Otro Titulo: ¿Por qué el capitán de los mugiwara odia con pasión a Dragon el revolucionario a pesar de que es su padre biológico?
Había sucedido incluso antes de su celo.
Sus pezones habían estado un poco sensibles por lo que había optado por vendarlos para no sentir comezón, también pata ocultar un poco la hinchazón de estos, pues mientras más crecía su pecho más sensibles se ponían y la verdad era que no tenia idea del porqué.
Fue una sensación molesta que tomo sentido cuando aquel cachorrito que carecía de un olor a manada se le acerco durante su celo.
Ese día las cosas habían iniciado mal.
Para empezar su celo se había adelantado, luego estaba el hecho de que su pecho, cubierto con dos curitas formando una x, y espalda le dolía a horrores, su vientre se sentía aquel habitual calor infernal de un celo saludable (si es que a esa mierda dolorosa se le puede llamar así) mientras se recostaba en su nido lleno de ropa de su tripulación, sus hermanos y su paquete alfa (esas horribles camisetas marinas que él quemara una vez que su celo termine).
Para acabar de rematar su omega se sentía triste. Cosa que le extraño un poco ya que ambos finalmente se habían acostumbrado a la soledad durante sus celos luego de que su paquete omega muriera (aunque de vez en cuando Dragon le hacía compañía), pero eso no evitaba que su omega interior lloriqueara suavemente y se retorciera en el nido completamente inconforme ante la falta de un objeto en este.
Mejor dicho, de alguien.
Cuando la puerta de su habitación se abrió suavemente observo como aquel pequeño cachorro entraba en su territorio mientras soltaba pequeños trinos que indicaban que el pequeño se encontraba enfadado.
Pero ¿Por qué su cachorro estaba molesto?
Espera, ¿su cachorro?
—¡Shanks! —gorgojeo con alegría el cachorro mientras se metía descaradamente a su nido para abrazarlo.
Un omega normal se molestaría por esa falta de respeto, pero Shanks solo ronroneo al tener al cachorro en sus brazos.
Aunque la felicidad no le duro mucho pues pudo sentir a su tripulación aglomerándose en la entrada de su habitación, SU territorio.
Ellos no tenían permiso, no eran (su) el cachorro, así que tuvo que echarlos de la única manera en la que no se viera obligado a levantarse lejos del (su) cachorro. Activo sin remordimientos su haki del conquistador y se irguió orgulloso cuando estos se alejaron de su territorio.
Mas tarde, tal vez, se sentiría culpable, pero ahora tiene un compromiso.
—Ancla —le llamo suavemente para que este alzara la mirada de su pecho y le viera a los ojos— ¿Qué estás haciendo aquí?
El cachorro gorgojeo de nuevo cuando el omega pelirrojo se dedico a acariciar sus cabellos.
—Makino me dijo que Hongo le aviso que estabas malito así que vine a ver como estabas. —comento el pequeño derritiéndose ante las caricia del omega. — Los demás no me dejaron pasar y me dijeron que no podía verte porque era contagio. Como no quería esta malito como tú iba a esperar hasta que mejorara, pero cuando escuché a Shanks llamarme me escabullí de los demás y entre al lugar de Shanks.
Ah, así que por eso su omega no paraba de llorar.
Pensó que había sido por el dolor de no tener a nadie de nuevo, pero resulta que estaba llamando al cachorro con el que ambos se habían encariñado. Aunque eso era raro, pues su pequeña ancla solo era eso, su ancla, pero no su cachorro, era extraño que respondiera u siquiera escuchara su llamada si no tenían lazo alguno.
Observo al pequeño alborotador acomodado en sus brazos y alzo una ceja cuando este empezó al olfatear su pecho. El cachorro jalo un poco su camisa, pero al ver que seguía estorbando dio un fuerte tirón que desprendió brutalmente los botones de ella.
