Ya sé lo que tú quieres...- comienza a caminar hacia el y Facundo lo sigue mirando con desconfianza pero no se mueve de su lugar.
- tu quieres que lo haga yo...
Facundo otra vez estaba estático en su lugar como cada vez que el castaño invade su espa...
Facundo se encontraba caminando por los pasillos de la escuela tranquilo hasta que algo o mejor dicho alguien llamó su atención, la señora Mulder venía caminando en su dirección a pasos acelerados y se la veía preocupada, estaba por esconderse para evitar que lo salude y así evitar que toda la escuela sepa que ella lo conoce, pero luego recordó que ella nunca lo vio así y respiró tranquilo cuando esta pasó por su lado ignorándolo completamente.
Pero ahora había algo que se instaló en su cabeza y esa era la duda de saber ¿porque la señora estaba ahí? porque esa cara? y si le había pasado algo a Lorenzo y el no estaba enterado porque ahora que lo recuerda no lo vio en la entrada como siempre, caminó detrás de la madre de Lorenzo a pasos lentos siguiéndola para ver hacia donde iba y se preocupó más al ver que iba hacia la enfermeria, entró y el ya no pudo saber que ocurría ya que no tenía motivos para entrar ni sabría que decir si alguien le pregunta que necesitaba del lugar, el timbre sonó por lo que se dio media vuelta y caminó nuevamente hacia el salón donde tendría su primera clase del dia, matematicas, no era su materia preferida, pero debía irle bien si quería seguir la misma carrera que su abuelo paterno.
Economía y contaduría.
Obviamente en todo el dia fue mas lo que estaba distraido que prestando atención, pero ya se encargará de pedirle a su padre que le consiga toda la información, cuando el timbre sonó tomo sus cosas y se fue en dirección a su moto en la parte delantera del colegio junto al auto de su padre, para irse directo a su casa.
Las horas pasaron y Facundo nuevamente se encontraba frente al espejo mirando su atuendo, creía que este ya era demasiado, pero de seguro a Lorenzo le encantará no verlo con ropa negra, se sorprendió al pensar así y sacudió su cabeza para despejar ese pensamiento de su cabeza, se sacó el buzo decidido a no ir pero a los pocos minutos se lo volvió a poner maldiciendo su maldita existencia y a Lorenzo por hacerlo vestirse así.
Pero luego se arrepintió por lo que antes de pasar el marco de la puerta de su cuarto volvió a entrar para cambiar su atuendo decidiendose por un buzo negro con la palabra Fila en blanco por todos lados, un pantalón de gabardina negro, zapatillas blancas al igual que su gorra, se colocó perfume nuevamente y salió de su casa satisfecho con el resultado, una vez frente a la puerta de la casa de su dolor de cabeza vio al señor Mulder salir por lo que se apresuró a llamarlo para poder saludarlo y saber si está bien y solo.
¡¡Señor Mulder!!...
Hola chico, todo bien?...- asentí.
- vienes a ver a mi hijo?..- vuelvo a repetir el movimiento.
- genial porque tengo que ir a la farmacia y me daba cosa dejarlo solo, mi señora tenía médico y como tardaron mucho en darle el turno no quiso perderlo....
Entiendo...
Te abro y te quedarías con el?....- asintió sonriendo.
Si obvio señor...
De acuerdo, pasa, está en su cuarto...- se fue y yo entre a la casa cuando el portón del garage se terminó de cerrar.
Una vez dentro caminó tranquilo hasta el cuarto de Lorenzo llevándose la sorpresa de que este había pintado su cabello de negro o castaño no lo distinguía bien pero daba igual porque ambos le quedaban genial y que al igual que el tenía tatuajes, lo observó un momento hasta que finalmente se decidió a sentarse junto a él.
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