¡ Por favor, no me abandones!.

Capítulo 19: Shadow Kurumi vs. Kurumi

- Claro que no, tú no eres yo de ninguna manera. –

Al decir esto, aquella figura oscura de Kurumi comenzó a reír de forma más estridente, todo a la par que aquella figura era rodeada por todo un mecanismo de reloj. Más no obstante, a diferencia de Zafkiel, el mecanismo de este reloj era un más completo que el de ella. Llegando incluso a formar una especie de mecanoide de engranajes de reloj.

Todo a la par que sus ojos cambiaban a ser ambas pupilas los relojes que tanto caracterizaban a su ángel.

- Bueno, esto será más rápido de lo que me gustaría. –

Susurro aquella figura oscura mientras disparaba con su pistola, solo para que Kurumi rodara a como pudo hacia un costado para evitar ser acribillada, pero no pudo evitar sentirse abrumada al ver el daño del disparo.

- Ay carajo. –

Susurro Kurumi mientras intentaba huir de aquella sombra, intentando inútilmente una vez más de tratar de activar su ángel, esquivando por mera suerte los disparos de la sombra. Sin embargo, el camino de huida termino, pues mientras corría termino chocando contra la puerta que la separo de Zero.

- ¡KURUMI! –

Fue la voz de Zero, a lo cual la pelinegra miro que ahora la puerta era traslucida, al parecer toda su oscuridad se aglomero en aquella figura que ahora la perseguía. Pero, antes de que pudieran decir algo más, una de las balas de la sombra roso la mejilla de Kurumi esto espanto a Zero. Esto le confirmo que ahora ella se estaba enfrentando a su oscuridad.

- Kurumi, huye. Intentare ayudarte tanto como pueda, pero no dejes que te haga algo. Por favor. –

Pidió el castaño mientras enviaba más de su mana lanzando un destello que dejo ciega a aquella sombra, permitiendo a la pelinegra ocultarse de su otra yo. Todo mientras ahora, en aquel espacio mental se concentraba de sobremanera, era fácil mantener el flujo simple y constante. Pero, tuvo suerte con hacer algo como ese destello. Pues una cosa era mantener el especio mental y actuar en el suyo, pero, al este ser un especio mental ajeno, no podía actuar tan libremente. Pues cada acción costaba el doble de energía además de tener que limitarse bastante en su accionar.

Como agente externo a la mente de Kurumi, los daños que provocara en la mente de la chica podían ser permanentes o acarrear más consecuencias, además de tener que transmitir la energía del ataque y la necesaria para mantenerse presente en aquel espacio mental.

Sin embargo, cuando estaba intentando concentrarse, escucho como algo golpeaba con intensidad frente a él, y esto era parte de la sombra de Kurumi. La cual estaba disparando inútilmente para dañar a Zero, era claro para este ver que solo lo hacía por ira.

- ¿Idiota, porque no me dejaste acabarla? –

Pregunto molesta aquella sombra a lo cual Zero la miro de forma fría a la par que concentraba más energía en sí mismo.

- No seas estúpida, la respuesta es más que obvia. –

Susurro el castaño mientras que se sentaba ignorando los insultos de aquella sombra, todo mientras ahora buscaba deshacer el sello de los poderes de Kurumi. En este momento él no podía ayudar a Kurumi, así que tenía que devolverle sus capacidades de combate.

La sombra al sentir el aumento de energía de Zero forzó su poder para hacer que aquel campo que mantenía lejos a Zero, lo rodeara impidiéndole atacar, lo que solo provoco que sonriera levemente por eso. Esto le daría una protección extra para poder manipular apropiadamente su mana a través de la mente de Kurumi.

Shadow Kurumi decidió ignorar al chico de momento, pues su objetivo real era la verdadera Kurumi la cual se encontraba oculta bajo una de tantas aquellas "ramas" de memorias, estaba respirando pesadamente pues corrió tanto como pudo, aunque. Su descanso seria interrumpido al sentir un pequeño choque eléctrico en toda su mente, comenzando escuchar la voz de Zero en el ambiente.