo Jungkook con una sonrisa.

Y a pesar de que muchas personas infravaloraban su puesto y no le daban importancia. Chan continuaba.

Chan no perdía la fe, y seguía esforzándose y practicando soñando con el día en el que pudiera crear su propio nombre y dirigir películas exitosas algún día.

*:・゚✧

—Entonces..., ¿qué te parece la idea?— le preguntó Chan a Seungmin al verlo apartar sus ojos de los folios y se ajustaba las gafas.

Esa mañana Chan había accedido a traerle uno de sus borradores a Seungmin, quien le insistió bastante por mensaje que deseaba y necesitaba leer su arte.

—Chan esto es... una increíble historia— admitió Seungmin sonriendo—. Me encanta cómo has matizado una simple trama y dos personajes en una historia que te deja con ganas de más, es muy dinámica y diferente a lo usual...

—¿No crees que es una simple historia de amor como las demás?

—Para nada, has añadido muchas novedades y se siente como algo novedoso, nadie habría pensado en la mitad de cosas que escribes— explicó Seungmin seguro de su criterio—. Haces arte, pero no de la manera usual...

—Y aun así, sigue sin ser suficiente...— respondió con una pequeña sonrisa irónica Chan, bebiendo de su café.

—Tampoco digas eso...— le respondió Seungmin negando con un puchero—. Es culpa de las personas que no se atreven a darte una oportunidad, ellos se lo pierden...

Chan se sonrojó por cómo le defendía Seungmin, sintiendo su corazón latir rápidamente.

Y mientras esos dos chicos estaban en su burbuja, detrás de ellos pasaban a escondidas un par de actores que no podían mantener las manos alejadas del otro.

—Hwang, ¿adónde vamos ahora?— le preguntó Jeongin riendo, ahora que iban por uno de los pasillos—. Creo que ya no hay sitio que no hayamos estado...

Y es que desde ese día en el camerino, los dos actores decidieron traspasar las cámaras y pasaban más tiempo juntos de una manera un tanto especial. Eso sí, siempre a escondidas ya que no querían llamar tanto la atención.

—¿Qué te parece la sala de almacenamiento de multimedia? Minho me contó que ayer hicieron inventario y no vendrán hoy— le respondió Hyunjin agrazándolo muy cerca, escondidos en una esquina antes de seguir caminando.

Jeongin con responderle con una sonrisa era suficiente para él.

Nada más llegar a la sala, se quedaron en una de las paredes laterales, pero alejados de las estanterías con las cámaras de grabación ya que eran zonas más delicadas y peligrosas. No querían romper nada para evitar delatarse.

Película sin cámaras ~ HyuninDonde viven las historias. Descúbrelo ahora