31

398 52 3
                                    

Taehyung después de un animado día con su padre y su amigo, relajándose y volviendo a ser algo de aquel chico que recordaban, subió con prisa a su habitación, tenía que hablar con aquella maldita bruja.

Siguió los pasos que recordaba cómo le había indicado ella, se puso frente al espejo e inhaló aire para luego soltarlo. Se concentró en su cuerpo, buscando que el tatuaje de su cara apareciese trayendo consigo las venas negras de su cuello, las escondía para no asustar a los demás.

Pronto la risa burlona de ChaeRin resonó en su habitación, al voltearse, la vio tumbada en la cama, mirándole divertida.

Me engañaste, mi padre jamás dijo eso.

— ¿Ya lo has descubierto? Pues sí que has tardado — rio — sigues siendo algo inocente.

— ¿Con qué más me has mentido? — Taehyung se sentó a su lado, inspeccionando sus reacciones — ¿Lo de Yoongi y Jungkook también lo es?

— ¿Sigues enamorado de ese chico no? — entrecerró los ojos al ver que había dado en el clavo — por eso quieres que esas imágenes sean mentira.

— No estoy enamorado de nadie y mucho menos de Yoongi — escupió — ahora, habla.

— Siento decirte, mi niño, que esas no son mentira — oyó con claridad como la leve esperanza de ese chico se rompía — ellos te han manipulado y jugado contigo a su antojo.

— Hace poco me tiré a Jungkook, lo usé para luego desecharlo — dijo, sintiéndose de todo menos bien — pero no sé porque no me sentó como esperaba.

— Creo que la imagen de niño malo que estás usando no te beneficia, debes fingir — sonrió — vuelve a actuar como ese chico débil que eras, enamóralos de nuevo, hazles caer a tus pies, destroza su corazón.

— No puedo volver a ser así, pero lo de fingir si puedo hacerlo — sus ojos se tornaron de un rojo oscuro, aterrador — acabarán tan destrozados por mí, como lo estoy yo.

La bruja sonrió en acuerdo y desapareció después de eso, las marcas de la piel del pelinegro desaparecieron con ella. Ahora sólo había que idear un plan de acercamiento sin levantar sospechas.

 Ahora sólo había que idear un plan de acercamiento sin levantar sospechas

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Noviembre

Otra fiesta de celebración del día de la creación llegó, nuevamente organizada por los Kim, era la ocasión perfecta para que Taehyung volviese a acercarse a ambos hermanos sin que sospecharan de él.

Se puso un traje blanco apretado, dejando su pelo negro con un toque despeinado, poniendo su mejor sonrisa fingida, esperando ansioso a los invitados.

La fiesta pronto comenzó a llenarse de gente, todos iban recibiendo las copas con sangre que se les ofrecían, degustándolas con ganas. Por fin Taehyung los divisó, pero estos apartaron la mirada nada más verle, alejándose de su presencia. Chasqueó la lengua, eso sería más complicado de lo que esperaba.

Sentía la mirada acusadora de Jimin encima de él, que protegía con recelo a Yoongi, ocasionándole una rabia interna difícil de controlar, pero tenía que hacerlo. Aunque el hecho de verlos juntos le recordaba todas las veces que el mayor se deshizo en gemidos debajo del peliazul. Sentía que la sangre en sus venas quemaba y huyó del lugar antes de hacer algo que no debía.

Llegó a su habitación y golpeó la pared con fuerza, quebrándola y arrancando un gemido de miedo por parte de Namjoon que le había seguido, preocupado por él.

— ¿Qué ocurre Taetae? — se acercó a su amigo, para tranquilizarle — ¿Es por Yoongi?

Sintió como esa mirada fría se caldeaba un poco, relajándose al tener al mayor allí con él. Namjoon era consciente de todos y cada uno de sus sentimientos, sabiendo cuánto le había dolido enterarse de aquellas cosas, por eso cuando vio como Jimin estaba con Yoongi, entendió a la perfección porque se había ido de allí.

— Sí, es por el maldito Yoongi, el maldito Jimin y el maldito Jungkook — se tiró del pelo, harto — no puedo más hyung, quiero bajar a arrancarle la cabeza a los tres.

— Sabes que no puedes hacer eso — rio levemente — sólo relájate y disfruta, bebe de alguno de los chicos hermosos que tenemos amarrados en el sótano o encuentra a alguien interesante con quien pasar esta noche.

Taehyung sonrió ante sus ocurrencias, mostrando aquello que parecía haberse perdido, la hermosa y especial sonrisa geométrica que poseía, aunque sólo Namjoon tenía el placer de volver a verla.

Bajaron más animados a la fiesta de nuevo, fingiendo una cara de total felicidad, sonriendo sin mostrar los dientes. Habló entretenido con Yong y Byul pidiéndole disculpas por haber estado tan alejado de todos, aceptando ellas encantadas.

Sentía que los tres le observaban, sin creerse que aquel Taehyung pudiera hablar animadamente con alguien. Una leve esperanza se creó en sus corazones, a lo mejor podían volver a tener relación con el menor.

Bien entrada la noche, Taehyung se acercó a los tres amigos, sorprendiéndoles. Hizo una leve reverencia nada más llegar hasta donde ellos y comenzó a hablar.

— Chicos, me gustaría pedir disculpas por mi actitud de estos meses — carraspeó a garganta — no me he portado bien con vosotros y me arrepiento por ello.

— ¿Crees que una disculpa arreglará la humillación que sentí? — Jungkook le miraba enfadado — te pasaste Taehyung.

— Lo sé y lo siento, de nuevo — esas palabras le estaban amargando la boca, porque no lo sentía ni un poco — a ti también quiero pedirte disculpas hyung, te dije eso por estar celoso, pero no era mi intención, no me das asco.

— Está bien, Taetae, te perdono — Yoongi le sonrió, haciendo que su corazón se tambalease levemente — volvamos a estar como siempre.

El menor asintió, procurando obviar esa sonrisa hermosa llena de dientecitos, que le estaba haciendo dudar de su plan.

The shadow like me ❣ TaeGiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora