Mi vecino es un TONTO ⤿❀ | kookMin | +18 TERMINADA

⤿❀ Capítulo 15

Al final Jimin había aceptado ir con sus vecinos a acampar al lago, no existía forma para negarse después de que los gemelos le suplicaran con ojos brillosos que los acompañara.

Habían llegado al estacionamiento improvisado y todos bajaron del auto cargando las cosas que utilizaría para pasar la noche.

Jimin se sentía nervioso porque pasaría la noche con Jungkook. Por el contrario, su vecino estaba feliz porque podría al fin compartir más tiempo con el lindo, pequeño y tierno gruñón.

ㅡ¿Quieres tomar mi mano?— preguntó Jungkook tratando de tocar a Jimin, es que siendo sinceros, era casi imposible apartar sus manos cuando él estaba cerca.

ㅡNo, conozco muy bien el lugar.ㅡ caminó pasando de largo, tratando de ignorar las cosas que su vecino le decía, pero últimamente se le estaba haciendo tan difícil.

—Míralo, piensa que sabe por donde es.— uno de los gemelos le susurró al otro.

ㅡPor ahí no es.— dijo Jungkook antes de que Jimin avanzara más.

ㅡYa sé.ㅡ se giró para verloㅡSolo te estaba probando.

ㅡSi, claro.

Jimin tomó otro sendero desafiando a su vecino, porque él siempre se salía con la suya, aunque a veces no le salía bien.

ㅡ Tampoco es por ahí.

ㅡ¿Y entonces por donde es?ㅡ manifestó molesto, cruzándose de brazos.

Jungkook rió caminando por el sendero y llamando a Jimin con la mirada. Le parecía tan gracioso y encantador que el chico no daba su brazo a torcer, nunca.

Después de un tiempo al fin habían llegado al lago, los gemelos junto a Bobby decidieron correr por todo el lugar riendo a carcajadas mientras el perro los seguía dando brincos, como si correr fuese la cosa más divertida, no podía juzgarlos, eran unos niños y un perro que había pasado la mayor parte de su vida dormido.

—Quiero que me acompañes a aquella colina— pidió Jungkook señalando la prominencia que se alzaba no tan lejos de ahí.

—No quiero.— dijo alejándose mientras buscaba donde sentarse.—A demás, se ve muy difícil de subir.

—No seas perezoso. Vamos.

—¿Iremos solos?

—¿Quieres estar a solas conmigo?

—Claro que no.— entornó sus ojos viendo hacia el lago.

—De todos modos no puedo dejar a mis hermanos solos— se acercó al contrario.— Así que tendremos que llevarlos.

—No creo que quieran ir. Míralos, están muy entretenidos jugando.

—Ya admite que quieres estar a solas conmigo.

—Ya te dije que no.

—¿Entonces por qué la insistencia de dejar a mis hermanos aquí?

—¿Qué dices? Nunca los dejaría solos en un lugar como este, lo decía porque si ellos no quieren ir nos tendremos que quedar aquí.

—Aaah, bien.— se giró para ver a sus hermanos y llamarlos.—¡¡Ustedes dos, vengas aquí!!

Los dos niños corrieron algo cansados después de correr sin parar con Bobby detrás de ellos.

—Quiero llevar a Jimin a la colina.— dijo cuando los gemelos estuvieron cerca.— Así que van a tener que ir con nosotros.

—Tonto, tienes que preguntarles si quieren ir.— le dijo Jimin levantándose del lugar donde estaba anteriormente.

—Sí quieren ir.— dijo obvio.

—Ustedes dos se van a estar besando allá arriba, y no estoy preparado psicológicamente para ver eso— Pronunció JungSeok negando con la cabeza.

—Deja de usar vocabulario que no conoces.— le recriminó Jungkook.

—Nosotros no nos vamos a besar.— negó Jimin tratando de sonreír.

—Se la pasan besando todo el tiempo.— habló JungHwan.

—Eso no es cierto.— se defendió inmediatamente.

—No mientas, Jimin— le dijo JungSeok señalandolo con su pequeño dedo.—Mi papá dijo que los ha visto besándose y la señora Park nos dijo que esta mañana los encontró en una situación muuuuy comprometedora y yo no estoy preparado para ver ese tipo de cosas, soy solo niño.—dejó caer sus brazos cansado.

—Pero...

—Bien, ¡vámonos!— Jungkook tomó a Jimin de la mano para que lo siguiera.

Los gemelos y Bobby no tuvieron otra opción más que seguir a los dos jóvenes.

Estando arriba, pudieron observar el hermoso paisaje que se extendía por el horizonte. Jimin quedó completamente fascinado por lo hermoso que se miraba todo desde esa altura.

—Siéntate aquí.— propuso Jungkook sentándose en el pasto donde también sus hermanos y el perro estaban ya muy cómodos.

Jimin se sentó a su lado no dejando de ver el horizonte. ¿Por qué Jungkook siempre lo llevaba a lugares tan bonitos? Y lo más importante, ¿por qué lo hacía?

La mano de Jungkook se deslizó sobre la de Jimin, atrapando sus pequeños dedos con los suyos propios, el contrario no apartó su mano, en cambio, dejó que aquel lo envolviera por completo, porque el tacto se sentía tan cálido, ¿qué le estaba pasando?

El sol empezó a desaparecer, perdiendo parte de su férvido cuerpo en aquella línea perfecta del horizonte. Era magnífico ver aquello, acompañado de los colores que matizaban el cielo y el aire fresco que soplaba con parsimonia.

Jimin giró su rostro para ver a Jungkook, el cual estaba sumergido en el paisaje del frente. Era guapo, tenía que admitirlo, sus labios, mejillas, nariz, todo perfecto; pero sus ojos, Dios mío, sus ojos,  dos lagos negros que brillaban como si la luna se reflejara siempre en ellos.

No quería sentir lo que estaba sintiendo porque le daba miedo,  ya que siempre lo entregaba todo, y a veces no recibía nada. No estaba listo para que la historia se volviese a repetir, no otra vez, porque no lo soportaría.

Pero es que Jungkook... Jungkook se estaba apoderando de él, de su tiempo, de su espacio personal, de sus pensamientos, ¿cómo es que no se dio cuenta antes que el chico se estaba sumergiéndose en su mundo poco a poco?

Siempre puso sus ojos en alguien que no lo merecía, en cambio, tuvo frente a él una persona que estuvo a su lado todo el tiempo, incluso cuando lo único que él hacía era rechazarlo cruelmente, este nunca se alejó.

Pero no podía arriesgarse tampoco, ¿qué iba a pasar si Jungkook no sentía nada por él? Quedaría como un tonto, ¿y si existía alguien más en la vida de este? ¿qué haría él?

Tenía que dejar de pensar en las numerosas posibilidades y centrarse en el hermoso paisaje frente a sus ojos. Jungkook le sonrió de una forma dulce y tan bonita. Lo que sucedió luego, fue el encuentro entre sus labios, Jungkook llevó su mano hacia la mejilla de Jimin y cerró sus ojos permitiéndole a su cuerpo sentir con mayor fuerza todas las sensaciones que el contrario le provocaba.

—Dijeron que no se iban a besar— le dijo JungHwan a su hermano gemelo.

—No le creas a los adultos, mienten todo el tiempo.