Los sábados y domingos eran los mejores días para hablar, Felix se iba a la cama temprano y Hyunjin como no tenía nada para hacer simplemente se quedaba en su habitación hablando con su esposo.
—entonces ¿Cómo estuvo la semana?—Hyunjin preguntó, apreciando la videollamada.
—Hyunjin, literal hablamos todos los días—Felix se removió en la cama y el rubiecito rio travieso al ver que se le veía la clavícula por lo holgada que era la camiseta que traía puesta.—estás en abstinencia ¿Cierto?
—me masturbo todos los días, pero no es lo mismo—murmuró deprimido—¿Puedo ver tus piernas?
—¿Eres un pervertido?—burló, cambiando la cámara para mostrarle sus piernas a Hyunjin, traía pantalones cortos porque sabía que su esposo iba a querer mirar.
—sí lo soy, lo sabes—Hyunjin se lamió los labios y Felix rio avergonzado—que lindos muslos que tienes, Felix, deberías ahorcarme con ellos la próxima vez.
—Hyunjin—reclamó.
—debería morderlos, se ven tan suaves y esponjosos, quiero llenarlos de marcas, a ver, Felix, agárrate el muslo con fuerza—pidió excitado, queriendo ver un poco más.
Felix rodó los ojos e hizo lo que su esposo le pidió—de verdad, Hyunjin, apenas llevamos dos meses sin vernos.
—sesenta y un día sin vernos, mi vida es una desgracia desde entonces—lamentó Hyunjin—me duermo todas las noches deseando soñarte para tocarte al menos ahí.
—un pervertido que ahora es poeta, eh, te extraño—murmuró Felix, cambiando la cámara nuevamente.
—deberíamos empezar a tener sexting, Felix.
—pero no sé cómo hacer eso, es muy raro—susurró avergonzado—la última vez me dió mucha vergüenza siquiera escucharte.
—apenas me dejaste decir que quería llenarte de semen hasta que tuvieras a mis hijos—rodó los ojos el rubiecito.
—te voy a cortar de nuevo.
—no, lo siento, pero me pone bastante caliente imaginarlo—rio bajito Hyunjin.
—de verdad, Hyunjin, tus fetiches extraños cada vez se vuelven más raros.—Felix se removió en la cama, adormilado—¿Quieres tocarte?
—¿Puedo?
—puedes, te estaré mirando, te gusta que te mire ¿Cierto? Eres un exhibicionista—el chico de cabellos oscuros se acurrucó entre las almohadas, cubriéndose por completo con la manta, ya tenía sueño y era posible que se quedará dormido con el celular en la mano.
Hyunjin asintió, cambiando la cámara para mostrarle a Felix como se metía la mano debajo de la ropa interior—no te dejaré verlo hoy, me estás peleando demasiado.
—como si no supiera ya cómo se ve y como se siente—se burló Felix.
—tienes razón, también sabes que gusto tiene ¿No?—lo molestó Hyunjin, masturbándose lentamente mientras admira el rubor en las mejillas de Felix—dime algo sucio, cualquier cosa.
—hmm—tarareó el chico de pequitas, su mirada fija en la pantalla, en el contorno marcado en la ropa interior de Hyunjin, en su mano deslizándose allí—tengo mi propia oficina ¿Cierto?
—sí, muy bonita por lo que se ve en las fotos.
—bueno ¿No has pensado en que podés hacerlo allí?—preguntó con una sonrisa traviesa, Hyunjin sonrió al verlo y empezó a aumentar su excitación.
—oh, como... ¿Follarte sobre el escritorio, Felix? ¿Piensas en eso cuando estás trabajando? ¿Imaginas que tu esposo llega de manera inesperada y te empuja sobre la mesa, te baja el pantalón junto a la ropa interior y con sus dos manos agarra bien fuerte ese bonito trasero que tienes?—Hyunjin aumentó los movimientos de su mano, sintiendo el orgasmo acercarse.
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after like Hyunlix
FanfictionLa familia de Felix sufre un declive económico y el chico tiene que adaptarse a una nueva vida, sin embargo, uno de sus amigos le ofrece continuar pagando sus gastos y darle dinero a cambio de algo.