Renacimiento de los últimos días: Llevo a mi familia a luchar contra los zombis

Capítulo 12

A la mañana siguiente, Su Jin desayunó temprano y se marchó del hotel.

Zhang Chu Yang también llegó al hotel a la hora acordada, pero ¿por qué estaba Wang Zhu también en su coche? ¿También vino a despedirla?

Zhang Chuyang dijo avergonzado: "El señor Wang se puso en contacto conmigo esta mañana y me dijo que iba a S City en viaje de negocios, y los dos teníais horarios de vuelo similares, así que pensé en enviarla juntos, no te importa, ¿verdad?".

Aunque le importara, ¿podría decirlo? Zhang Chuyang es un idiota. Pero en realidad no le importaba, y se sentía más a gusto con Wang Zhu, aunque sospechara algo, no haría nada contra ella.

"No me importa, señor Wang, buenos días", dijo Su Jin sin cambiar la cara.

"Buenos días", responde Wang Zhu, que sigue sentado en la fila de atrás, en el asiento del conductor, con un ordenador en el regazo. Le quitó el maletín negro y volvió a sentarse, indicando a Su Jin que se sentara a su lado.

Su Jin, que había querido sentarse en el asiento del copiloto: ......

Cuando el coche llevaba más de diez minutos conduciendo, Su Jin entregó las llaves del almacén a Zhang Chu Yang. Como si Wang Zhu no lo hubiera visto, seguía tecleando correos electrónicos en su ordenador.

"¿Cuándo va a disponer que alguien saque mercancía de su almacén?". Zhang Chu Yang no pensó mucho en preguntar.

¿Almacén, mercancías?

La mecanografía se detuvo bruscamente y Wang Zhu levantó la cabeza confundido para mirar a Su Jin a su lado.

Hey, lo que viene debe venir.

Su Jin tuvo que volver a explicárselo a Wang Zhu.

Wang Zhu no sabía si creérselo o no, y no dijo nada más tras escuchar la explicación de Su Jin.

"No lo sabes, ¿verdad? El supermercado que va a abrir la familia de Su Jin es muy grande, he oído que hay dos plantas". Si no estuviera conduciendo, Su Jin pensó que Zhang Chu Yang estaría bailando por ahí.

Su Jin se sujetó la frente: "Te avisaré cuando haya hecho los preparativos, mientras tanto tendré que volver a comprobar la situación".

"De acuerdo, jefe Su, prometo estar a su servicio", Zhang Chuyang se dio una palmada en el pecho para demostrar que era muy de fiar y prometió completar la tarea para Su Jin.

El vuelo no llegaba tarde por la mañana, así que Su Jin se despidió de los dos hombres y entró para recoger su tarjeta de embarque y prepararse para subir al avión.

Antes de subir al avión, llamó a Lu Hao, que dijo que la recogería a la hora prevista, y Su Jin sintió que el corazón le latía más deprisa al pensar que pronto se verían. La idea de ver a su marido, al que no veía desde hacía dos años, hizo que Su Jin se sonrojara en un raro momento.

El avión cruzó el cielo y aterrizó lentamente. Por fin estábamos de vuelta en Ciudad H.

Su Jin bajó del avión y olió el aire familiar que la rodeaba, había pasado mucho tiempo, echaba mucho de menos ese olor. Su Jin ya había estado en otros lugares, pero siempre sintió que el aire de Ciudad H era diferente al de otros lugares, era un soplo de hogar.

Probablemente debido al fin de semana, el punto de recogida estaba lleno de gente, pero Su Jin no vio la silueta de Lu Hao.

¿Podría ser que se perdió de nuevo ......

Su Jin abrió la localización compartida de su teléfono para enviársela a Lu Hao y se encontró con el puntito verde que representaba a Lu Hao moviéndose en dirección contraria a ella.