Javier Hernández, un joven futbolista mexicano, termina siendo fichado por el Real Madrid, sin saber que ahí encontraría al hombre causante de sus suspiros y noches en vela por inundar sus pensamientos de una vida donde ambos fueran felices, juntos...
Aclaro que esté fic sale en su mayoría de mi imaginación, hay pocos sucesos reales que trate de incluir lo demás ya es mera cosa mía.
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Conocido como un gran jugador de su país y de su selección, Javier Hernández, quien se ganó el cariño y la admiración de muchos en casa (su país) y en el exterior durante una carrera de solo ocho años desde su debut profesional, asistió a 3 de las copas del mundo; Javier se convirtió en el máximo goleador de la selección mexicana, pero no fue suficiente con serlo. Y cuando se presenta una gran oportunidad, pensamos demasiado en no desaprovecharla, eso fue lo que hizo Javier. Durante algunos años fue llamado por varios clubes, buscando que se uniera a ellos, claro que paso por algunos cuantos, pero fue hasta 2014 que Javier, aceptaría firmar el contrato con "El Real Madrid" viajando a otro país y continente después de una triste despedida con sus compañeros y familiares, sabía que siempre era duro, a pesar de ello debía partir y comenzar en un nuevo club.
Así comenzó su viaje a Europa, sin extenderse a mucho, fue así de simple, yéndose a un nuevo país donde no conocería a sus nuevos compañeros de equipo, debía formar nuevos lazos con nuevas personas.
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Su llegada al equipo no fue tan mala como lo esperaba, fue bien recibido por los que serían sus compañeros durante las temporadas que jugará con ellos. Una cálida bienvenida, en pocas palabras. Agradecía que hubiese salido todo de esa forma.
Hernández, creyó que podría adaptarse pronto al nuevo cambio, su meta ahora era llevarse bien con sus compañeros, así tendrían una mayor confianza para sus próximos partidos y mejoraría su estrategia, si quería que algo funcione debe formar lazos.
Y era de esperarse, encajo con ellos, su vitalidad se contagiaba, esa sonrisa y risas acompañadas del humor tan característico del mexicano alegrarían los días de cualquiera.
Todo iba bien, hasta que se junto por primera vez con él.
Cristiano Ronaldo.
Sabía que llevaba más de 4 temporadas con el equipo, sin lugar a duda era un hombre que a primera vista le causó gran interés, ansiaba conocerlo y llevarse bien con él, compartir momentos buenos como compañeros de equipo que eran, y en una de esas festejar a su lado los goles próximos ya que veía venir. En pocas palabras, Javier lo admiraba desde antes el nombre del portugués era sonado en todo el mundo.
Javier tuvo la dicha de presentarse con el portugués días después de haber llegado a Europa. El mexicano llevaba al menos cuatro días, y aún faltaba mucho por conocer de su nuevo club, ese día comenzaba con conocer a aquello que habían faltado por saludar y presentar. Uno de ellos fue Ronaldo.
Ambos tuvieron que ser presentados días después en una estancia apartada en oficinas, y ahí estaban los dos viéndose.
— Él es Cri... —quien estaba por presentarlos fue interrumpido por el mismo portugués.—
—Cristiano Ronaldo. —Se presentó por si mismo.—
— Javier Hernández, un gusto. —Una sonrisa un poco nerviosa por la emoción se le escapaba.
Ronaldo sonrió al mexicano que se uniría con ellos al equipo. Estrecharon sus manos, sin saber que desde ese momento comenzaría una amistad que llegaría a mucho más rompiendo límites y algunas barreras que se pondrían ellos mismos.
Javier ante ese comienzo solo sintió que algo iría de maravilla durante los días próximos a sus encuentros en cada entrenamiento, ese hombre portugués despertó en el una pequeña chispita y llama de sentimientos, quedando así un poco aturdido con todos sus pensamientos de si era por admiración al ver un gran jugador.
Solo hay algo de lo que está seguro. Esa noche no logro dormir.
Bien es sabido que cuando ocurre eso, quiza sea porque alguien más piensa en ti, y quién sabe, quizá y ese guapo portugués pensaba en él. Esas eran ahora las fantasías y pensamientos del joven mexicano.
Continuará...
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Basta, no tenía tanta inspiración y estaba viendo pinocho.
Esto es una parte del comienzo, y luego publicaré más. Cómo siempre, lamento las faltas de ortografía, soy escritor prematuro. Tomen este primer capítulo como un prólogo más para comprender los hechos de que Javier este con Cristiano.
Edit: ¡Lamento haber anulado anteriormente la publicación! Fue un error, al no percatarme de que lo había anulado de publicados, ¡Pero aquí está de nuevo el fic!
