La vida en la realeza podría ser algo bueno para cualquier mortal, aunque el príncipe Aemond no pensaba lo mismo, nacido en una de las familias más poderosas de todos los tiempos, no todo era bueno, siendo un segundo hijo jamás se sentaría en el tro...
Aemond se sentía frustrado si esa era la palabra correcta, a él se le caracterizaba por ser un príncipe bastante centrado y que nada lo hacía salir de si, entonces era bastante nuevo para el.
El principe decidió salir de su alcoba quería distraerse para quitar esos pensamientos de su cabeza o más bien distraerse un poco de ellos, iba entre el jardín pensando en amiel quería verla, quería platicar con ella, quería ver sus ojos, su cuerpo, quería ver todo de ella, cabe recalcar que el príncipe era alguien que no le daba tanta importancia a las cosas, pero últimamente era bastante posesivo por cualquier cosa y más tratándose de la princesa y más con la llegada de sus sobrinos......
-princesa amiel que desea hacer el día de hoy?-
Amiel: no lo sé, usted que me recomienda hacer?
-bueno princesa puede disfrutar del jardín, así gusta ir al río es bellísimo ahí o si le gustan las batallas puede ir al campo de entrenamiento, los príncipes están ahí
Amiel: los príncipes?, Se refiere a aegon y aemond?
-si señorita pero también estarán los otros príncipes hijos de la princesa rhaenyra targaryen hermana mayor de Aemond y aegon.
Amiel: y ellos se llevan bien?
-se puede decir que llevan una relación cordial, no sé si conozca bien está casa pero la familia Targaryen son personas fuertes, decididas y muy posesiva con sus cosas, su carácter es un poco difícil de tratar pero no en todos los casos princesa.
Amiel: en serio?, Pero quién me puede decir que es más difícil de todos los príncipes?
-bueno es un poco difícil la verdad, pero en lo personal para mí el príncipe Daemon, yo lo he atendido por años y batalle más que con el mismísimo rey, pero actualmente Aemond, es un niño encantador pero es de temer..
La princesa Amiel se quedó pensando, eso último se quedó haciendo ruido en su cabeza, pero que podría pasar?, Para ella solo era un niño.
Campo de entrenamiento Sr.cole: vamos mis príncipes deben entrenar más duro para que sus enemigos les teman-la verdad era que las palabras de sr.cole no les inspiraban nada pero no había más, los hermanos con ropas negras con rojo entrenaban juntos mientras los verdes igual, pero aquel entrenamiento con cero espíritu fue interrumpido
Lucerys: mira hermano aquella señorita es hermosa y brilla como la luna.
Jace: es cierto hermano, quien será?
Las pláticas de los hermanos hacía que aemond los quisiera matar, a él también le sorprendía sus pensamientos pero no podía controlarlos
Amiel: mi príncipe es usted muy bueno con la espada, demasiado fuerte para su edad, la joven princesa se agachó un poco para agarras las mejillas del principe-las palabras de la joven hacia que aemond olvidara su enojo y solo sonriera
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Por un momento el principe solo pensaba que estaba el y amiel pero duró poco su gusto
Hola soy el principe lucerys y el es mi hermano jace-un gusto soy el hermano mayor de lucerys queríamos decirle que es hermosa y que no a deleitado con ella
Amiel: jajaja el gusto es mío príncipes son muy lindos gracias por sus halagos-amiel miro de reojo a Aemond y pudo notar su enojo, en esos momentos esas actitudes le daban ternura.
Sr.cole: bueno el entrenamiento se ha terminado.
Lucerys: princesa amiel comerá con nosotros en el gran comedor?
Amiel: claro que sí príncipe mi apetito siempre está presente
Lucerys: yo también disfruto mucho comer y lo disfrutaré más viendo a una belleza como lo es usted
Amiel: que cosas dice príncipe para ser un niño jajaja-amiel le parecía demasiado tierno.
Aemond: bueno ya fue suficiente la sofocas lucerys alejate de ella-su tono era desafiante no quería que nadie se acercará
Jace: tranquilo tío solo estamos diciéndole sus verdades a la hermosa princesa.
Amiel: vamos mis príncipes no hay que pelear, mejor vamos a comer me han dicho que la comida está lista.
Amiel se fue al comedor teniendo de lado en lado a muchos príncipes, tener tantos Targaryen le daba escalofríos, aunque eran unos niños que se veía que tenían rivalidad eran hermosos.