3. REVELACIÓN

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El paisaje pasaba muy deprisa al mirar por aquella ventanilla, se podían apreciar unas montañas a lo lejos. En la radio se escuchaba <<Life is a highway>> de <<Rascal Flatts>>.

"Es una canción ideal para escuchar en el coche" pensó Byron.

Al mirar por la ventanilla le vinieron todos los recuerdos que había vivido con su mejor amiga Sara y con sus padres Nani y Antonio. Separarse de ellos le dio muchísima pena, pero sabía que no podía deprimirse, pues esa era su vida ahora, estar lejos de las personas que ama y quiere, pero como le prometió Sara, algún día volverían a encontrarse, con el tiempo.

"Tiempo al tiempo" dijo el chico de cabello largo rubio en sus pensamientos. Esa frase se la dijo uno de sus profesores hace años, y ahora comprendía de que se trataba.

- Tú no te mareas en el coche, ¿no? – preguntó de pronto Stephen – siento preguntártelo ahora.

Byron se quedó pensativo. ¿Por qué ha preguntado eso ahora y no antes? ¿Por qué justo en este momento de silencio? Aquella situación en la que Byron no sabía en qué estado de ánimo se encontraba le hacía cuestionarse todo lo que pasaba a su alrededor.

- No – contestó al fin – no me mareo.

- Genial entonces – añadió con una leve sonrisa al acabar la frase - ¿Quieres poner algo de música?

Byron negó con la cabeza y dijo que no le importaba.

- Vale pues pásame mi móvil por favor – pidió el doctor a su copiloto.

Byron cogió el móvil y siguió las instrucciones que le daba Strange, le dijo que pusiese en Spotify <<Locked out of Heaven>> de <<Bruno Mars>>.

- Bien hecho pequeñajo – felicitó Stephen – esta canción es un auténtico temazo, ¿no crees?

Byron afirmó con la cabeza, estaba muy nervioso y no sabía que responder.

Después de unas horas se pararon en frente de una casa muy grande.

- Muy bien chaval, ya hemos llegado – dijo el doctor.

Bajaron del coche y Byron se quedó contemplando la enorme casa blanca y negra.

Strange abrió la puerta y le indicó a su invitado que entrase dentro. La casa a simple vista era enorme y muy acogedora.

"Al menos vive en un buen sitio" pensó el chico.

- Vale, te enseñaré la casa – dijo Stephen – puedes dejar ahí la maleta y luego la colocas. De acuerdo, como puedes ver, la cocina y el salón están en la misma sala, sin pared alguna que las separe.

En el salón había un sillón grande negro en frente de una televisión que colgaba del techo, y al lado del sillón largo, pequeños sofás del mismo color. En medio de todo eso una mesa no muy grande gris encima de una alfombra.

Subieron unas escaleras y había un pasillo estrecho, en el lado izquierdo, tres puertas de tres colores distintos, la primera verde, la segunda roja y la tercera blanca. En el lado derecho, dos puertas negras.

- En esas puertas de colores están las habitaciones – dijo Strange – la tuya es la verde, en las demás están las habitaciones de las otras dos personas que viven aquí, ya los conocerás.

- Pero, ¿quiénes son? – preguntó Byron con mucha intriga.

- Son dos chicos que tienen tu edad – respondió Stephen – pero eso no es lo importante ahora, sigamos con el tour.

En una de las dos puertas negras estaba el baño y en la del final del pasillo estaba la habitación del doctor.

Al finalizar la guía por la casa bajaron los dos al primer piso, Stephen se quedó en el salón y Byron cogió su maleta y la llevó a su habitación. Al entrar contempló las 4 paredes blancas que rodeaban su aposento.

Byron Love - La Espada PlateadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora