Un pequeño cenizo se encontraba corriendo por el gran jardín del palacio mientras jugaba con una espada de madera, y se detuvo al escuchar la voz de su madre.
- ¡Katsuki! Ven un momento por favor....- pidió la mujer de iguales cabellos cenizos.
- ¿Qué paso bruja? – contestó sin tomarle importancia al cómo contesto.
- Se dice "mande", mocoso. – regañó la mujer dándole un golpe en la cabeza. – Como sea, en unos días cumplirás 5 años y se celebrara un banquete en tu nombre....- dijo agachándose a la altura del pequeño príncipe que se encontraba sobándose la zona afectada de su cabeza tras el golpe de la mayor.
- ¿Un banquete? – ese aviso pareció captar un poco su atención.
- Si, después de todo eres el próximo Rey dragón...- afirmó suavizando su mirada y tomando al menor en brazos, este se quejó por unos segundos. – Serás un gran rey, Katsuki. – declaró con cariño viendo a su único hijo.
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Un cenizo de 6 años y un peliverde de la misma edad, se encontraban practicando con una espada de madera tal y como el instructor del pequeño príncipe le había enseñado. Sin embargo, al pequeño peliverde que era el hijo de una campesina amiga de su madre y su ahora compañero de juegos, se le dificultaba seguirle el paso.
- Realmente no puedes hacer nada, Deku. – comentó el rubio cenizo, recargando su pequeña espada en su hombro, sin quitar la vista de los inútiles intentos del contrario para blandir su espada.
- Kacchan lo hace parecer tan simple....- se quejó un poco por lo bajo y soltó un suspiro tras intentar una última vez.
- Es que lo es. – alegó con seguridad el príncipe y una ligera sonrisa de superioridad.
Ambos continuaron con el entrenamiento y mientras que el pequeño príncipe lo hacía maravillosamente, su compañero de juego trataba de seguirle el paso.
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Se encontraba un grupo de niños rodeando al de orbes rubies de 8 años admirándolo y siguiéndolo hasta que el cenizo tropezó y cayó al río. Pero dijo que no le había pasado nada, mientras se reía un poco, despreocupadamente.
Los demás niños le creyeron y empezaron a elogiarlo al decir que realmente era fuerte y genial por no lastimarse tras la caída, sin embargo, Izuku fue directamente hacia él y le ofreció su ayuda para ponerse de pie.
- ¿Te encuentras bien, Kacchan? – le preguntó realmente preocupado una vez extendió su mano a él.
Katsuki observo esta acción del pecoso y no pudo evitar sentirse subestimado y menospreciado por Izuku. Él era un simple campesino que no importa cuánto quisiera no podría ocupar magia nunca por el simple hecho de que su núcleo mágico era muy débil, mientras que él era el único heredero a la corona de Draconia y poseía un núcleo mágico poderoso.
Entonces ¿por qué ese peliverde niño buscaba ayudarlo? Como si fuera débil ante una simple caída.
- Deku....- lo nombró con enojo creciente y rechazo bruscamente la mano del pecoso.
Tras rechazar al peliverde se puso de pie el solo y se fue totalmente molesto....su relación se vio relativamente tensa después de eso.
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"Ira, odio y el sentimiento de ser menospreciado..... ¿qué es esto?"
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- ¡Con ustedes..... Su majestad el príncipe heredero, Katsuki de Draconia! – anunció su llegada uno de los caballeros del palacio mientras abría la gran puerta y le permitía la entrada.
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Yugen - Boku no Hero Academia [Especiales]
Random¿Qué es esto?....Ah, ya le recuerdo... Todas las luces a mi alrededor cuentan las historias dentro de la historia que no fueron contadas hasta ahora. Son las luces que me muestran la historia del pasado, del presente..e incluso del futuro.... Y este...