Terminar siendo el banco de sangre de trece seres extraños es algo difícil de imaginar y mucho peor de vivir, sin poder estar en pie, pálido y sin fuerzas para siquiera poder comer o levantarse, sentía su cuerpo desfallecer cada vez que intentaba da...
Jimin se encontraba atado a suelo, sus piernas esposados a el y sus manos atadas a la pared, sintiendo rabia e impotencia por no poder soltarse, todo gracias a YoonGi y su talento de hacer que perdiera su fuerza.
Para cuando la luna se hizo presente YangMi entró a la habitación donde se encontraba, el rubio la observó temeroso, queriendo apartar a la chica de su lado.
- ¡Saquénla de aquí!- gritó en cuanto vio a SeokJin y TaeHyung de pie junto a la puerta- ¡No pueden obligarme a hablar!- forcejeaba cada vez más, desesperado por no poder utilizar su fuerza para escapar, no quería poner en riesgo a NamJoon, no quería que JungKook se enojara, podría cometer un disparate. Quería lejos a YangMi, muy lejos de él y de sus secretos.
YangMi tenía el don de hacer hablar a la personas, con una simple pregunta ya tenía a quien sea cantando como un canario, cualquier verdad era revelada ante ella.
- Tuviste que haberlo hecho por voluntad propia- habló SeokJin, acercándose al rubio- Sólo dale una oportunidad a Sook- desvío su camino y terminó por acercarse a la ventana, observando como el sol ya había desaparecido- Jimin, confía en su palabra.
- ¿Son tan imbéciles como para creerle?- Jimin intentaba liberarse de las esposas, pero no conseguía hacerlo de ningún modo, observó como YangMi se sentó enfrente de él, comenzó a intentar comunicarse de alguna manera con JungKook a través de telepatía, pero no podía hacerlo gracias a la lejanía- Terminará arruinando todo, ¡No lo entienden!- volvió su vista a SeokJin, le lanzó una mirada de odio- Te arrepentirás.
- Jimin- habló YangMi, tomando de la barbilla al rubio, lo miró directo a los ojos, comenzando a hipnotizarlo con ellos- Dime, ¿Dónde está escondido Jeon JungKook?
- Yo...
•••
Por medio del bosque en plena oscuridad de la noche se encontraban caminando en silencio cuatro sujetos, uno de ellos cargando a un rubio sobre su espalda, dirigiéndose hasta la dirección que el mismo dio.
- ¿Es por aquí?- preguntó YoonGi al observar a lo lejos una pared llena de enredaderas- Yo no veo ninguna casa- dijo refunfuñando, cansado ya de caminar sin ningún sentido cuando podrían correr fácilmente, se aburría bajo este ambiente.
- Es detrás de esa pared- dijo SeokJin, rodando los ojos ante la actitud de YoonGi, a veces podría llegar a ser demasiado perezoso.
- ¿Cómo se supone que vamos a atravesar una pared?- habló Sook desde atrás, inquieta por llegar ya a donde JungKook se encontraba ocultó desde hace semanas.
- Tan sólo callénse, ya llegamos - se encontraban ya frente a la pared llena de enredaderas, SeokJin se acercó, metiendo la mitad de su cuerpo a través de la pared- Es sólo una ilusión...- dijo por lo bajo, miró a los chicos y los invitó a acercarse, terminó de atravesar la pared y dio por fin con la casa- Hemos llegado.
- Por favor, no entren- habló Jimin, aún intentando hacer que tomaran consciencia, pero ya no tenía sentido- Esto no va a traer nada bueno.
- Entremos- dijo TaeHyung, quien llevaba a Jimin en su espalda, se fue acercando hasta la entrada de la casa, pero Sook puso una mano en su pecho, impidiendo que siguiera caminando.
- No, iré yo sola- la chica descoordinación mirada hasta dar con la de SeokJin- Ustedes entren después de mi- la chica giró, caminando hasta la puerta de la casa.