—¡Ancla! ¡Esa era mi camisa favorita! —gruño el omega que refunfuño mas fuerte cuando el pequeño le ignoro observando la venda que cubría su pecho.
El cachorro frunció el ceño ante eso y alzo su mano.
Al omega pelirrojo le recorrió un escalofrío cuando el pequeño cachorro rozo su pecho vendando en el lugar cerca de su pezón. Fue entonces que Shanks miro el lugar y se dio cuenta que estaba levemente mojado, de aquel lugar se podía oler un aroma dulzón que provoco extrañeza al pelirrojo. Aunque no le duro mucho pues la pequeña ancla había jalado la venda dejando al descubierto el pezón rosado que goteaba un liquido blanquecino que reconocio como leche.
Shanks se retorció un poco ante ello, pero permaneció expectante. Se sentía extrañamente emocionado ante la idea de producir leche.
(Sentía un regocijo en saber que su cuerpo podía darle a su pequeño cachorro los nutrientes que necesitaba)
Shanks negó ante el pensamiento, pero su cuerpo traicionero lo delato al soltar un ronroneo satisfecho cuando Luffy empezó a succionar su pezón cubierto de leche.
Era una sensación extraña, pero no podía dejar de sentir aquella calidez que provocaba un picor en sus ojos ante la obvia felicidad de formar aquel vinculo con este pequeño cachorrito con el que se había apegado tanto.
Y con eso en su mente no pudo evitar cerrar sus ojos con la sensación de un pequeño y dormido Luffy alimentándose de su pecho.
Lo que lo despertó fue aquel olor a pino y mar que provenía de Dragon, quien rodeaba a ambos con sus brazos mientras sonreía dulcemente. El alfa ronroneaba de felicidad, extrañamente extasiado al ver a ambos miembros de su desordenada manada juntos.
Shanks intento ignorarlo por la salud mental de Luffy, pero al final su omega gano y jalo a su alfa en un beso lleno de felicidad que él otro correspondió enterrando su lengua en la otra cavidad vocal.
Cuando el aire finalmente se acabó, Dragon se dedicó a recorrer con sus labios al omega que soltaba pequeños jadeos que se volvieron un gemido cuando el alfa rodeo con su boca el otro pezón rosado del pelirrojo, el cual estaba embarrando los alrededores del bronceado lienzo, que era la piel del omega, de leche. En un claro indicio de encargarse él del lugar desatendido.
Esta demás que decir que el cachorro se despertó al escuchar aquel sonido y pateo al alfa en la cara sin mirarlo dos veces.
Claramente no le gusto que ese extraño tocara a Shanks.
(Aunque también odio que comiera de la leche de su nueva mama)
A pesar de todo, el extraño paso el celo de Shanks con ellos y se dedico a molestar a Luffy, quien termino detestando al alfa que quería comer de su comida y robaba la atención de su nueva mama.
(Shanks regañaba a Dragon por eso, pero el hombre no podía tomar enserio al omega pelirrojo cuando su cara se veía igual que su cabello luego de los pequeños besos que presionaba en diversos rincones del cuerpo del capitán pirata)
Y aunque Luffy pensó que finalmente se habría librado de ese alfa luego de que se fuera, pasarían años de sobreprotección con su madre y su hermano mayor, antes de que supiera quien era aquel bastardo que había intentado robarle a su madre aquel entonces.
Aunque al final lo consiguió, y aunque esta agradecido con su linda y adorable hermanita omega, eso no lo salvo de ser perseguido por el segundo rey de los piratas.
(Luffy casi quema al maldito, pero solo se salvo porque su madre lo ama)
(¿no era un el segundo rey pirata un ser benevolente?)
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El cachorro del joven emperador.
Fanfic(Inicio de escritura 5 de marzo 2022) Los hijos de los yonko siempre han sido un problema. Ya sea que fueran adoptivos o de sangre los mocosos causaban terribles dolores de cabeza en el gobierno mundial. Desde Katakuri hasta Marco el fenix incluso e...