TATTOOS || Eddie Munson ||

19

La camioneta de Eddie estaba aparcada frente al lago, las puertas traseras abiertas y el muchacho acomodando el montón de frazadas, almohadas y sacos de dormir que se apilaban unos entre otros, hoy era la lunada que se daba con los de ultimo año, era una tradición entre los jóvenes, Emma le había insistido demasiado a Sabrina en lo divertido que sería pasar la noche ahí, y debido a que no tenían otros planes todos accedieron.

Aunque el único problema es que no fue fácil convencer al señor Brown de la idea, además de que no se sentía muy a gusto con que su hija y Eddie pasaron una noche fuera de casa, sin su supervisión, ya que desde la noche en que Eddie recibió su primer tatuaje, hace una semana, ambos jóvenes habían compartido días, tardes y noches juntos pasando el tiempo hablando acerca de el futuro de Sabrina, ayudándole a Eddie a componer canciones o simplemente recostados en el sofá viendo lo que fuera que estaban pasando en televisión.

-Yo estaré con ellos señor Brown.- le había jurado Emma mientras alzaba la mano.- Me aseguraré de que todo sea una sana convivencia entre tres jóvenes amigos.

-Emma...- le codeó Sabrina poniéndose una mano en el rostro por la vergüenza.- Estaré bien papá, no tienes que preocuparte tanto.

-Te quiero de vuelta a las 9 de la mañana.- fue la única condición que le puso, y así lo cumpliría.

Sabrina se llevó las manos a la boca, soplando e intentando obtener algo de calor, frotando para crear fricción.

- Estamos en pleno verano, ¿por qué hace tanto frío?- se quejó bajando de la Van, mirando a Emma y a Garret, quien había sido convencido por Eddie de acompañarlos prometiéndole que no estaría solo.

-¿Será porque estamos en un lago en plena noche?- dijo sarcásticamente la rubia mientras se ajustaba la chaqueta de mezclilla.

Emma aún no regresaba a su casa, aunque hubo varios intentos por parte de la madre de Emma para que esta volviera, incluso hubo una confrontación que se volvió algo física, pero el señor Brown había logrado separar a ambas mujeres, y después de intercambiar una conversación con la mamá de ella lograron terminar en un acuerdo donde la joven volvería con su familia al terminar las vacaciones.

-Emma.- le gritó Rory, una de las amigas de la rubia se acercaba corriendo con los brazos extendidos para abrazarla.- Llegaste justo a tiempo, ya casi inicia el juego, vamos.

-Ven conmigo.- respondió Emma tomando del brazo a Garret para arrastrarlo con ella y Rory, dejando a Sabrina sola.

-Espero no pasemos frío, de todas formas siempre puedo prender la calefacción de la Van.- exclamó Eddie saliendo de la parte delantera del vehículo y colocando su chaqueta de cuero en los hombros de Sabrina.- ¿Y Garret?

-Me temo que Emma te lo ha robado por la noche.- dijo girándose a verlo con una sonrisa.- Tendrás que conformarte con mi compañía.- bromeó.

Agradecía que Eddie se había atrevido a dar el primer paso en lo que fuera que tenían, no habían conversado formalmente acerca de si se consideraban aún amigos o pareja, pero a ninguno parecía importarle el nombre de la etiqueta.

La música sonaba fuertemente unos metros más adelante, y una luz cálida iluminaba a los adolescentes que alrededor de la fogata danzaban al ritmo de lo que estuviera sonando en la tosca y grande bocina portátil, había gente que solo estaba sentada frente al fuego besándose, y algunas de las parejas se estaban alejando para continuar con su sesión de besos en un lugar más privado.

-¿Estas bien?- preguntó Sabrina notando que Eddie estaba con una expresión de sorpresa ante todo lo que sucedía, le tomó de la mano para tranquilizarlo.