s |⌇ ❝ Su amor fue más complicado que la vida misma pero valio la pena, después de tanta ilusión, Dorian Swan pudo volver a amar con total confianza y está vez, si encontro a los verdaderos amores de su vida ❞ ᭨ི ྀྀ
⇨«mikaelson,stefansalvatore,kaip...
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Dorian repasaba una y otra vez su lista de "cosas que debo llevar el primer dia de clases" esperaba no haber olvidado de por si poner algo en la lista que se supone que era para prevenir olvidar sus pertenencias.
Solto un suspiro intranquilo, estaba muy nerviosa, bueno, ansiosa pero una vez entro al Instituto todo rastro de inseguridad quedo atras, aun que sentía las miradas de los adolecentes en el pasillo, aquello le recordo de inmediato a Forks por ser un pueblo pequeño, todos se conocían entre todos y darse cuenta de que habia alguien nuevo en el pueblo era bastante fácil. Sonará creiada pero estaba segura que era el nuevo chisme del lugar, lo mismo le habia pasado a su hermana en Forks, incluso días antes de llegar, se hablaba sin disimulo de la llegada de una de las hijas del Sheriff.
No queria preguntar donde estaba la dirección, no era necesario hacerlo, en su caminata de falsa confianza, logro identificar el lugar donde supuso que tenia que hacer su trámite de admisión. Se adentro a la habitación y llamo la atención de la secretaria con un ruido de garganta.
──buenos días, soy Dorian Swan, vengo a entregar mis papeles de admisión
──oh claro, dejame lo reviso, cariño──tomo los papeles que le tendio en la mano, ojeandolos ligeramente irritada. Supuso porque se estaba anotando a último momento, lo ignoró.
Observó a su alrededor, buscando entretenerse en lo que la mujer terminaba con su papeleo, se pregunto ¿qué materias tendria primero? Esperaba ansiosa que no fuera matemáticas, no creía poder soportarlo siendo su primer dia.
La mujer retuvo sus papeles unos minutos más, ojeando y escribiendo cosas en su computadora, luego sello algo y le tendió una hoja con lo que creyó eran sus horarios.
──ten, aqui están tus clases y el número de tu casillero con su combinación
──gracias──susurró sonriendole.
Dio media vuelta leyendo sus horarios, dirigiéndose hacia la salida vio que para su suerte no le tocaba matemáticas en su primera hora, por primera vez la suerte Swan no le jugaba en contra.
Tal vez haya sido suerte, destino o la torpeza Swan, pero no vio hacia adelante cuando quizo salir de la dirección, en consecuencia, habia chocado contra lo que penso que era una pared hasta que la sintio vibrar y soltar ruiditos casi sordos que podrian confundirse con una risa, era un risa y él en definitiva no era una pared, una pared no tendría aquella mirada verdosa tan bonita cómo intensa. En sus labios, alojaba una sonrisa armoniosa que le transmitía una sensación agradable y calida a su corazón.
El chico le miraba confundido con un brillo extraño en sus ojos, aun que pudo apreciar un poco de miedo en ellos, cosa que la confundio pero no le presto atención.
No era su asunto.
Sintió una puntada en su pecho ante el pensamiento, nego mentalmente deshaciendose del raro pensamiento.