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Puedo ser más profundo.

Como el perdón en el ultimo aliento de un moribundo

Sabiendo que vino desde lo más profundo de su agonía, consiente de que se le acababa el mundo.

Porque no sobraron los segundos para explicar lo que sentía, pero si sobraron los instantes para mantenerlo vivo mientras moría.

Porque al final la ironía fue, que lo mas lindo que recordaba, y fuerzas le daba; era a su hija pequeña feliz en navidad cuando los juguetes bajo el arbolito encontraba.

Pero su hija creció y las ilusiones se acababan, se enamoraba de un joven con fulgor y a él, solo, tristemente todos a los que conocía lo abandonaban.

El dinero que busco mientras otras personas a su hija la cribaban, no lo dejo, pero si lo olvidaron las personas a las que él se lo entregaba...

Porque vivió creyendo que su valor el dinero era quien se lo daba, y dejo las emociones y el amor a un lado porque según él, "no servían para nada".

Al final el sol se escondió en un largo día que se sintió que duro 60 años

Y creí que lo recordarían por lo que entrego, pero me mentí, porque era un cruel engaño.

Al final su ausencia dejo el corazón de una niña con grandes vacíos y mucho daño

Y el dinero que el le regalo, no quedo de otra; que tirarlo por el caño.

Mil Poemas Y Un Corazón RotoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora