Capituló 20: Colapso

225 28 5
                                    

París, Francia

Olivia Ferrier

Incluso las mentes más fuertes se ven saboteadas por las más débiles.

Es algo que siempre he llegado a escuchar sin en cambio no es algo que haya entendido al cien por cierto, todo el mundo dice que disfrutemos el presente pero que hacer si el presente es una porquería misma.

Mientras conduzco de regreso al departamento de la academia, veo como unos tipos perseguían a una chica hasta que lograr tomarla del brazo y llevársela a un callejón cerca. Inmediatamente las alarmas rojas en mi cabeza hicieron click haciendo que casi derrapando dejara el auto mal estacionado y tomara mi revólver calibre .357 Magnum para salir corriendo en busca de la chica.

Llegando al callejón solo logro escuchar la risa de esos mal nacidos y los gritos de súplica de la chica.

-¡Por favor deténganse!-gritaba la chica que no parecía tener más de 20 a esos señores que continuaban desgarrándole la ropa- ¡Se lo suplico basta!

Y odie con todo mi ser esa frase, porque siempre que alguien la decía no cambiaba nada y solo te hacían más daño, hasta quebrantar tu alma.

-Shhh pequeña, lo vas a disfrutar tanto como nosotros lo estamos haciendo.

Y es ahí donde decidí intervenir.

-Si fuera ustedes, soltaría a esa chica antes de que algo les sucediera-Dije apuntándolos con el alma haciendo que se separara de ella que cayó de bruces al suelo y pasara a ser yo su centro de atención.

-Miren chicos, alguien más decidió unirse. No seas tímida linda, acércate que también sabemos que lo disfrutarás-Dijo el mayor sonriendo con sus dientes podridos y su cara llena de lujuria, solo de verlo me dieron ganas de vomitar.

-Aléjense de la chica-Digo comenzando a soltar el seguro del arma.

-Parece que la gatita tiene garras, justo como me gustan-Dijo otro de ellos mientras sonreía al igual que su amigo.

Sin ganas de seguir con esta tontería dispare en la pierna del mayor haciendo que se cayera al suelo gritando de dolor.

-¡Maldita perra! Atrape la no se queden ahí-dice a los otros dos tipos.

-Lárgate y no mires atrás chica-le grito a la niña mientras me ve con los ojos llorosos y se larga a correr- Ahora si que comience el show.

Ambos se acercan dispuestos a golpearme, me desconecto y saco toda la ira acumulada que tenía, le disparo al otro en el hombro desorientando lo mientras que saco mi navaja de la pierna donde siempre la traigo y se la entierro en el abdomen al tercero, Justo en el estómago, la giro de tal forma que le revienta más sus intestinos y después la jalo hacia abajo haciendo que todo su estómago quede abierto con sus tripas colgando y haciéndolo caer al frente sin vida.

Siento toda mi ropa bañada de sangre pero no le tomo importancia, a este punto siento que estoy perdiendo la cordura.

-Bien-Digo sonriendo- ¿Quién es el siguiente?

Ambos se me quedan mirando aterrorizados mientras que al segundo le clavo una bala en la frente y al primero, al señor que estaba tocando a la pobre chica, llora en el piso pidiendo piedad.

-La piedad es un privilegio que no te voy a dar-Digo y con fuerza entierro mi navaja consecutivamente en su miembro- Esto es por la chica a la que querías hacerle daño, y por todas las que les llegaste hacerlo. Porque asumo que no iba a ser ella la primera ni la última. Ahora si, púdrete en el infierno infeliz-Y tomo mi navaja para pasarla por su cuello haciendo que la sangre me brote en la cara, y salpicando mi ropa. Al instante todos sus gritos son callados y remplazados por su agonía de estarse desangrándose.

Después de terminar con todo miro los cuerpos sin vida de los hombres y solo siento asco, le hice un favor al mundo al que esos hombres ya no siguieran con vida.

Pero no me siento tranquila, me deslizo por la fría y sucia pared de ese callejón hasta que caigo sentada frente la escena, aún cubierta de sangre.

No me interesa el hecho que esté este desastre o que sepan quien fue la culpable. La KRA siempre se ha encargado de ocultar y limpiar todo, solo me llevaré un gran castigo por haberlo hecho.

