SEPTIEMBRE

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Es triste lo leve que permanece tu mirada culpable en mis ojos.Me cuesta ver cómo se dilatan tus pupilas y a su vez, dejan salir gotas de lágrimas con un leve aroma a arrepentimiento. Tu vista siempre estuvo en el suelo, tu respiración lenta, tus manos rígidas y tú espalda curveada en dirección a tus rodillas. ¡Qué incómoda era la situación! Tus labios intentaban hablarme. Murmuraban explicaciones como buscando un buen argumento, pero tú no encontrabas palabras delicadas que decir. Porque sé… que no quieres hacerme daño. Se nota como la verdad te pesaba en la espalda, como tiraba y jalaba tus hombros al suelo, y cómo mi presencia sacude tu cuerpo haciendole temblar con sutileza.Es que sé que sabes lo que me debes de decir, y yo le ruego a tu boca con desdén no pueda pronunciarlo. Tus labios no se quieren abrir, pero tu corazón se marchita y se pudre, y no tiene más alternativa que tener que sacarlo; ¡YA NO TE AMO "TU NOMBRE"!. Exclama, expulsando una declaración de odio, tristeza, furia y de arrepentimiento... Y aunque la expresión desprendió cada fibra de mi corazón, desbordando mis sentidos y sumergiéndome en la eterna sensación de sueño... Logré distinguir en el tono que aún permanecía en el ambiente, en las ondas de sonido que se desvanecían en la sala , en los últimos rastros de tu aliento, aunque tenue y incompleto.Una esperanza que me deja saber que aunque ya no quieras estar conmigo, en realidad te duele mucho el perderme. Es triste lo leve que permanece tu mirada culpable en mis ojos.Me cuesta ver cómo se dilatan tus pupilas y a su vez, dejan salir gotas de lágrimas con un leve aroma a arrepentimiento. Tu vista siempre estuvo en el suelo, tu respiración lenta, tus manos rígidas y tú espalda curveada en dirección a tus rodillas. ¡Qué incómoda era la situación! Tus labios intentaban hablarme., Murmuraban explicaciones como buscando un buen argumento, pero tú no encontrabas palabras delicadas que decir. Porque sé… que no quieres hacerme daño. Se nota como la verdad te pesaba en la espalda, como tiraba y jalaba tus hombros al suelo, y cómo mi presencia sacude tu cuerpo haciendole temblar con sutileza.Es que sé que sabes lo que me debes de decir, y yo le ruego a tu boca con desdén que no pueda pronunciarlo. Tus labios no se quieren abrir, pero tu corazón se marchita y se pudre, y no tiene más alternativa que tener que sacarlo; ¡YA NO TE AMO "TU NOMBRE"! Exclama, expulsando una declaración de odio, tristeza, furia y de arrepentimiento… Y aunque la expresión desprendió cada fibra de mi corazón, desbordando mis sentidos y sumergiéndome en la eterna sensación de sueño… Logré distinguir en el tono que aún permanecía en el ambiente, en las ondas de sonido que se desvanecían en la sala, en los últimos rastros de tu aliento, aunque tenue e incompleto…Una esperanza que me deja saber que aunque ya no quieras estar conmigo, en realidad te duele mucho el perderme.

Mil Poemas Y Un Corazón RotoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora