CONFESIONES ANONIMAS

Carta 17

Por favor, no me taches de loco, lo que estoy a punto de contarte me sucedió de verdad, no fue un sueño, no estaba tampoco bajo el efecto de alguna sustancia o bebida, no sé que crajos paso, pero sé que es real.

Hace un par de días me encontraba aburrido en mi cuarto, no tenía nada que hacer y mis padres estaban trabajando, decidí llamar a unos amigos con la idea de reunirnos a pasar el tiempo, una hora más tarde ya iba en camino al centro comercial para reunirme con Óscar y Alejandro mis mejores amigos, el plan era ver una película de terror, cuando nos encontramos todo fue normal, hasta que entramos a la sala del cine, justo en el momento que me acomode en mi silla me dieron ganas de ir al baño, pensé que si iba rápido llegaría incluso antes de que empezaran los anuncios de películas en estreno más adelante.

Al llegar al pasillo que me conducía al baño, vi un muro extraño, tenía un color mucho más oscuro que los demás muros, no le preste mayor atención seguramente estaba recién pintado, pero nada más acercarme sentí ganas de tocarlo, la verdad no sé porque razón habré pensado eso, es aquí donde lo extraño comienza... solo recuerdo haber puesto dos dedos en el muro y de un momento a otro aparecí en medio de un enorme cuarto de paredes amarillas y luces que parecían se iban a ir por completo en cualquier momento. El pánico empezó a apoderarse de mí, solo empece a correr hacia la única salida que tenía este cuarto, pero entre más avanzaba más y más cuartos y pasillos aparecían, parecía que estos cuartos en forma de laberinto no tenía fin, no sé cuanto tiempo paso, pero ya estaba sofocado de haber corrido por tanto tiempo.

Casi me estaba dando por vencido, quería sentarme, pero algo dentro de mí me decía que no lo hiciera, decidí solo empezar a caminar, así pasaron lo que para mí fueron como unos 20 minutos cuando encontré una puerta que no había visto en el tiempo que dure corriendo, no lo pensé 2 veces, solo corrí de nuevo hacia ella y la abrí, solo se veía un pasillo negro con una tenue luz a unos cuantos metros, no dude más, cruce la puerta y al abrir los ojós estaba en el suelo del cine con personal de enfermería a mi lado y mis amigos preocupados, según me dijeron, dure inconsciente cerca de 15 minutos, les conté lo que viví, lo de esos extraños cuartos amarillos, lo único que recibí fue miradas de confusión, pero por fortuna no me ingresaron por "delirios" a un centro psiquiátrico, lo que si hice fue investigar por Internet, el resultado me asusto, ya que todo indicaba que entre en un tipo de realidad alterna que se llama backrooms.

Según estuve mirando este lugar tiene un sin fin de niveles y yo estuve en el nivel 0, entre más aumenta el nivel más difícil es salir y más peligros se encuentran, ahora en mi creció una enorme curiosidad por saber como son los demás niveles, además que en cada uno se encuentran 13 diferentes entidades, cada una más peligrosa que la otra.