IV

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— ¿Qué hacemos aquí? — el peli negro miró el edificio.

— Aqui nos quedaremos, departamento número ciento cuatro — habló el más alto entrando al edificio — es el primero que revise la verdad — levantó los hombros.

— Lo suponía — dijo el peli negro entrando detrás de él, subiendo al ascensor.

— Esperen no cierren el ascensor — la voz de un chico se escuchó, rápidamente Seungmin paró las puertas — gra... gracias — sonrío al chico y este hizo lo mismo, las puertas del ascensor se cerraron y un silencio incómodo se formó, entonces el tono de celular del peli azul sonó y contestó rápidamente — ¿Hola? Hannie, si estoy subiendo, aguanta ¿Si? bien ¿De dónde me hablas?, bien quédate en el baño, tranquilo — cortó el teléfono y lo guardó — maldita sea sube rápido.

— ¿Han? — dijo el más alto — ¿No es el chico del que me contaste antes? — el peli azul volteó y miró a Minho.

— ¿De dónde conoces a Han? — el peli negro tragó duro.

— Digamos que me salvó de que muriera atropellado — soltó Minho— ¿Por qué sonaste tan desesperado? ¿Pasó algo?

— Han terminó con su novia hoy y la loca envió a su ex novio matón a que le hiciera daño — suspiró — y antes que lo digas, Han no sabe pelear, es un angelito y el mastodonte se encerró con él en el departamento, sólo espero que no le haya hecho nada — las puertas del ascensor se abrieron y el peli azul salió de ahí corriendo, Minho trató de no darle importancia, pero los gritos de el hombre que se encontraba justo detrás de la puerta en donde el peli azul y un castaño golpeaban se escuchaban muy fuertes.

— Seungmin — el nombrado lo miró — intenta calmarlos y distraerlos — el chico asintió y se dirigió hacia los chicos quienes se veían desesperados, Minho respiró y pensó en la habitación de Jisung, en donde había estado esta mañana, chasqueó los dedos y de un momento a otro apareció dentro del departamento.

— ¡TE ENSEÑARE QUE A YOUNG MI NO SE LE HACE SUFRIR! — un fuerte golpe se escuchó seguido de un gemido ahogado, caminó al living en donde un hombre un poco más grande que él caminaba hacia el chico que se encontraba botado en el piso delirando del dolor — te romperé los huesos bastardo y será divertido — levantó su pie y con toda su fuerza lo dejó caer, pero antes de que el golpe llegara al chico, el peli negro se atravesó y chasqueando los dedos votó al hombre al suelo haciendo que se golpee la cabeza.

— ¡Hey! Angelito, quédate aquí, esto será rápido —lo tomó y lo dejó en su cama rápidamente para chasquear nuevamente y llegar al living donde el hombre recién intentaba levantarse — fantoche porque pegas a un indefenso — el hombre se tomó la cabeza y miró al peli negro quien estaba parado frente a él.

— El no es indefenso, es el hijo del diablo, maldito malparido — dijo con rabia soltando un golpe hacia Minho quien lo esquivo.

— Auch — dijo sarcástico — ¿Qué te parece Seungmin? — miró a su mejor amigo, el hombre asustado se dio vuelta, pero no vio nada.

—Yo creo que merece un castigo — rápidamente volteó al lugar anterior y vio a otro chico al lado del peli negro — ¿Jugamos? por los viejos tiempos — este asintió, ambos miraron al hombre con una sonrisa diabólica y se transformaron.

Las transformaciones de los demonios eran sencillas, llamas, cuernos y un intenso color de ojos, que variaba dependiendo de su rango, en el caso de Minho era un rojo intenso que sólo lo tenía él y su padre, al contrario, los de Seungmin eran un color amarillo intenso, era el rango más alto que el de un demonio común, claro después de Satán y su hijo.

Al terminar su transformación Seungmin se trasladó al lado opuesto de la sala para comenzar a golpear al hombre con un bate el cual era una de sus cosas más preciadas, al terminar de golpearlo el peli negro chasqueó los dedos y automáticamente las heridas del hombre se borraron, ambos amigos sonrieron y con látigos lo volvieron a torturar, los gritos del hombre era sólo satisfacción para ambos chicos.

— Por favor — suplicó — no lo volveré a hacer lo prometo, Dios ayúdame.

— Oh pobrecito, el viejo no te ayudará — dijo Minho dando más latigazos haciendo que la carne del hombre se abriera.

— ¿Eres Nam Go Hyun? — pregunto el más alto, el hombre asintió y este sonrió — que casualidad, tu eras el siguiente en la lista — volvió a los latigazos.

— Ya me cansé, lo enviaré con mi padre, el chico soltó el látigo y apagó las llamas de su cuerpo.

— Puedes enviarme también, debo entregarle información a tu madre — Minho volteó los ojos y chasqueó los dedos haciendo desaparecer a los dos sujetos, tronó los dedos nuevamente y arregló el lugar que estaba hecho un desastre, suspiró, sacó su chaqueta, entró al baño y se lavó toda la sangre.

— Que bien, otro tatuaje — dijo y revisó la forma de este, salió del baño, se dirigió a la habitación de Jisung y lo revisó — que extraño — lo acomodó bien, sacó sus pantalones y  el suéter que tenía — siento que ya te vi en algún lado — el cuello del rubio estaba con algunos moretones y razguñones debido a los golpes, el chico suspiró y pasó su mano por esa zona, al instante los moretones se desvanecieron, este lo soltó e intentó irse, pero la mano del chico lo detuvo, se volteó pero aún dormía.

— Quedate conmigo — dijo y comenzó a moverse por toda la cama — No.... no por favor, yo lo amo — el chico estaba teniendo una pesadilla, el peli negro se agachó y tomó su cabeza, acción que hizo que el rubio se calmara.

— Angelito estarás bien, ya no estás en peligro — algo en el pecho de Minho se ablandó al ver al rubio en calma — creo que estamos a mano.

Seungmin.

Seungmin

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Who are you? - Minsung // Adaptación.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora