She? [4]

12

—Ese día, el director nos había llamado a una junta, la verdad es que a ninguna nos apetecía ganas de ir, pero Tina era quien más insistente estaba.

Comenzó a relatar la chica, apoyándose contra la pared.

—Nos dijo que fuéramos para la cocina, yo por lo menos no tenía nada de hambre, pero decidí acompañarlas. Cuando estuvimos ahí, Tina se desvió por el pasillo prohibido. Le dijimos que se detuviera, pero ella solo siguió.

Soltó un suspiro pesado, negando varias veces con la cabeza.

—Fueron tan solo cinco minutos, y ella ya estaba regresando. Simplemente dijo 'me equivoque, vámonos'

—¿No les resultó sospechoso?— cuestionó Sapnap, algo incrédulo de aquello.

—Claro que si, y mucho mas cuando dieron la noticia de que un paciente había fallecido, pero por más que hablamos con ella jamás nos dijo nada. Solo repetía que quería irse lejos.

—¿Y se fue?— esta vez pregunto George.

—Ella renunció y se largo. Quizás no pudo con la culpa de haber matado a una persona.

—Si, la muerte de Karl nos dejo mal a todos— comentó Sapnap afligido.

—Seguro fue horrible caer desde aquella estantería— se lamentó la chica.

Ambos chicos se miraron unos momentos, sonriéndose de forma cínica.

—La cosa, Alyssa, es que ninguno mencionó un asesinato— comento George, cerrando la carpeta con fuerza.

—Ni tampoco entramos en detalles, tú solo lo dedujiste— dijo Sapnap, dejando caer su mochila en una esquina.

—Pareces muy segura de que lo mataron, pero aún así dices que cayó de una estantería— escupió el de lentes con rabia, comenzando a caminar hacia la chica, quien solo retrocedía.

Alyssa miraba con pánico a los otros dos, mientras intentaba cubrirse con cualquier cosa. George la tomo de los hombros bruscamente, sacudiéndola con enojo.

—¿¡Por que lo hiciste!?

—¡Yo no hice nada!

Comenzó a llorar con fuerza, negando con su cabeza de forma consecutiva. Su cuerpo comenzaba a sufrir espasmos debido al llanto.

—¡Di la verdad!

—¡Yo no fui!

Sapnap solo miraba con preocupación la escena, pues Alyssa no paraba de sollozar y George estaba enfurecido. Si estaban equivocados, esto acabaría muy mal.

La puerta fue abierta de forma brusca, dejando ver a un peliverde asustado.

—¿Que demonios pasa aquí?

Alyssa corrió rápidamente detrás de él, ocultándose de George, quien se había petrificado.

Sam miro a Sapnap en busca de explicaciones, pues todo aquello era sumamente extraño.

El de lentes pareció reaccionar.

—¡Tú, maldita perra-...

Sus palabras fueron cortadas cuando Alyssa coloco un cuchillo en la garganta de Sam, sonriendo de manera socarrona.

George quedó inmóvil y Sapnap retrocedió con pánico.

La chica acercó más el arma blanca, provocando que tocara la piel del peliverde, quien jadeó asustado. Si hacía mas presión, estaban seguros de que comenzaría a salir sangre.

Y Dios los libre de tener otro muerto.

—Si uno de ustedes se atreve a moverse, voy a perforar el cuello del pequeño Sam— amenazo Alyssa, ladeando levemente su cabeza, su mirada brillaba con burla.