Sook entró a la casa de manera sigilosa, observando a su alrededor sí alguien se encontraba en el salón, al no ver a nadie siguió caminando, hasta llegar a la escalera que daba al piso de arriba, subió, cuidando de no hacer ruido, al llegar arriba dio con dos pasillos, observando varias puertas en ellos, caminó despacio hasta una de las puertas del fondo, la abrió, pero sólo encontró una habitación vacía, entonces se dispuso a abrir cada una de las habitaciones, decidida a dar con la correcta en cualquier momento, hasta que dio con ella.
La mirada de la chica se pintó de rojo al observar a JungKook sentado sobre una cama con el humano entre sus piernas, se veían serenos, el pelinegro acariciaba los cabellos de NamJoon con una mano, mientras con la otra sobaba su abdomen, Sook apretó los puños, lanzó una patada, haciendo que la puerta de abriera de par en par, llamando la atención de los otros dos.
- JungKook- habló la chica una vez conectó su mirada con la del mencionado, quien de una mirada tranquila había pasado a estar confundido y molesto ante la presencia de Sook, de pronto la imagen de un pequeño rubio llegó a su mente, abandonó la cama rápidamente y se cruzó de brazos.
- ¿Qué diablos le hiciste a Jimin?- sus garras salieron a la luz y sus ojos volvieron a tomar aquel color rojizo, se acercó levemente a la chica, controlando sus ganas de acabar con ella en ese momento, disfrutaría de hacerlo luego.
- Yo nada, el sólo me brindó una pequeña ayuda para poder encontrarte- habló cínica la chica, acortando más la distancia entre ella y el pelinegro, miró por encima de hombro, observando la cara de miedo del humano- Pensaba que estarías muerto- sonrió de lado, volviendo su vista a JungKook- Pero veo que te han salvado- puso sus manos en su cintura, intentando verse segura de si misma.
- No intentes acercarte a NamJoon- la apuntó con una de sus filosas uñas- O no saldrás viva de aquí- se acercó aún más, dispuesto a rasgar a La chica.
La chica dio un paso hacia atrás, asustada por lo que JungKook podría llegar a hacerle- Vengo con respaldo, ni se te ocurra acercarte a mi- volvió a su postura firme, intentando no demostrar su miedo.
- Desaparece de mi vista, Sook- soltó con desagrado, dando otros pasos hacia el frente, haciendo que la chica fuera hacia atrás nuevamente- No siquiera tienes las agallas de enfrentarme, no sé qué haces aquí.
- Vengo a recuperarte- soltó tan rápido como el pelinegro dejó de hablar- Y sí puedo...- hizo una leve pausa y dirigió su mirada nuevamente a NamJoon, quien ahora se encontraba de pie a un lado de la cama- Llevarme por delante la vida de él- lo señaló, pero JungKook hizo que bajara la mano en un instante, la sujetó del brazo y empezó a apretarlo, descargando su furia en su agarre, escuchando como Sook soltaba un gemido por el dolor.
- Ni lo intentes- una sonrisa enorme se dibujó en el rostro de JungKook, estaba disfrutando del dolor momentáneo que causaba sobre Sook.
- Para... ¡Para!- le gritó, intentado que le soltara, arrepintiéndose de haber retado al pelinegro, sentía como estaba llegando hasta sus huesos.
- JungKook, ¡Basta!- gritó NamJoon desde atrás, haciendo que el pelinegro volteara a verlo, lo observó por un momento, conectando sus miradas, transmitiendo algo tranquilidad hasta él, pero luego volvió su mirada a Sook, sonriendo nuevamente, claro que la iba a soltar, lanzándola escaleras abajo, escuchando un grito de dolor de la chica al chocar contra el suelo- ¿Qué...?- dijo por lo bajo NamJoon, sorprendido ante la acción de JungKook.
- No me pidas que me detenga ahora.
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