Prólogo

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-¿A caso somos dueños de nuestro propio destino?¿A caso somos libres de poder elegir nuestros pasos a seguir?

Son preguntas que me han dado vuelva por la cabeza desdé que soy pequeño y tengo noción de lo que sucede a mi alrededor.

No tuve la suerte de nacer en una familia normal, soy el segundo hijo del feliz matrimonio de Valería Cairone y Felipe Trujillo, mi madre es una mujer de carácter fuerte y aguerrido, su humor es muy raro y quizás sea lo que heredé de ella, si en pocas palabras tuviera que describir a la mujer que me dio la vida serían, audaz, alexitimica y de gran corazón, mi padre era su contra parte perfecta, tenía un humor alocado y siempre tenía una sonrisa dibujada en su rostro, los recuerdos que me quedan de él son los más divertidos de mi vida.

Su muerte fue un golpe duro para nuestra familia, pero en especial para mí hermana mayor Samaria.
Apenas su cuerpo fue depositado en el mausoleo familiar Samaria tomó rumbo a Roma para iniciar una nueva vida., Yo quedé con mi madre en Tucumán una provincia llena de caos y secretos ocultos.

Con mi madre y otras familias amigas, luchamos para mantener la paz y frenar el caos, tratamos de revelar los secretos de ésta pequeña cuidad que se siente mi jaula.

Mi juventud está llegando a su final y estoy próximo a cumplir 22 años, aún no tuve mi amor de película o la oportunidad de ir a una fiesta, no tuve la oportunidad de hacer algo rebelde o que me diera motivos de un castigo.

Siempre obedecí todas las órdenes de mis superiores, obedecí y traté de dar lo mejor de mí para complacer los ojos de quienes constantemente ponían una fuerte presión en mi.

Siempre estaban en mi las ideas de seguir los pasos de mi prima Noelia, ella fue la que, para mi, tuvo una suerte única que envidio, está prohibido hablar de ella pero de vez en cuando, traigo a colación los recuerdo que tengo de ella solo para hacer enfadar un poco a mí tía.

Noelia fue la única que tomó una decisión correcta, deseaba escapar de un mundo para el que nunca iba a estar preparada, un mundo que la llenaba de miedos.

Mi vida no es tan caótica como parece, tengo una doble vida que va de la mano con mi vida secreta, doy clases de catecismo en la iglesia del Inmaculado corazón de María, también soy creador de un comedor barrial para los sectores más vulnerables de mi provincia, podría decir que llevo una vida religiosa muy aceptable para los ojos de Dios, No todo en mi vida es divertido, pero estas pocas acciones me acercan al prójimo y me dan alegría.

Ayudar a los demás es algo que heredé de mi abuela sin dudas, Bianca Trujillo, una mujer que me daba contención en momentos de tormento, cada vez que recuerdo sus abrazos y caricias mi piel se eriza como si de alguna forma ella me diera una clara señal de que aún está conmigo desdé el más allá.
Ella era una mujer rebelde, una mujer de corazón leal y puro, es inevitable el dolor que aún me pesa su pérdida,
Siete años son los que cuento sin su presencia, siete años son los que cuento sin mi mayor pilar.

-¡Okey! Niños por favor tomen asiento y comencemos la clase, hoy hablaremos de los arcángeles.

Ver sus rostros expectantes para escuchar una de mis historias me hace feliz, cada sábado trato de enseñarles un poco más sobre quién es Dios, en lo posible darles una guía de lo que está bien y de lo que está mal, no me gusta darles órdenes tan estructuradas por qué son libres y de corazones sin pecado.
No me gustaría que piensen que todo lo que dice un hombre vestido de santo a miles de fieles es cierto., Quiero que entiendan que Dios no está unido estrechamente con la iglesia, Dios está en nuestro corazón, Dios está en nuestras mentes y en cada respiró.
Dios está en todos lados menos en las iglesias de oro donde la codicia de quienes predican en su nombre cometen terribles pecados.

Le Mat  - El clero de San Pedro -Donde viven las historias. Descúbrelo ahora