¿No quiero o no puedo?
Estaba agotado, le dolía todo el cuerpo cada vez que se movía y la cabeza no dejaba de dolerle. Mientras más se ponía a pensar, más llegaba hasta el mismo punto, desde que se involucró con JungKook no hacía más que recibir todo tipo de amenazas y no era la primera vez que recibía golpes.Pensaba seriamente en lo que aquella chica le había dicho, tendría que buscar la forma de alejar al pelinegro, no quería verlo más, no quería que se le acercara más, no podía permitirlo, no estaba dispuesto a seguir aguantando tanto dolor de ésta manera, no lo merecía en lo absoluto.
- Lo alejaré, está decidido- le habló al techo mientras una lágrima se resbalaba por su rostro.
Unos golpes en la puerta llamaron su atención, se levantó como pudo y fue hasta ella, se sentó en el suelo a un lado y se encogió en su lugar, temiendo porque fuera TaeHyung en busca de su segunda dosis del día. La puerta se abrió lentamente y se apartó un poco para que el sujeto pudiera pasar, alzó la mirada y observó a un pelinegro con una mirada color violeta que lo dejaba atónito.
JungKook miraba con seriedad a NamJoon, el ver una herida en la cabeza del chico y otra más profunda en su cuello, no le agradó en lo absoluto, ¿Qué diablos le pasó?
- ¿Y esto?- JungKook señaló ambas vendas y esperó paciente a una respuesta.
- Son... No lo sé- Esa no era la respuesta que estaba esperando.
Rodó los ojos y volvió a preguntar- ¿Qué te pasó?
- Un pequeño accidente nada más- Dijo NamJoon sin importancia y bajó la mirada, no le gustaba tener que mentir.
- Entonces no mientas- habló JungKook de nuevo.
- ¿Puede dejar de meterse en mi cabeza?- No lo decía solo por el hecho de que el pelinegro escuchara sus pensamientos, sino también porque quería apartarlo de su mente.
- Lo siento- JungKook se acercó y NamJoon solo se alejó.
- No se acerque- NamJoon temblaba, si, quería tocar al pelinegro, estar cerca de él, pero no podía sacarse las palabras de aquella chica de sus cabeza, tenía miedo.
- ¿Qué sucede, NamJoon?- JungKook comenzaba a desesperarse, notaba que el más bajo no estaba bien, y el hecho de que no le dijera qué pasaba solo lo sacaba de lugar, quería saber, ayudarlo a sentirse bien.
- No lo sé...- Dijo NamJoon por lo bajo, estaba perdido, había tomado una decisión, la decisión de apartarlo, pero tener al de ojos violetas enfrente solo hacia que quisiera quedarse ahí, a su lado, no dejarlo. No quería dejarlo, pero tenía que hacerlo.
JungKook miraba a NamJoon quien tenía la cabeza gacha, algo no estaba bien, y los rasguños en la cara del pelinegro más las heridas presentes en las zonas de su cuerpo se lo hacían saber. JungKook se acercó nuevamente al más bajo y lo envolvió en sus brazos, NamJoon se sintió indefenso y simplemente lloró, lloró entre aquellos brazos que le rodeaban.
JungKook sobaba la coronilla de NamJoon mientras lo escuchaba llorar, por alguna razón sentía su dolor, JungKook intentó buscar aquel aroma tan respectivo del pelinegro pero éste era demasiado liviano para percibirlo con facilidad alguna.
NamJoon sintió deseo de ir a la cama, recostarse ahí junto a JungKook, y así lo hizo, envolvió la cintura del más alto con sus brazos, se levantó con dificultad del suelo y fue caminando hacia adelante hasta que vi la cama y se abalanzó a ella junto con JungKook, él quedando encima del otro.
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Unlucky Number |KookNam|
Fiksi PenggemarTerminar siendo el banco de sangre de trece seres extraños es algo difícil de imaginar y mucho peor de vivir, sin poder estar en pie, pálido y sin fuerzas para siquiera poder comer o levantarse, sentía su cuerpo desfallecer cada vez que intentaba da...