after like Hyunlix

32.

Solo podía quedarse por dos días más, tenía que presentarse a dos exposiciones, por suerte estaba adelantado en todos sus proyectos y podía tomarse unos días de descanso, pero todavía debía repasar apenas llegará a Corea.

Hyunjin suspiró y se aferró a Felix que aún dormía acurrucado entre sus brazos como un pequeñito gatito, le besó el rostro con ternura y Felix ronroneó contra su toque, acurrucándose aún más.

Hoy y mañana no tenía que ir a la oficina, Johnny le dió ambos días libres para que pudiera estar con él, dijo que si había algo importante se encargaría así que podían disfrutar el día juntos, sin embargo, Felix estaba atrasado en todas sus tareas y eso no era normal.

Se separó de mala gana de su enamorado y se vistió rápido para ir a comprar algo para el desayuno. La ubicación del departamento de Johnny era muy buena, tenía bastantes negocios alrededor y Hyunjin ya le había echado el ojo a una panadería y también había una cafetería al otro lado de la calle que parecía buena, por lo que no demoró en conseguir algo delicioso para deleitar a su esposo.

Sin embargo, cuando llegó Felix estaba llorando, Hyunjin parpadeó sorprendido—hey ¿Por qué estás llorando? ¿Tuviste una pesadilla?—dejó sobre el escritorio todo lo que había comprado y rápidamente se subió a la cama en dónde su esposo estaba sentado cubriéndose el rostro con ambas.

—es que...—Felix hipó, avergonzado—me desperté y no estabas—susurró cabizbajo—pensé los peores escenarios, me levanté a buscarte, ni siquiera me dejaste un mensaje.

—Felix... ¿Cómo podría irme sin decirte nada? Solo fui a comprar algo para desayunar, lo siento—Hyunjin lo abrazó con cuidado, siempre sorprendiéndose de lo esbelto y delicado que su esposo es.

El rubiecito se acurrucó contra su toque y asintió—está bien, solo... Estoy demasiado susceptible.

Mientras Felix comía una porción de pastel, todavía en pijama y sin siquiera haberse lavado el rostro, Hyunjin lo miraba con dulzura y le acariciaba el cabello, todavía no podía descubrir por completo que es lo que pasaba por su cabeza todo el tiempo, pero imaginaba que intentar saberlo sería invadirlo incluso más de lo que ya lo hacía.

—te ayudaré a adelantar tus tareas hoy—decidió, sorprendiendo a su esposo.

—no es necesario...—apenado, Felix le miró como un cachorrito mojado.

—sí, sí es necesario, sé que te agobia estar atrasado, te ayudaré con las lecturas, soy bueno resumiendo.

El chico de pequitas se llenó la boca y jugó con sus dedos, luego de masticar murmuró—deberíamos divertirnos hoy.

—no, podemos divertirnos al terminar, sé que podemos hacerlo, además traje unos apuntes que hice para ti—Hyunjin se levantó de la cama y fue a revisar su mochila.

Felix le miró curioso cuando le mostró un cuaderno con apuntes de los últimos temas que había estado viendo en sus clases—¿De dónde sacaste esto? Es tan específico—impresionado, le miró a los ojos.

Hyunjin se incorporó orgulloso, la cámara en su habitación no solo le había servido para espiar a Felix sino que también había escuchado su clases cuando su esposo se quedaba dormido frente a la pantalla—es un secreto.

—¿Te estás metiendo como oyente a las clases presenciales? ¿Por mi? Wow, no puedo creerlo ¿Por qué eres tan perfecto?—Felix chilló contento, abrazando el cuaderno—¡Esto me va a facilitar la vida!

—no soy perfecto—se regocijo en su orgullo, riendo—estoy un poco loco.

—aun así, te amo aunque estés loco—rio Felix, dejándole un rápido besito en la mejilla.