(Tweek x Craig) - La nieve y el Café

Kenny - Tercera parte

Lunes 5 : 30 am

La nieve mojaba sus zapatos, Kenny podía notar como sus pies se congelaban al igual que el temblor en su espalda, pero no dimensionaba los grados de frío que cubrían su cuerpo hasta que su garganta se irritó. Suspiraba humos cálidos de su aliento que cada vez se volvían más grandes, aunque estaba con su usual campera naranja y guantes sabía que si seguía acostado en ese piso moriría de hipotermia, pero a él no le importaba. Había muerto demasiadas veces para que una más cambiase el dolor físico que le generaba levantarse. Su boca sangraba y palpitaba su ojo derecho por el golpe que había recibido de su padre. La gente pasaba a su alrededor en la calle sin voltear a ver su cuerpo, no existía alma bondadosa que se arriesgase a tener problemas por alguien que no conocía.
-¿Existe de casualidad alguien que me conozca que si se arriesgaría?- Pensó y su garganta le advirtió que lloraría. Sus amigos vivían ignorando su muerte, su familia no le interesaba sus emociones ni carencias y no quería molestar a Butters con problemas. -No puedo recurrir a nadie- Divagó, hasta que un recuerdo le llegó, era Craig abrazándolo mientras lloraba. -¿Por qué recordé eso?- Sintió su rostro empapado y vista borrosa. Los meses en los que Craig estuvo con él, fueron los mejores que había tenido en todos sus 17 años. Aunque solo hayan tenido sexo, conversado y bebido, se sentía querido en cierta manera. La preocupación de Craig cuando él se encontraba mal había generado un bienestar que no conocía. Era consciente que su amigo seguía enamorado de su ex, Tweek. Por eso cerraba su corazón, pero deseaba verlo. Anhelaba volver a sus brazos para llorar o al menos besarlo. No veía motivos para no encontrarse con Craig, ya que seguía soltero desde que terminó con Tweek. Quito su celular de su campera y detuvo sus intenciones. Reflexionaba en que aunque reconocía que le gustaba, no sería correspondido y tener sexo con quien quería, pero no le ve de esa manera le haría más daño de lo que sentía ahora. Salió de la aplicación de mensajes y busco su rostro entre las fotos que almacenaba. Aquellos recuerdos consentidos de cuando juntaban sus cuerpos dos veces a la semana después de la escuela. El aroma a sudor y perfume mezclado con el masticado de sus labios. Era Craig besándolo con una sonrisa mientras mostraba el dedo del medio hacía la cámara. Kenny sonrió y deslizo la imagen, cualquiera que viese esas fotos pensaría que eran pareja desde hace años. Como violento impulso de recuperar aquella emoción, sentirse nuevamente como un potencial novio, lleno de contradicciones, abrió la aplicación de mensajes nuevamente y le mando aquel escrito que deseaba que sea contestado : Quiero verte.