Pero parece que cada vez que asesino a alguien, mi alma se va pudriendo poco a poco, toda esa bondad y alegria que tengo, parece que se va perdiendo poco a poco.

Y es ahí donde suelto en llanto, un llanto que hace que me encoja y esconda mi cara en medio de mis rodillas, grito y golpeo el piso. Odio esta vida que yo no elegí, odio ser una maldita arma que solo sirve para eso, para causar daño.

Después de unos minutos, logró calmar mi llanto y me pongo de pie mientras sacudo un poco el polvo que tengo en mi ropa. Observó si nadie pasa al rededor y salgo rápidamente para llegar a mi auto y salir de la escena.

Salgo corriendo del callejón mientras veo que la calle sigue desolada, busco las llaves de mi auto en mi bolsillo y cuando las encuentro me dirijo a él. Pero soy sorprendida cuando una silueta se encuentra recargado en el, ese cabello azabache no es difícil de identificar y más cuando me mira con esos ojos grises/azulados.

Levi Ackerman

Solo me observa fijamente y abre un poco sus ojos al ver que tengo mi ropa llena de sangre, incluso mi cara aún la tiene pero esta se encuentra todavía húmeda por mis lagrimas.

-Ferrier ¿Qué mierda sucedió?-dice acercándose a velocidad y tomándome fijamente mi rostro buscando un rastro de herida.

-La sangre no es mía si es lo que te preocupa-Quito bruscamente sus manos y lo empujo para dirigirme abrir mi auto.

-No te pediré explicaciones de lo que acaba de suceder, solo quería saber si estabas bien-Dice cruzándose de brazos y deteniendo mi paso.

-Estoy perfectamente, siéntete tranquilo, solo tú puedes hacerme daño, ¿eso es lo que te importa no?-digo amargamente mientras trato de pasarlo para subirme en mi auto e irme lejos de aquí.

-Deja de comportarte como una cría Ferrier-Dice exasperado. Y es ahí donde exploto y saco todo lo que vengo guardando.

-¡Es que soy una maldita cría Levi Ackerman! Soy una maldita adolescente de 17 años que su vida fue arruinada, que nunca podrá tener una vida normal. Pero parece que a ti nunca te ha importado, lo único que te importa es esa maldita academia. Y sabes algo, soy una estupida porque todos estos años te he seguido, como un maldito perro faldero. He hecho todo por ti, mate por ti, he arriesgado toda mi vida por ti, y ¿sabes que he recibido?-Digo llorando mientras lo empujo- Solo recibo dolor y golpes, me estoy pudriendo, a cambio de maldito dolor y un mísero amor al cual no se si soy correspondida-Golpeo su pecho haciendo que se desplace unos metros de mi.

El me mira con los ojos abiertos mientras intenta tomar mis manos, que para este punto estoy demasiado alterada que lo único que quiero hacer es salir corriendo, y cuando siento que me romperé más, me aprieta hacia el haciendo que quede inmovilizada en un abrazo.

Y pronuncia dos palabras que acaban con mi estabilidad emocional haciendo que me derrumbe y caiga tendida a sus brazos.

-Liv, Te amo.

🔅🔱🔅

Hellos everybody, ¿como se encuentran? Espero que muy bien. Realmente me he ausentando demasiado tiempo pero han sido estos meses realmente un caos. Lamentablemente sufrí la pérdida de mi abuelo este año y para terminar, mi abuela enfermo a las dos semanas. Y ha estado hospitalizada.
Además agregando que ya estoy a 4 meses de graduarme de la universidad como licenciada en mercadotecnia y está siendo un proceso muy largo y aburrido. Este año fue muy diferente al anterior, realmente tenía programado más o menos que para estas fechas estaría terminando el libro pero nada sale como uno lo planea, espero que lo disfruten mucho y verán que pronto habrá nuevas actualizaciones 🥺💖

Muchisisisimas gracias por el apoyo, todos sus comentarios me animan a seguir con este proyecto.

Lxs amo y espero que les guste tanto como a mi 💖

Enfermizo [Fanfic Levi Ackerman]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora