Cuando el sábado llegó, despedí a mi madre a las 10 de la mañana, demasiado temprano para mí, así que aprovechando el tiempo empecé a limpiar.
Era la primera vez que alguien que no fuera JungKook pisaba mi casa, así que debía preparar todo muy bien. Esta visita era especial para mí y mi alfa.
Ya por las 15:08 fui a comprar frituras, faltaba poco para que NamJoon llegara, justo al volver de las compras me lo cruce tocando mi puerta mientras sostenía su bicicleta.
—Hey creí que no estabas —se rió y yo me acerque rápido a abrir y dejarlo pasar.
—Llegaste antes, creí que vendrías un poco más tarde.
—¿Debí llegar más tarde?—preguntó mientras entraba— Wow linda casa— dejó su bicicleta en un costado de la sala.
—Gracias— me aparté a guardar las compras y volví con él— ¿Quieres algo para comer o tomar?
—Mmh. No, gracias.
Estaba nervioso, no sabía cómo tratar a las personas en mi casa. Ni como ser un buen anfitrión, así que procesaba que se debía hacer en estos casos.
—¿Eso es una guitarra? —la señaló y se acercó a ella—. ¿Puedo?
—Claro —sonreí y me acerqué a donde él estaba parado.
Así rompieron el hielo. Hablando sobre las canciones que podían tocar, presumiendo de sus habilidades con diversos instrumentos y tocando juntos, aunque fuera algo tan simple ambos lo disfrutaron.
Luego de "jugar" con la guitarra se quedaron hipnotizados por una tonta película de Adam Sandler.
—Esta es mi favorita de él, me gustan mucho sus películas.
—Sí, también me gustan, pero las viejas son malísimas.
—Nunca vi una película vieja de Adam Sandler.
—No lo hagas, son pésimas—. Comentó y me reí.
—Voy a traer algo para comer ¿prefieres algo salado o dulce? —cuando respondió por lo salado me levanté para buscar las papitas, las serví y fui a sentarme a su lado.
NamJoon recostó su cabeza en mis muslos haciendo que mi cara se sonroje. Lo admiré mientras comía y él en respuesta a mi anterior sonrojo me guiño el ojo.
—¡Ah, eres todo un coqueto! —me queje y tape mis ojos mientras él se reía de mi.
—O tu no aguantas nada.
—¡No señor, ese es otro tema!
—Entonces mírame sin ponerte rojo, ¡no podrás! -me retó e intentó separar mis manos de mi cara, pero me resistí en broma.
El forcejeó terminó, el cual obviamente ganó el grandote. Yo lo mire riéndome aún con las mejillas rojas por el previo jugueteo y por el sonrojo anterior.
—Ves, sigues rojo enano.
—Sí, solo para ti —le devolví el coqueteo y pude notar como ahora a él se le subían los colores, será una cara que nunca olvidaré — ¡Ves, tú también! — lo moleste y él se rió tapando su boca evitando mirarme.
~🍁~
Después de ese pequeño juego hicieron otras varias cosas como: cocinar algo para cenar, jugar al Uno, a las cartas tradicionales y juegos de mesa, los cuales YoonGi ganaba la mayoría.
Ya al cumplirse las 23 horas ambos estaban agotados en el cuarto del pálido. NamJoon en el puff y YoonGi en su cama, ambos hablaban de la vida haciéndose preguntas básicas o estúpidas como: "¿preferirías ser sordo, mudo o ciego?" O "¿qué olor tendrías si pudieses haber elegido?"
—YoonGi ¿por qué insististe tanto en ir por aquel omega?
— ¿Por JiMin? —NamJoon asintió y yo suspire—. Solo… mi alfa me dijo que él era mi omega, que debía esforzarme por tenerlo e intentar ser más por él, dar más por él, pero él no me ama. Solo quiere a ese novio de mierda —hice un puchero y le di la espalda a NamJoon para que no me vea así de miserable—. Me siento estúpido.
—¿Porqué? —sentí como se acercó y me tense.
—Solo… Di mucho por alguien que no merezco, nunca estuve a su nivel— él me abrazó.
—Él no te merece a ti YoonGi, eres un alfa genial, eres considerado y toda una belleza ¿si? No te menosprecies por un hijo de papi y mami.
Deje que me consolará, calmara y abrazara todo lo que necesitaba. Se sintió bien estar entre sus brazos olfateando su tenue aroma a café y tierra húmeda.
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un alfa para mí alfa
أدب الهواةMin Yoongi es un alfa el cual se humillaba constantemente por su Omega destinado, park jimin, hasta al fin rendirse encontrando un alfa altote y musculado. ★ship: Namgi ›namjoon top ›yoongi bottom ★alfa x alfa ★fluff