El mismo día que Dolly se marchó.
Jungkook se levantó emocionado de su sueño, en este corría junto a Young Mi por un gran campo lleno de mariposas, quería contarle a su Noona, pero cuando talló sus pequeños ojos para recobrar conciencia se percató de que estaba en su casa.
Bajó de su gran cama con esfuerzo y se dirigió a su mochila, de esta sacó un dibujo que había realizado en la escuela, se trataba de él y su Noona en el parque junto a Yeontan. Salió corriendo de su cuarto y de casa para dirigirse a la de su mayor, ignoró los llamados de su madre y como pudo abrió la puerta.
Comenzó a buscarla con euforia, pero esta no aparecía por ningún sitio así que comenzó a llamarla, tal vez estaba dándose una ducha.
— ¡Yumi! ¡Yumi! — volvió a repetir, pero esta nunca respondió, miró el reloj de su pared y frunció el ceño, aún no era tiempo de que su Noona se marchara a trabajar. Siguió explorando el lugar y noto como el closet de la mujer estaba vacío, con una pequeña nota en el buro, la tomó para llevarla a casa y sus padres se la leyeran.
Su padre iba llegando de trabajar y buscaba que su pequeño diablillo se apareciera a recibirlo con alguna ocurrencia, el pequeño salía de donde solía dormir la castaña, estaba llorando. Sus compañeros solían decir que cuando las personas se iban para siempre y no te querían, dejaban notas en lugar de decírtelo.
Jungkook se topó con su padre, mismo que se alertó al verlo en aquel estado, se agacho a su altura botando su maletín, comenzó a revisar su rostro y su ropa en busca de un posible asalto de índole sexual, pero como era de esperarse no había señal alguna de que eso sucediera.
— Hijo, ¿qué pasa? — una sensación horrible invadió a Yoongi, eso de ver a su hijo tan roto, no le gustaba y el no conocer la razón del porqué estaba así le hacía sentir peor.
— Ella... ella... se fue... — sollozó mientras las lágrimas caían por sus lindos ojos.
— ¿Ella quién? ¿Quién se fue? No te entiendo.
— Ella... ella me dijo... ella me dijo que... que iríamos por un helado... y que para mi cumple...años ibamos... íbamos a ver... las ... las mariposas — su habla era muy difícil de comprender, pero Min hizo lo posible por descifrar aquello.
— Hijo, necesito que me digas quien se fue — acarició su mejilla intentando tranquilizarlo.
— Yumi — sollozó de nueva cuenta — Yumi se fue — lloró desconsolado escondiendo su rostro en el cuello de su papá.
Un vacío indescriptible estaba en su cuerpo, su otra mitad no estaba ahí; no era sorpresa para nadie la conexión entre Dolly y Jungkook, desde que nació Jungkook ambos habían hecho click; la mayor protegía a Jungkook de todo mal en el mundo y Kookie le hacía sus días muchísimo más felices.
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A Million Men • KTH • Resubiendo.
Fanfiction¿Qué tienen en común una prostituta y un chico que acaba de debutar? Aparentemente nada, pero ambos están conectados por Yeontan, el pequeño perro de Tae, quien en una tarde común termina merodeando en la calle lejos de su hogar; siendo rescatado de...