Abrí la puerta de mi departamento todo estaba en silencio así que camine hasta el sofá donde me dejé caer en este, cerré mis ojos para luego respirar hondo y volver a pensar por qué Agni no me llevo al Club Neon, se suponía que soy su novia ¿no?, o no confiaba en mí, que pasaba en el club acaso la puerta negra que vi semanas atrás cuando los tres hermanos uniciaron su regreso de este año, ahí estaría Agni en esa puerta.
Pasos se escucharon hicieron que girará hacia donde estaban nuestros cuartos, estaba saliendo Libia con un vestido rojo y su bolsa negra, zapatillas negras algo cortas del tacón, se veía bien.
―¿Donde vas?―pregunté y ella solo camino hasta mi.
―Iré al club neon, hoy es viernes y el cuerpo lo sabe―acarricio mi cabello, solo hundí mis cejas.
Pensé que odiaba el club y que por eso ella no iba, pero, porque iré ella sola o con quien se vería.
Más pasos se escucharon, mire detrás de ella y venía saliendo Aldara y Vinni, ellos lucían tan bien, la ropa que usaban le quedaba perfecto para su cuerpo de cada uno, y ahí se unieron las piezas ellos tres iban a salir al club neon.
―¿Quieres venir con nosotros al club?―me propuso Vinni, me quedé callada no quería ir, mañana tenia un día largo con los Gallagher, pero algo en mi dijo que si, Agni estaría ahí y podría descubrir más de él.
―Si vamos―dije y ellos sonrieron.
Me puse de pie para caminar hasta mi cuarto rápido, donde solo saqué una blusa negra que la parte de enfrente estaba abierta, que le cerraba varios ganchos plateados, se ponía notar un poco mi busto, me puse una flaca negra y mis zapatillas negras, tome un bolso de Libia y salí a la sala donde los tres me estaba esperando.
―Nos vamos.
Dije y ellos asintieron, abrieron la puerta y salimos los cuatro, estaba algo nerviosa por ir al club por segunda vez y más si Agni supiera, no, nos habíamos mandando mensaje desde la mañana así que verlo en el club y que sospechara que lo estaba espiando el se volvería loco.
Salimos del edificio, mire un auto blanco uno bastante elegante, mire a Aldara quien estaba sacando unas llaves de su bolsa, así que Aldara tenia un auto blanco y hermoso, nos subimos todos en el auto, olía a rosas muy elegante, el volante dorado pude notar con pequeños diamantes en el volante, que elegante y caro.
Aldara condujo hasta el bosque, me seguía dando un poco de miedo el bosque todo seguía igual como la última vez, mire a Libia quien esta seguía poniéndose su labial rojo un rojo intenso, mire a Vinni quien este se miraba en el espejo, Aldara estaba concentrada en conducir.
Solte un suspiro cuando el auto paro a unos centímetros de la cabaña, había pocos autos muy bien escondidos en el bosque, había como tres o cuatro autos escondidos, bajamos los cuatro mire ami alrededor todo estaba en silenció, solo se oían los grillos y ya, caminos hasta la cabañana donde Libia abrió la puerta y este hizo un chillido tan agudo, valla era como de terror esto.
Bajamos por las escaleras y más escaleras, se me había olvidado la cantidad de escaleras que había en el club, llegamos a la puerta principal donde Vinni tocó la puerta y un hombre alto de uno ochenta y uno de comprensión delgada, usaba un traje negro muy elegante.
―Cuantos son―dijo con una voz ronca.
―Cuatro―Vinni habló.
―Son dos mil dólares por todos―dijo el hombre.
Aldara saco su billetera y pago los dos mil dólares y el hombre nos dejó pasar, ¡Dos MIL DÓLARES!, POR PASAR Y SOLO ERAMOS CUARTO. ¡¡QUE CARAJOS!!.
Entramos estaba de color azul todo, la música sonaba a todo lo que daba las bocinas, camine hasta la barra donde pedí agua natural y me la dieron, Libia, Vinni y Aldara ya hacían en la pista de Baile dando todo de ellas, mire hacia la puerta donde estaba un hombre alto igual que nos abrió la puerta principal, este tenia unas gafas negras y una mirada seria, ahí estaba Agni, pero como entraría, como lo haría.
