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Hyunjin estuvo todo el viernes en su casa, su padre todavía no llegaría al país porque su trabajo estaba demorado, así que el chico rubio aprovechó la ocasión y pasó el día con Felix. 

—soy el único bueno para las cosas dulces—dijo bastante orgulloso.

Su madre rio—ah, pero para cocinar los almuerzos eres bastante callado. 

Sungkyung estaba riendo desde la sala y Hyunjin sonrió divertido, observando como Felix hacia una mueca y continuaba batiendo la mezcla para el mágico bizcochuelo de maicena del que tanto se jactaba.—no les convidaré.

—ahora que tienes novio ya no nos necesitas ¿cierto?—preguntó su hermana desde el sofá. 

Las orejitas del chico de cabellos oscuros se tiñeron de rojo—dejen de pelearme, solo quieren avergonzarme delante de Hyunjin. 

—ah, Yongbok, no vayas a llorar por eso, qué pensará Hyunjin —murmuró su madre, saliendo de la cocina. 

Cuando ella estuvo lejos, Felix miró los ojitos grandes de Hyunjin y su sonrisa expectante—bueno, a él le gustará. —susurró. 

—por supuesto—respondió el rubio, acomodándose a su lado para continuar observando la preparación. 

El bizcochuelo para la merienda le quedó esponjoso y delicioso, Hyunjin, su hermana y madre lo disfrutaron mientras veían una película en la sala, orgulloso, Felix disfrutó de ver como Hyunjin se servía una porción tras otra, bastante a gusto entre su familia. 

A pesar de que estaban pasando un momento complicado, fue agradable para todos que Hyunjin estuviera pasando el día con ellos, él hacía comentarios interesantes en medio de la película y también sabía mucho de moda, lo que hacia que Sungkyung pudiera comentarle cosas que Felix no entendía demasiado, pero que parecían emocionantes para su hermana.

A la noche Hyunjin también se quedó a dormir, su falso novio ya estaba en la cama mientras Felix fue hasta la habitación de su madre para pedirle una manta más porque estaba frío en su cuarto, cuando estaba justo en su puerta, se quedó quieto y en silencio, escuchando como ella hablaba por teléfono con Johnny. 

—sí, bebé, el novio de Felix se quedó hoy con nosotros, estoy feliz de que haya encontrado una persona que lo acompañe en estos momentos difíciles—dijo contenta, haciendo que Felix muerda su labio inferior, avergonzado y culpable. 

Su relación a los ojos de su madre era perfecta y un sueño, ella estaba segura de que él y Hyunjin estaban perdidamente enamorados y que todo lo que ocurría alrededor de ellos no era más que un recíproco amor, si ella llegara a enterarse que en realidad estaban haciendo un intercambio de intereses y solo pasando el momento juntos porque curiosamente coincidían bastante bien, entonces ella se pondría muy triste. 

Probablemente se decepcionaría, preguntándose por qué su hijo se vendía así. 

No recogió una manta extra porque las lágrimas le ganaron y no quería que su madre le viera así, así que se fue apresurado a la habitación y se apoyó contra la puerta, sus ojitos oscuros aguados y sus labios apretados, de pronto se sintió tan sucio. 

Estaba vendiéndole a todos una historia tan falsa y sin ningún tipo de pudor. 

Sus lágrimas cayeron y Hyunjin se levantó de la cama apresurado, claramente preocupado—¿qué ocurre? ¿por qué estás llorando?—el chico de cabellos cortos y rubio le tomó el rostro entre sus manos, mirándolo a los ojos. 

Felix cerró los ojos y sus largas pestañas oscuras se mojaron, las lagrimas se deslizaron por sus mejillitas pintadas—solo... tengo ganas de llorar—mintió—estabas esperando por esto ¿cierto?—preguntó, volviendo a abrir sus ojitos, dedicándole una mirada vidriosa. 

after like HyunlixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora