Who are you? - Minsung // Adaptación.

III

•It was a touch•

— ¿Vives aquí en Seúl? — preguntó curioso.

— Acabo de mudarme aquí — nuevamente se formó un silencio entre los dos hasta que el timbre sonó, el rubio se levantó y fue directamente a la puerta.

— ¿Binnie? — el castaño entró a la casa de su amigo.

— No me lo vas a creer, el chico guapo de la habitación 107 aceptó salir conmigo — dijo emocionado.

— Wow felicidades Binnie— dijo feliz por su amigo — ¿Cómo se llama?

— Félix.

El peli negro que se encontraba en la cocina al escuchar aquel nombre se levantó y fue directamente al living, pero nuevamente ese desvanecimiento llegó a su cuerpo, aquello no dejó que avanzara más y se desplomó en el suelo.

— ¡Minho! — gritó Jisung desesperado, al auxiliar al caído se dio cuenta de algo, unas gotitas de sangre caían por sus brazos —ayúdame Binnie— entre los dos lo levantaron y lo llevaron a la pieza, quitaron la parte de arriba de su ropa y vieron aquellas heridas en su espalda.

— ¿Cómo carajos se hizo esto? — el rubio miró con sorpresa al castaño y negó — espera aquí iré a buscar algo para curarlo.

Jisung volvió a mirarlo y con un dedo trazo todas las heridas, las cuales una vez que este las tocó fueron desapareciendo una por una, al instante el peli negro despertó y azotó al rubio en la pared.

— ¿Qué fue lo que viste? — preguntó Minho con voz ronca muy cerca del chico.

— ¡Hannie! llegué.

— Dile que se vaya — ordenó el peli negro.

— B..binnie, Minho se despertó y acaba de irse, yo me meteré a bañar tengo mucho que hacer.

— ¿Cómo lo dejaste ir con esas heridas?.

— No quiso escucharme y se fue.

— ¿Estás bien?

— S... si — y sin más escucho el portazo avisando que el castaño se había ido, Minho aún seguía encima de él, este temblaba de miedo.

— Dime que viste.

— Estabas herido, de curiosidad pasé mi mano por tu espalda y tus heridas se curaron — habló como pudo.

— ¿Pasaste tus manos por mi espalda? –El rubio asintió y este se alejó — tengo que irme — colocó su polera, chaqueta de cuero y se dirigió a la entrada.

— Espera ¿Te sientes bien? — dijo preocupado — puedo llevarte a tu casa si quieres.

— No, tomaré un taxi — dijo firme haciendo que el chico retrocediera — gracias por ayudarme — cerró la puerta dejando a Jisung con miles de dudas.

•••

La noche era oscura y fría, más en aquel parque, se sentó en un banco pensando en todo lo que ha pasado y en cómo sus heridas sanaron cuando ese tal Jisung lo tocó, nadie pudo curar las heridas hechas por su padre, ni siquiera su madre.

¿Quién es ese chico?

Suspiró tomando su cabeza.

— Seungmin se que estas ahí — un chico más alto que él salió detrás de un árbol.

— Sabes que tu madre no iba a dejarte solo Minho — el chico se acercó al peli negro y se sentó al lado de éste.

— Me lo suponía — dijo sin mirarlo— ¿Quien es el pecador de hoy? — Seungmin era su mejor amigo y compañero de trabajo, él tenía la información necesaria, así Minho sabía todo de la persona a la que castigarian.
— Kang Hyung Joon 45 años, empresario nivel medio, tiene problemas con el alcohol, mató a su primera esposa y vendió a su hija de tres años por dinero.

— ¿Dónde está ahora? — el chico cerro los ojos y suspiró.

— Se encuentra en su casa, tiene una fiesta — el peli negro chasqueó los dedos y ambos llegaron a una mansión — parece que vendió a su hija por una buena cantidad de dinero — ambos entraron burlando la seguridad del lugar.

— Buenas noches bienvenidos, disfruten de la fiesta — un mesero los recibió.

— Buscamos al señor Kang Hyung Joon — dijo el más alto.

— Los llevo — el mesero los guió a una parte apartada en donde se encontraba el viejo junto con empresarios y mujeres — señor, disculpe, estos dos jóvenes necesitan hablar con usted — al entrar los dos chicos el hombre se tensó.

— Niños ¿Qué hacen aquí? — dijo una de las mujeres que se encontraba sentada en una de las piernas del viejo.

— Venimos a hacer negocios señor Kang — habló el más alto.

— N...no pued..do a..ahora — el nerviosismo se hizo notable, tanto que todos los que estaban ahí se dieron cuenta.
— Por favor señor Kang a mi jefe no le gusta esperar — nuevamente habló el más alto, el peli negro miró con seriedad al hombre haciendo que este se helara, pero se resistió.

— No hago negocios hoy vuelvan otro día — dijo firme tratando que no se notara su miedo, pronto toda la gente salió de la habitación sin previo aviso u orden — ¿Qué hacen?

El hombre nervioso intentó salir, pero Seungmin se lo impidió.

— ¿Sabes que no puedes escapar del diablo? — dijo con un aire de frialdad y maldad.

— ¿D... diablo? — el hombre estaba a punto de llorar.

— Es mi padre — el chico chasqueó los dedos y trasladó al hombre a un lugar que este desconocía, era sombrío, excepto por una luz que se reflejaba en un lago, de este salió una figura blanca, una mujer hermosa, con un hermoso vestido, el hombre se congeló al ver que era su esposa, la que él mismo había asesinado y tirado a un lago cercano a su casa — ¿Te arrepientes? — el hombre desesperado tomó su cabeza y gritó en forma de tortura.

— ELLA MERECÍA MORIR — gritó alejando a la mujer que parecía triste — maldita zorra si no has muerto te mataré de nuevo — un chasquido se oyó de nuevo y volvieron a la habitación, la música se había ido, junto con toda la gente del lugar, el hombre desesperado miró al pelinegro — ¡¿QUE QUIERES DE Ml?! — se arrodilló ante él y lloró.

— Te haré sufrir — dijo sin sentimiento — durante tres dias y noches seguidas verás a tu esposa, la que tu mismo mataste, te atormentara en todo momento, el último día te castigaré y enviaré donde mi padre — chasqueó los dedos dejando solo al hombre quien al instante empezó a gritar.

— ¿Conseguiste lugar para mudarnos? — el más alto asintió.

— Esta todo listo.

Lee Minho.

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