𝒔𝒐𝒇𝒕𝒄𝒐𝒓𝒆

Ataraxia

(s.) imperturbabilidad, serenidad.

CAPITULO 16

la mañana era fría, la ventana tenía signos de humedad por la temperatura... Nada podría ser mejor que eso, considerando que bebía un excelente café de calidad hecho por su pareja, el café que solía beber antes pero de menor calidad y preparado por una persona completamente diferente a él.

Kunikida quizá estaba demasiado embobado con la atención y las cosas materiales que ahora tenía, tal vez era eso..

ese día, realizaría una galería, finalmente después de haber estado anunciando por una semana el reinicio de su galería titulada "softcore" volvería a su vida cotidiana, con la diferencia de que ahora alguien más lo acompañaría está vez, no Chuuya... si no Dazai, ciertamente Kunikida se sentía algo mal por él pelirrojo pero debía entender que ellos no estarían juntos para siempre, le gustaría que Chuuya comprendiera que era obvio que en algún momento el estaría con alguien mas, la persona que el consideraría correcta y se uniría a él, ¿porque Chuuya no podría alegrarse por él?

a diferencia de cuando trabajaba con Chuuya, está vez el básicamente no se encargó de absolutamente nada, Dazai hizo todo el trabajo, desde alquilar el lugar donde se realizaría la galería hasta el traslado de sus pinturas y la promoción de la exhibición. Dazai había insistido en comprarle un traje nuevo, también llevarlo a un spa, todo para que Kunikida pudiera sentirse tranquilo y suelto durante las entrevistas, definitivamente el rubio no se negó.

-Antes de ir a la galería debo de verme con mi doctor- comentó el castaño mientras ambos bebían su rutinario café por la mañana, últimamente Dazai había experimentado dolor de cabeza continuo por culpa de Osamu quien no dejaba de insistir, así como tener esas visiones de cosas que presentía Osamu habría vivido cuando el no se encontraba conciente.

-¿tiene que ser hoy? Dazai... es un día importante para mí, softcore te necesita... yo te necesito... puedes hacer eso después ¿no?- el castaño apretó suavemente sus labios, sabía que si Fyodor lo había citado era porque tenía algo muy importante que decirle, sin embargo...

-esta bien, solo déjame llamarle antes para cancelar la cita ¿está bien?- el rubio asintio satisfecho por sus palabras acercándose a besar sus labios con suavidad y posteriormente seguir comiendo -eres un buen chico, Dazai- las mejillas ajenas se volvieron rojizas y con ello se levantó tomando su teléfono y llamado al doctor el cual le contesto demasiado pronto apenas llamó.

-Dazai, ¿estas por venir? de verdad es demasiado impor...

-Fyodor... no puedo ir- le interrumpió, hubo un pequeño silencio, Dazai pudo escuchar como había suspirado de forma pesada, casi con molestia -kunikida, ¿no es verdad? ahg.. escucha. ¿has visto alguna vez lo que Osamu ha vivido?- esa pregunta le llamo bastante la atención al castaño, justamente eso era lo que le había estado sucediendo esos últimos días

-si.. ¿cómo lo sabes?- cuestionó, entonces Fyodor supo que tarde o temprano estaría completamente perdido si no hacía algo lo más rápido posible -porque.. hable con Osamu antes, parece que ha visto la vida se Shuji-

hubo un pequeño silencio, hasta que nuevamente Dazai habló -bueno, pero no hay porque preocuparse, yo solo he visto como tú y Osamu se han acostado y ya, incluso una vez llegue a tener alucinaciones, pero no es que me moleste y la verdad dudo a él le moleste también, era su novia, supongo que debería estar feliz ¿no? a él ella le importaba mucho-

Fyodor estaban cansado de la forma en la que Dazai tomaba las cosas, realmente... estaba sumamente cansado como si acaso no le tomara alguna importancia a eso, todo por él imbécil de Kunikida. encima con lo que Dazai le había dicho le causaba aún más preocupaciones -sabes algo Fyodor, creo que podemos ver lo que han vivido otros porque está relacionado con nosostros mismos, por ejemplo el pudo ver eso porque de alguna manera estuvo involucrado ¿no?- el médico analizo sus palabras, ciertamente aquella teoría podría tener cierto sentido -Zai últimamente no ha salido tanto, es como si acaso estuviera dormido, en cambio Osamu no para de molestarme en querer salir-