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Los dos días que restaban pasaron demasiado rápidos, Lionel mantenía una comunicación bastante buena y de vez en cuando tenían una video llamada.
Después de que Lozano se le confesara a Ochoa, no volvió a visitarlo, se sentía algo solo pues el Omega era alguien que siempre estaba con él.

ー Memo ー Le llamo Guardado intentando llamarle la atención
ー ¿Mhm? ー Lo volteo a ver aun con la mirada perdida
ー Ten ー Le dejo ropa en la cama ー Cámbiate, te espero en la recepción en lo que lleno la solicitud de alta

Guillermo se levantó de la camilla y se dirigió a cambiarse. Guardado le había traído una camisa térmica, una sudadera y un pantalón holgado de esos que tanto le gustan a Memo.

Salió del baño y tomó sus pocas cosas que le habían traído, se dirigió a recepción y pudo ver a Diego al lado de Andrés.

ー ¡Memo! ー En cuanto Diego vio a Guillermo, no pudo no evitar ir a abrazarlo
ー ¡Diego! ー Dijo con la misma emoción
ー Ya pensaba yo que aquí te ibas a quedar para siempre ー Se separo del abrazo y lo miro fijamente

ー En cualquier momento me iban a correr de aquí ー Dijo en tono burlón
ー Ven, vamos al carro, Andrés dijo que nos iba a llevar por una nieve ー ¿Aquel chico siempre había sido tan energético?

El Alfa lo siguió sin ningún problema, subieron al auto y esperaron a que Andrés llegara y los llevara a aquel lugar al que le emocionaba tanto a Lainez.

Pasaron unos minutos y ya habían llegado, los ojos de Diego se iluminaban al ver aquella heladería. Los tres bajaron del auto y el primero en correr a pedir fue Lainez.

ー Me da una nieve de vainilla, una de chocomenta y otra de chocolate ー Pidió por nosotros
Los tres con un helado en mano nos sentamos en una mesa del fondo para evitar ser vistos.

ー Diego, ¿haz hablado con Lozano? ー Guillermo preguntó tomando el helado en una pequeña chuchara para después llevarla a su boca
ー No, se fue a Italia ー Dijo bastante feliz
ー ¿Qué? ー El corazón de Guillermo se detuvo, ¿había vuelto a Italia tan pronto?

ー ¿Por qué?, ¿por qué volvió antes? ー Andrés se preocupo pero aun así tenía un media sonrisa en el rostro, algo trataban

***

Lionel se encontraba intentando conciliar el sueño, más no podía, aún aquel mensaje le estaba comiendo la cabeza, sabía quién era, sabía que era aquel director técnico, el cual no quería que se acercara a Guillermo por razones que desconocía.

Dio una vuelta más en la cama y decidió tomar el celular, lo encendió y busco aquel contacto con el mensaje.

ー No te tengo miedo

Tecleo algo inseguro, sí le tenía miedo y mucho, pero esa era la única forma de que parara todo eso, debía de dejar de ser un cobarde.

ー Deberías tenerme miedo, aún no sabes de lo que soy capaz, Andrés.

El corazón de Lionel se comenzó a acelerar, escuchaba pisadas fuertes fuera de la habitación, que poco a poco se iban acercando a su puerta. Todo se puso en silencio durante 2 minutos y después se escucho como la puerta se abría.

ー Lio ー Escucho una voz débil
Lionel se levantó de su cama y fue directo a la sala de aquella habitación y ahí pudo ver a Julian, su pequeño cachorro.
ー Juli, ¿qué pasó? ー Al ver como las lágrimas salían de sus ojos se acercó a abrazarlo

ー Me golpearon ー Sollozo. Lionel sabía quién había hecho eso
ー Ya juli, ya esta todo bien, aquí estas a salvo ー Empezó a acariciar su espalda suavemente

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