Te amaré hasta mi último suspiro

¿Estas bien?

-¡Bu!- dijo Eric apoyando sus manos junto a mis hombros.

-Parece que alguien anda volando en dichos pensamientos- dijo en forma de burla.

-No vuelvas a asustarme, ¿esta bien?- dije un poco agitada y un poco enojada.

-Vale- dijo levantando las manos en acto de inocencia.

-Parece que hoy no vino Dilan- agregó Eric.

-¿Cómo sabes que no vino?- dije con una ceja levantada.

-Siempre andan juntos, parecen uña y mugre- dijo sonriendo de medio lado.

-Y, ¿eso que tiene que ver?, es mi mejor amigo.

-Wow, pero, dejarás tan siquiera un día de dejar de tratarme así?

-¿Por qué tan sensible ahora?- dije con una ceja alzada.

-Eh, es que siempre te irritas o te pones a la defensiva cuando digo algo.

-Tendré mis motivos, supongo- le dije rodando un poco los ojos.

-Tal vez, la primera vez que nos conocimos, no fui amable contigo, eh sido muy poco amable contigo.

-Exactamente.

Sonó la campana y Eric y yo nos despedimos, ya que nos tocaban áreas diferentes, a el le tocaba historia y a mi matemáticas.

Para ser exactos ese día no me sentía bien, estaba tensa, estresada, de mal humor más del que ya cargo encima, e irritación por todo, me dio ansiedad... 

Deseaba que las horas pasaran rápido para poder estar en mi casa, sola, sin ningún ruido y encerrarme en mi cuarto, Mi pierna se empezaba a mover muy rápido, no dejaba de tocarme los dedos y pasar mis manos rápidamente por mis orejas, en ese momento solo quería un abrazo, o estar en mi cuarto encerrada, pero las horas parecían eternas.

-Bueno chicos, eso es todo por hoy, no se les olvide traer la tarea- agregó el profesor depper.

Vaya, al fin se acabaron estas clases que parecían una tortura, dije en mi mente mientras guardaba mis cosas.

-Hola Alexa- dijo alguien a mi espalda.

-¿Eric?

-Si, ese mismo, ¿Qué harás ahora?

-Irme para mi casa, ¿No es obvio?

-Qué te pasa?, se que siempre respondes sarcástica y groseramente pero, esta vez fuiste más directa, ¿Te ocurre algo? - pregunté un poco confundido.

-No tengo nada- respondí secamente.

-Mientes, se que tienes algo, ¿Estás bien?

No, la verdad es que no, no  me siento bien y tengo ganas de llorar, solo quiero irme lejos de donde no esté la gente.

-Si, estoy bien, no te preocupes.

Ella no está bien, tengo que hacer algo para que se tranquilice, o por lo menos, me asegure de que de verdad está bien.

-Alexa, ¿Me podrías ayudar con una tarea de inglés?

-¿De qué trata?

-Te lo explico en el camino.

-Bueno, vamos a mi casa- agregué

-Bueno.

Mientras íbamos camino a la casa de Alexa, la noté rara, sentía que su aura no estaba como siempre esta, neutra, esta vez percibía una energía demasiado descontrolada, algo que impacienta, no sé que tiene, pero la noto tensa y muy distraída.