Julio de 2022*-¿Qué otra cosa recuerdas Abilene?
Las luces me encandilaban y por inercia me hacían voltear la vista hacia el suelo.
Tardé unos minutos en responder, no quería hablar de aquello, solo de cualquier otra tontería, pero no de eso, aunque sabía bien que justamente ese era el motivo por el que me encontraba allí.
-Abilene, tienes que hablar, si no no podré ayudarte, ¿lo sabes?
Mi mirada se encontró con la de mi psicóloga;Marlene, una mujer agradable, de voz suave que emitía confianza, una persona directa y segura de sí.
-¿Recuerdos de qué?
-De lo que quieras recordar, claro mientras tenga relación alguna con él.
-No quiero recordarlo.
-Lo que intento hacer es que lo recuerdes a él en vida, que seas conciente de que su existencia fue perfecta y qué no deberías recordarlo con dol-
-¿Que no debería recordar con dolor que murió hace un mes? ¿Es eso?
Sentí mis mejillas humedecerse, odiaba aquello, pero no lo podía evitar, era como si llorar fuera más necesario para mí que el mismo hecho de tomar agua.
-No es eso, de echo tienes que aceptarlo, no evadirlo, como tú misma lo dices, ocurrió hace un mes, ahora debes intentar recordarlo con más tranquilidad, aunque sea difícil porque es muy reciente, no es imposible.
El sonido de las manecillas del reloj en aquella sala a la que aún recurro, era lo único que me hacía sentir viva en esos instantes.
Mis manos se sentían frías y sin vida, era como si mis mejillas me pidiesen que las mordiera internamente para sentir algún dolor más fuerte del que sentía por dentro, pero era prácticamente imposible.
La vista se me nublaba cada vez más hasta que mi terapeuta me devolvió a la realidad con una pregunta que sabía funcionaría.
-¿Hoy no tienes alguna otra anécdota sobre ustedes para contarme?
Cuando vió que mis ojos brillaron y las lágrimas cesaron, me pasó un trozo de papel higiénico e inmediatamente me limpié la poca cantidad de agua que seguía en mis cachetes.
^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^
Primavera del 2018*Estar con mis en aquel entonces mejores amigas era reconfortante, Diana y Keila, esas chicas inocentes con las que compartía cualquier tontería que me viniese en mente; (claro que era recíproca aquella acción) y pasar el mayor tiempo del día con ellas en momentos tan tristes para mi yo pequeña como el que estaba viviendo en ese momento, era divertido.
Ángel y yo dejamos de hablar por completo, quedaban pocos días de clases antes de las vacaciones de verano así que la maestra nos permitió sentarnos como nos viniese en gana por lo cual obviamente él y yo nos separamos.
Creo que no solo fue la separación de lugar en el aula lo que nos alejó, fue algo más, algo como el echo de cansarnos mutuamente, y dolía, era eso lo que dolía y era justamente la razón por la que quería evitarlo y solo disfrutar mi niñez al lado de mis amigas.
Ángel había cambiado, ya no era el mismo niño que conocí alguna vez, ahora parecía alguien que le restaba importancia a las cosas, alguien que se tomaba todo más a la ligera, y no sé que tan bueno había sido aquello pero sin duda alguna Ángel Iván no era él niño del que creí haberme enamorado.
La voz de Brandon; otro de mis compañeros, me sacó de los pensamientos en los que me sumergía.
-Entonces, ¿A quién vas a retar Keila?
-Mmm, ¿Porqué no le paso mi turno a Ángel mejor? Él debe de tener otra pregunta o reto más interesante que el mío.
Me escuché a mí misma soltar una pequeña carcajada, que al parecer no fue tan pequeña porque Diana y Darey también comenzaron a reírse.
-Esta bien. Diana, ¿Verdad o reto?
Diana dirigió su mirada a mí, no estoy muy segura del por qué.
-Creo que verdad.
-Mmmh, verdad....
-¿Tengo alguna posibilidad de estar contigo?
Mi corazón dió un vuelco.
-Quizas..
¿Diana encerio dijo eso?
No quería, o quizá si, pero terminé lanzando una mirada de decepción a Ángel, creo que lo que le importó fue demasiado poco porque solo la desvió a cualquier otro lugar que no fuese yo.
-Okey Diana, es tu turno de escoger a alguien.
𝑻𝒆 𝒔𝒂𝒍𝒗ó 𝒍𝒂 𝒄𝒂𝒎𝒑𝒂𝒏𝒂 𝒑𝒆𝒒𝒖𝒆ñ𝒂
-Abi.
Tragué saliva, algo nerviosa.
-¿Verdad o reto?
-Reto.
Oh, ou... Mi boca habló antes de que lo pudiera pensar dos veces.
-Reto...
-¿Estás segura?_Dijo otra de mis compañeras .
-Estoy s-segura.
-Declarate a quien te guste de este círculo.
Las bullas iniciaron y mis mejillas no tardaron en encenderse y tornarse de color rojo.
-No me gusta nadie de aquí.
-¿Ni Ángel?_ Escuché a alguien decir, alguien que no supe con certeza quien fue, estaba tan avergonzada que ni siquiera quise ni pude mirar a mi alrededor.
-No, ni siquiera él.
Mantuve tan firme mi voz, que casi me la creo.
Y Ángel Iván... digamos que en su expresión había mucha confusión.
No me gustaba, lo había dicho, y por la reacción de los demás creo que sonó bastante creíble.
Aunque la realidad fuese muy distinta...
ESTÁS LEYENDO
𝐋𝐨 𝐪𝐮𝐞 𝐬𝐢𝐞𝐦𝐩𝐫𝐞 𝐟𝐮𝐢𝐦𝐨𝐬
عاطفيةÁngel: un chico que vivía la vida aparentemente feliz, sin preocupaciones, ego alto, buen consejero, simpático, un futbolista con una carrera grande para su muy corta edad, con un futuro exitoso y próspero, pero por sobre todo, el amor de la vida de...