Capítulo 4: Ojo por ojo...

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- Jared... -Katharina iba rodeada de hermosas muchachas pero ella resaltaba en todas, o al menos eso pensó Jared que después de todo terminaría aceptando que aún le gustaba lo que veía... a fin de cuentas fue por ella por quien dejó las relaciones de una noche que había mantenido por años y se fuera por algo más serio, aunque al final solo durara unas semanas.

- ¿Qué haces aquí? -preguntó saliendo de la sorpresa.

- Pues me invitaron... vine con unas amigas... -de repente Hilary apareció en medio de todos y empezó a saludar a todas las chicas incluyendo a Katharina.

- Vamos -señaló ella conduciendo a todas a donde se encontraban los demás.

- ¿Vamos? -preguntó Katharina.

- En realidad iba de salida -habló Jared pero la rubia muchacha lo tomó de la mano.

- ¿Por favor? -Pidió- Me aburriré sin ti y además... debemos hablar...

- ¿Sabías que estaba aquí? -preguntó un extrañado Jared.

- ¿Qué? ...No, claro que no... fue una casualidad -dijo algo nerviosa- pero si estamos aquí entonces...

- Katharina será mejor que me vaya.

- Jared vamos... la pasaremos bien -los azules ojos de Jared quedaron por un momento perdidos en la belleza de Kath, como la solía llamar, e inevitablemente no le pudo decir que no. En ese momento poco le importó Bill, sobre todo por el hecho de que estaban peleados... tan sólo se dejó guiar por la mano y el aroma de su ex novia sin poder evitar pensar en lo hermosa que lucía y en que aún le gustaba y mucho en realidad.

Cuando los vieron llegar, Georg, Gustav y Tom se pusieron en pie para recibir a las chicas que llegaban. Una de ellas era morena, con unos ojos verdes espectaculares y tan sólo llevaba puesto un diminuto y ajustado vestido negro que dejaba al descubierto sus largas y formadas piernas, Georg la miró con atención, aquella sería suya. La siguiente era una pelirroja que a Gustav le pareció adorable, su rostro estaba cubierto por algunas pecas y eso le encantó, al igual que su amiga tenía un cuerpo de infarto y era muy hermosa; no cabía duda de que eran modelos y amigas de Hilary.

Al final Bill también se puso en pie saludó a cada una, aunque en realidad ni siquiera prestó atención a sus nombres. Jared y Katharina que habían estado detrás fueron los últimos en llegar y cuando Bill vio que su novio volvía no pudo evitar que sus ojos brillaran por la emoción, le debía unas disculpas.

Jared pudo ver como a Bill se le iluminaba la mirada y como sus ojos estaban cubiertos por una fina humedad como si intentara reprimir las lágrimas, pero al instante esa mirada dulce y de culpabilidad se convirtió en una de ira en cuanto Bill notó como la mano de Jared iba unida a la de una tipa de rubia cabellera.

Jared rompió el enlace apenas vio que la mirada de Bill se dirigía hacia su mano y trató de mirar sus ojos pero el menor estaba viendo fijamente a Katharina quien lucía confundida.

- Y ella es Katharina -mencionó Hilary a lo que Bill abrió los ojos lo más que pudo, aquello había sido un golpe bajo y dolía, de verdad dolía.

- ¿Katharina? -preguntó confuso Georg, sólo necesito unos instantes para darse cuenta de quién era esa Katharina. - Oh -exclamó.

- ¿Jared qué tal si vamos a otro lugar a hablar? -él la miró y asintió, sentía que tenía que alejarse de la mirada de Bill. Jared empezó a caminar y Katharina lo siguió, ambos llegaron a una mesa aislada. Aún hacía mucho ruido pero Jared no quería salir del club, quería estar pendiente de lo que hiciera su novio.


***


- ¡¿Qué mierda hace ella aquí?! -susurró Bill al borde de las lágrimas, Tom estaba a su lado y se había vuelto su apoyo moral.

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