Epílogo

721 101 26
                                    

Habían pasado demasiadas cosas.

Decir que no tenía pesadillas con aquellos días sería mentir.

Aún recordaba la sangre y las cenizas.

El pánico que sintió cuando su prometido no salía de aquel lugar en llamas.

El dolor que tuvieron que soportar cuando George acabó en el hospital debió a un hematoma que tenía en la cabeza.

La desesperación al ver que no se recuperaba. Creyó que lo perdería.

Pero ahora estaba ahí. Arreglándose en su habitación.

—¿Estás nervioso?

La pregunta de Bad lo saco de sus pensamientos.

—Mucho, papá.

—Permíteme ayudarte.

Se acercó hasta su hijo, arreglándole la corbata, pues se la había puesto mal debido a su distracción.

—¿Y si dice que no?

—Sapnap, ya cálmate.

Le tomó por los hombros para detener sus movimientos erráticos.

—Mira tu dedo.

Sapnap obedeció, admirando el lindo anillo brillante que poseía.

—¿Aún quieres dudar?

—No, papá...

—Entonces camina rápido.

George sintió el aire golpear su rostro, removiendo levemente sus cabellos

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

George sintió el aire golpear su rostro, removiendo levemente sus cabellos. Sentía la brisa pegando con fuerza en el lugar.

Sus ojos bicolores paseaban por la playa, mirando cada una de las decoraciones. No se había puesto sus lentes ese día tan especial.

Lucia calmado, pero la verdad es que estaba algo intranquilo al ver que Sapnap no llegaba.

Los invitados ya estaban en sus lugares, esperando pacientemente por el novio.

—Yo creo que no va a llegar— se burló Tommy, recibiendo un zape por parte de Wilbur.

George le miro con fastidio.

Unos gritos de fondo lo hicieron regresar su vista hacia enfrente, viendo como Bad no dejaba de regañar a Sapnap, quien se ponía con dificultad uno de sus zapatos.

Aquello provocó una sonrisa en el heterocromatico.

—Corazón, lamentó llegar tarde, digamos que me tropecé un poco en el camino— se disculpó Sapnap, llegando a su lado.

—"Eres un imbécil"

—"¡No me estes insultando en lenguaje de señas!"

George soltó una suave risa ante eso. Sapnap dejó un casto beso en sus labios, sin duda alguna, amaba a ese chico.

She? [4]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora