(narrador: omnisciente.)
Cómo podrías curar un corazón roto que pasó por tantas cosas y que a medida que miraba más el mundo más se decepcionaba, tal vez el consejo de su padre no era tan malo, pero que podía suponerse de una niña que por azares del destino tuvo que ser criada de una forma tan espantosa, muchas veces su padre le recalcó un frase "el amor no es lo que piensas, es mejor decepcionarte antes que ser decepcionada cuando menos te lo esperes". Aún así para la crianza de un hombre que pasó por dolor tal vez siempre fue su expectativa, aún que no del todo estaba equivocado sabía lo que te decía era un hombre sabio, en su mayoría nunca entendiste sus frases, pero ahora todo cambio y no estabas dispuesta a dar tu corazón tan fácil. Lo problemático es que estabas enamorandote de Harry había algo en el que llamaba tu atención, apesar de que parecía un Elmo gigante y con depresión, claro eso te daba risa, pero en el había algo diferente oh más bien su forma de ser es lo que te cautivaba, pero tenías que plantar los pies en la tierra pues si llegases a encontrar esa caja regresaras a casa y todo terminaría, no querías sentir cosas por el pues lo lastimarías y en verdad no querías hacerlo.
--y bien que opinas de Harry?.--
Por un momento saliste de tu trance por la pregunta de Robin, el solo mantenía su vista en el periódico sentado en su habitual silla en el comedor, aún que esta vez dijo esto con un tono peculiar de voz, pues a medida que estaba más con ellos los conocías más y claro a Robin ya sabías que cuando te decía una pregunta con ese tono es por qué quería una respuesta satisfactoria.
--que quieres que te responda...--
--no soy tonto niña, se que estás sintiendo algo por el oh me equivocó?.--
Robin bajo su periódico y lo doblo para después ponerlo en un mesita cerca de el, posó sus ojos en ti mirándote insistentemente a los ojos esperando a que lo contarás y fueras sincera con el, pero sabías que a el no se le escapa ninguna mentira así que tratar de engañarlo era imposible.
--no...lo sé...--
--supongamos que te creo.--
--la verdad es que...--tomaste un respiro, apretaste tu muñeca con tu mano con algo de fuerza y continuaste con tu diálogo.--la verdad es que me agrada su presencia, digo, sule ser muy seco en su mayoría de las veces, pero ay momentos en los que por alguna razón lo miro y mi corazón late rápido, digo podría ser nervios pero se que no me pongo así con amigos o etc. Y es muy estresante no por el echo de que me guste si no por que si lo llegase a hacer y yo vuelvo a mi mundo lo dejaré y no lo veré más y no se que haría.--
--si, entiendo que tengas ese temor, pero si lo amas tanto crees que el tiempo no pueda reunirlos de nuevo?.--
--es que el problema es ese, temo que no lo vea y se me a echo una costumbre estar con el incluso sentir su presencia, su voz, su olor y su persistente mirada.--
--vaya que estás enamorada de el, tal vez...--
Estabas tomando un delicioso té que habías preparado hace unos momentos, miraste hacia la taza llena de un líquido color amarillo, habías elegido el sabor de la manzanilla y para endulzar un poco usaste miel. Pusiste atención en el pato verde mientras fijaba en la nada su mirada de desconcierto y duda, las últimas palabras que dijo te dejaron pensando en una posible respuesta de el.
--tal vez...el sienta lo mismo que tú...--
Si bien eras una chica con una postura recta ante estás situaciones este momento lo habías lanzado al carajo, tociste varias veces a la respuesta final de el pato y es que la razón para sentirte de ese modo y sorprenderte fue esa, sentiste tus manos temblar un poco y ni se hable de tu cara el rosa de tus mejillas hacían que sea imposible guardar tus sentimiento.
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───ꕥ▫𝐷𝑒𝑠𝑒𝑜𝑠 𝑚𝑖𝑠𝑡𝑒𝑟𝑖𝑜𝑠𝑜𝑠▫ꕥ───
Random"parecía una broma que en un lugar tan alejado una pequeña tienda se encontraba en medio de la nada, como si fuera alguna clase de propósito obscuro que un lugar tan raro estuviera aquí. que ingenua resultaste." _____________________________________...