Taehyung conducía hacia su departamento, aunque por ratos no podía evitar ver a Dolly quien lloraba desconsolada por haber dejado a Jungkook.
— Kook está con sus padres, Yumi. Estará bien — sentía la necesidad de apretar su mano para reconfortarla, pero se lo impedía así mismo.
— Cierto, Jungkook está con sus padres— habló para sí misma y suspiro cansada.
Yeontan comenzaba a ladrar sin control, cosa que alertó a Tae. Fuera del edificio estaba la camioneta de Dispatch, rasco el puente de su nariz molesto, no había recordado ese pequeño detalle.
— ¡Joder...! —gruño, la castaña lo miró confundida por su actitud.
— ¿Qué ocurre? — su voz se escuchaba algo gangosa luego de haber llorado durante un buen rato.
— Pasa al asiento trasero —demandó y ella frunció el ceño, no entendía nada.
— No entiendo.
— ¡Con un carajo Dolly! ¡Pasa al jodido asiento trasero! Los putos obsesionados de Dispatch están fuera del edificio y si me ven contigo... — ella le interrumpió antes de dejarle hablar.
— Te van a ocasionar problemas porque soy una prostituta — intentó imitar su voz enojada, resultando algo graciosa en el intento — ¡Es lo único que sabes decir...! ¿¡Crees que quería serlo!? —de nuevo estaba llorando, la diferencia se centraba en que ahora observaba a Tae directamente a los ojos. Estaba molesta, no con Taehyung, sino con ella misma por haber tenido que dejar a Jungkook.
— Dolly, controlate.
— Iré a trabajar, me avisas cuando pueda pasar por mis cosas. Me arrepentí.
Bajo de la camioneta azotando la puerta, Taehyung se perdió mientras observaba como la pelicastaña se marchaba apresurada, ese vestido y chaqueta la hacían ver extremadamente sensual y aunque ella no lo provocara se llevaba muchas miradas.
Taehyung golpeó el volante molesto continuamente, quería decirle lo que realmente sucedía con Dispatch.
— ¿Volverá? — su cachorro ladeo la cabeza, sin entender — solo quería explicarle lo de SunHee y esos obsesionados.
Dolly llegaba al barrio de nuevo, pero ahora en lugar de ir a la vecindad estaba en el negocio.
Namjoon sonreía al verla arreglada, tan hermosa y solo para él, Dolly estaba junto al castaño en su oficina.
— Supe que te saliste de la casa de Min— Dolly le observó mal, seguía espiándola, seguía siguiéndola.
—Es temporal— aseguró, la chica apretaba la mandíbula tanto que se remarcaba en su rostro.
— Sabes que si necesitas donde quedarte... Mi casa siempre estará disponible —se acercó a ella, tocando su cabello.
Young Mi le aventó la mano alejándose en el proceso, cosa que encendió a Namjoon.
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A Million Men • KTH • Resubiendo.
Fanfiction¿Qué tienen en común una prostituta y un chico que acaba de debutar? Aparentemente nada, pero ambos están conectados por Yeontan, el pequeño perro de Tae, quien en una tarde común termina merodeando en la calle lejos de su hogar; siendo rescatado de...