Minho y Changbin necesitaban trabajo y el circo estaban solicitando personas por lo que decidieron entrar, lo que no sabían ambos era el placer que sentirían con sus jefes con sus juegos sadomasoquistas, ambas parejas complementaran sus fetiches y l...
Minho acató la orden, acostándose boca abajo en su cama con la toalla en su cintura. No sabía que le iba a hacer Christopher y por qué había llegado tan derrepente a su casa.
De pronto sintió las manos de su jefe en su espalda, provocándole un escalofrío, después sintió algo más frío, que más bien era una pomada.
—¿Ahora te dedicas a dar masajes con final feliz? —preguntó el menor mientras reía por lo bajo.
—No digas estupideces y mejor explícame, ¿Por qué no me habías dicho que te lastimaste la espalda? —le dijo aún con sus manos en la espalda de Minho.
—¿De que hablas? Yo no me he lastimado la espalda, sólo... a veces duele por qué follamos, pero es todo.
—Tu amigo... Felix me dijo que le dijiste que te lastimaste la espalda.
Minho soltó un quejido de dolor y luego suspiro.
—¿Felix? ¿Hablaste con él?
—Me lo encontré cuando estaba hablando con Seungmin, se acercó y hablamos un poco, aún no contestas mi pregunta.
—Le dije a Felix que me había lastimado la espalda en una acrobacia en el circo por qué estaba cojeando y no le iba a decir que había follado con mi jefe. —dijo eso último con un tono sarcástico.
—Entonces mentiste y me preocupe por nada. —afirmó con sus manos bajando más su toalla.
Minho se estremeció, pero se calmo un poco ya que el masaje continuaba.
—Hoy no te voy a follar, fuera de todo me preocupo por tu salud.
—Pensé que no lo hacías, siempre te ves indiferente.
—Así me ves siempre, pero en el fondo sabes que me preocupas y mucho, Minho. —Christopher murmuro lo último.
—Gracias...
Christopher sonrió al escucharlo.
—Lo mejor será irme, de lo contrario Jisung va a pensar cosas raras. —Rió de imaginarlo.
—Entonces quédate aquí conmigo, igual va a pensar otra cosa, además no es la primera vez que duermes aquí.
—Suele pasar después de follar.
—Callate y duerme. —le dijo Minho mientras se levantaba para vestirse.
En la mañana Christopher que despertó primero no supo como es que Minho estaba abrazado de él.
Él sonido del teléfono de Minho lo asustó y despertó a él menor para contestar, algo que no le gustó fue que la llamada fuera de Felix.
—Supongo que estas bien ya.
—Obviamente me duele siempre que me follas, pero tengo ganas de salir con mi amigo, nos vemos más tarde que pasé por mis llaves. —le dijo él castaño para irse y dejarlo ahí con una pequeña presión en el pecho por alejarse de el e ir con otras personas.
«Por un momento estuve a punto de abrazarlo para que no se fuera, ¿Qué te pasa, Christopher?» se preguntó a si mismo con la cabeza gacha. «Lo mejor será irme».
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