𝐋𝐨 𝐪𝐮𝐞 𝐬𝐢𝐞𝐦𝐩𝐫𝐞 𝐟𝐮𝐢𝐦𝐨𝐬

𝘓𝘢 𝘭𝘭𝘦𝘨𝘢𝘥𝘢 (𝘊𝘢𝘱𝘪𝘵𝘶𝘭𝘰 1)

-Chicos, denle la bienvenida a sus nuevos compañeros, Brandon,Haziel y Ángel, haganlos sentir cómodos porfavor.

Ángel
Ángel
Ángel....

El último nombre,el de él, se quedó dando vueltas en mis pensamientos durante varios minutos. En realidad, durante toda la clase.

Cuando porfin la maestra les dió un lugar de asiento a los tres recién llegados, y a decir verdad lindos chicos;ver qué era turno de darle espacio al castaño claro, Ángel, hizo que mi pulso se acelerara descontroladamente cómo si del mismísimo príncipe encantador se tratase.
Pero más acelerado se volvió mi pulso al ver que lo sentaron a mi lado derecho, él estaba ahí, junto a mí y eso significaba solo una cosa, tendría que socializar de una forma u otra con él.

Las bancas estaban organizadas alrededor del salón de clases, eran butacas individuales y yo estaba en la última esquina así que no había nadie más a mi lado izquierdo, pero joder,si que había alguien a mi lado derecho,alguien cuya existencia me ponía nerviosa.

-Hola,¿Cómo te llamas?

Su pregunta quedó flotando entre los dos y un silencio incómodo se prolongó durante cierta cantidad de segundos.

-¿Yo?

-¿Hay alguien más a mi izquierda que no seas tú?

Ja,chico listo.

-N-n-no pero no me suelen hablar mucho sinceramente.

Silencio.

-Entonces,¿Cómo te llamas?

Joder,era tan tonta que olvidé que me había preguntado aquello.

-Abilene.

-¿Abilene?

-Asi es,es algo extraño,lo siento.

Yo y mi estúpida costumbre de pedir perdón por cosas de las que no tengo ni una sola hectárea de culpa.

-No te disculpes,a mi me gusta tú nombre, Abi.

Me llamó Abi, fue la primera vez de tantísimas veces más que me llamaría de esa forma. Que me llamase Abi no era algo extraño,muchas más personas ya lo habían hecho antes pero él hizo que sonará diferente, y me gustaba, me gustaba la dulzura con la que abreviaba mi nombre.

-¿Si te puedo llamar así?

-¿Así como?

Torpe Abilene,torpe cómo siempre.

Ángel se rió,esa fue la primera vez que desee que su risa estuviera tatuada en mi cuerpo.

Al captar a lo que se refería asentí con la cabeza apresuradamente.

-¿Te digo algo?

-Dimelo.

-Me resultas familiar de alguna otra parte, por eso te hablé, además de que la chica que está a mi otro lado no se ve tan amable como tú, deecho se ve algo tosca.

Me reí, él era gracioso y la mayoría de las veces lo era sin querer serlo.

-Que raro,yo no te recuerdo a ti de ninguna otra parte,y aunque fuese así estoy segura que te recordaría mejor,eres tan popular con apenas media hora de clase que seguramente ya te hubiera reconoc-

Y aquí estaba una prueba más de que aquel niño tenía pegue con la sociedad, llegó alguien a interrumpir su inútil conversación con la inútil niña que no hace más que sacar buenas notas,bravo.

Una parte de mí esperaba que él, Ángel, me dejara ahí plantada a medias palabras para ir a dónde los niños y niñas populares le habían llamado para que fuese a saludar y de paso presentarse, pero he de admitir que otra parte esperaba que se quedará, ahí, conmigo, me daba la sensación de que con él algo era ligeramente diferente.

Sorprendentemente el recién llegado se inclino más por la segunda opción;les hizo señales con su mano derecha de que esperarán un poco, se volteó hacia mi nuevamente y me indicó con su cabeza que siguiera con lo que estaba diciendo.
¿Me tomó por sorpresa? Si ¿Cuánto? Mucho, y ¿Que haría al respecto? Nada, es decir, quedarme paralizada durante los próximos 30 segundos y luego volver a la realidad donde tenía que agarrar fuerzas de no sé dónde y seguir con lo que sea que halla estado diciéndole al chico con anterioridad.

-Oh...Em, te decía..

-Olvidaste que estabas diciendo¿Cierto?

-No.

Silencio.

-¿No?

-Si.- Admití.

-¿Te digo la verdad?

-Supongo..

-Yo tampoco lo recuerdo.

Y es entonces que nos echamos a reír, así nomás, y fue perfecto a su manera. En realidad, a partir de ese momento,de su llegada,todo fue perfecto a su manera con él,con el recién llegado en aquel ahora lejano entonces.