Visualice todo detalladamente y no había posibilidad de entrar a ese lugar, mierda, como entraría hasta que una voz me interrumpió de mis pensamientos.
―Eres novia de Agni, valla en verdad eres bonita―una chica de cabello negro y ojos negros estaba aún lado mio, con una margarita en sus manos.
―Gracias, también eres linda―respondi con una sonrisa.
Ella sonrió y se fue, así que mi mente racciono, soy novia de Agni así que así entraría a esa lugar, me puse de pie, por última vez mire detrás de mí, seguían bailando Aldara, Libia y Vinni así que camine hasta la puerta donde este hombre al verme se puso más enfrente de la puerta.
Con su mano derecha me detuvo del hombro.
―No puede pasar, solo gente de confianza―dijo con una voz demandante.
Quite su mano de mi hombro.
―Mi novio esta ahí adentro tengo que pasar―dije, y el me miró de arriba hacia abajo.
―¿Su novio?, ¿quien es?―cuestiono.
Mierda, era hora de decirle.
―Agni Gallagher―pronuncie.
El solo sonrió y nego.
―No es posible, el joven Agni no me dijo nada que su novia vendría, sin órdenes de el no puedo dejarla pasar―pauso.―invito que se retire.
Cruce mis brazos hasta la altura de mis pecho y negué con mi cabeza.
―No entiende, mi novio está allá adentro tengo que pasar, ahora―dije y el nego.
―Lo siento, no puede la invito a retirarse―sonó ya algo molesto.
No me moví lo mire directamente a él, sentía que estaba en un combate de miradas, el hundían sus cejas y yo igual.
―Que se retire por favor.―dijo de nuevo y no me moví.
―No―dije más seria.
El me tomó del brazo me apretó tan fuerte que empecé a decirle que me dejara pero el no lo hacía.
―Déjame, déjame, déjame.―repetí y el no lo hacia.
Me seguía apretando más duro mi brazo, hasta que sentí que lo solto y una voz se hizo presente una voz algo gruesa pero suave a la vez.
―Omar dejala―dijo aquella voz, alce mi mirada para ver quien era.
Un chico alto de uno setenta y seis, cabello rubio, ojos grises, vestía un pantalón de vestir negro, una camisa de vestir blanca remangada hasta la altura de sus codos, sus zapatos negros de vestir, se veían tan bien.
―Donde están tus modales―dijo de nuevo y el guardia solo asintió.
―Cuál es el problema―me miró aquel chico de ojos grises.
―Esta joven dice ser la novia de Agni Gallagher y quiere pasar―dijo el guardia, aquel chico me miró de arriba hacia abajo.
―Si, lo es, es Dione Sports―dijo mi nombre completo como lo sabía.
El guardia solo se fue sin decir nada más, me quedé sola con aquel chico extraño y de ojos grises, el me tomó mi mejilla derecha para acariciarla lentamente, para luego soltarla me hizo una seña con su cabeza para ir a la barra y fui con el.
―Bien, Dione―dijo. Pidiendo una margarita
―Si, ¿Quien eres?―pregunté.
―Mucho gusto, Soy Masón Ross―estiro su mano para saludarme y le regrese el saludo.
―Mucho gusto masón―dije.
―Agni, esta un poco ocupado, lo necesitas urgente―dijo y negué. El tomaba su margarita y yo admiraba sus ojos grises, y cada parte de su perfecto rostro.
Masón Ross, que bonito nombre.
Pero quería entrar al ese lugar pero como lo haría, y si uso a Masón para entrar ¿no?, apenas lo conocía no podía hacer eso...
Además Agni estaba ocupado un poco así qué, me última opción era esperar que el saliera para verlo.
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Trio Perfecto
RandomSu primer día en la Universidad León, Dione Sports descubre que todo lo que gira en León es controlado por Tres Hermanos que ocultan secretos. Los Tres hermanos son: Los Gallagher, un imperio muy grande y poderoso, pero todos los llaman «Trío Perfec...