Bōifurendo [Poliamor]

Bōifurendo ; 04

— Ya entiendo — dijo la pelinegra después de darle un sorbo a su té — La verdad no le veo lo malo que te gusten varias personas Todoroki-kun

Todoroki al no tener a otra persona con la cual recurrir optó por Yaoyorozu Momo, una gran compañera y amiga de confianza, el bicolor siempre corría a su habitación para desahogarse cada que le iba mal, ella siempre estaba de brazos abiertos a recibirlo y acariciarle el cabello mientras Todoroki empapaba las mantas con sus finas lágrimas. Momo transmitía la calidez de una madre, era por ello que se sentía seguro a su lado.

— ¿Me gustan?

— Pues me acabas de describir con detalle lo que sientes por los tres y lo dijiste como lo haría una persona enamorada, a pesar de no saber cómo expresar tus emociones

— ¿Y tú crees que yo les guste a ellos?

— Eso no lo podemos saber, pero si nos podemos asegurar de eso — sonrió con inocencia dejando su taza de lado — Tienes que hacer que les gustes

— ¿Y cómo hago eso? — Shoto nunca había estado enamorado, o al menos nunca lo supo con certeza, y ahora resultar flechado por tres personas distintas era algo que no podía entender

Pues así era Todoroki Shoto, incapaz de entender a los demás e incapaz de entenderse a sí mismo. Su padre nunca lo había dejado relacionarse con otras personas, ni siquiera con sus propios hermanos alegando que no podía desperdiciar su potencial con personas inferiores por lo que no pudo desarrollar de forma correcta sus emociones siéndoles restringidas, sus llantos siempre fueron callados a golpes, su sonrisa se la robó Enji sin dejar rastro de ella, lo único que había era un creciente miedo y repulsión hacia la persona que se hacía llamar "padre"; porque Todoroki Enji nunca cumplió con su rol de papá en la vida de sus hijos.

Todo se quebró para Shoto quedándose sin la llama que alimentaba su espíritu infantil el día en que su padre se llevó a su madre y ésta nunca regresó a casa. Perder a la única persona que le daba estabilidad en aquella casa, que difícilmente podría llamar hogar, lo hundió en un profundo vacío al que nunca pensó poder salir.

— Convive más con ellos, investiga lo que les gusta, dales pequeños detalles, déjalos encantados con tu belleza — exclamó la chica asustando un poco a su invitado — Y déjalos conocer a Shoto

Después de un momento de reflexión el bicolor habló.

— Yaoyorozu ¿tú crees que soy un depravado?

— ¡Claro que no Todoroki-kun! Pero, ¿por qué lo dices?

— Es que hace rato escuché la conversación entre Ashido y Kirishima y ella lo llamó depravado — aquello no le sorprendió a la pelinegra, ya sabía el tipo de relación que tenían, teniendo en cuenta que Mina tenía mucha confianza con el pelirrojo — No sé por qué lo dijo pero no me gustó que se refiriera así con Kirishima

— Y es algo normal con la persona que te gusta

— Bueno tomaré tu consejo Yaoyorozu, muchas gracias, como siempre eres la mejor

— Anda, ve y conquista a tus príncipes