022.

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Kang Seulgi se encontraba junto a su hijo en la reunión de los cazadores de vampiros, contemplando como a sus ojos eliminaban a uno más de esos demonios, como era costumbre de su tradición. La cuál se realizaba una vez cada mes, la única diferencia es que era la tercera vez que iba sin Minjeong y ya no encontraba más excusas hacia la corte para justificar su ausencia. Pues siempre era debido a que tenía planeado estar más con Yoo Jimin, ya que según ella, era parte del plan y se lo dejaba pasar. Sin embargo en los últimos días la muchacha se había salido completamente de sus casillas, volviéndose más testaruda de lo normal y negándose a asistir a esas reuniones.

Ahora no sabía que más inventar, no podía simplemente decirles la verdad de que su sobrina estaba metida en una residencia llena de vampiros sin matar a ninguno. El plan sólo era sabido por ella, Yeonjun y nadie más. Al igual que la verdadera identidad de Minjeong.

Pero grande fue su sorpresa cuando esta vez el ministro no le preguntó, sino que simplemente la convocó a reunirse con todo el consejo.

Y eso nunca significaba algo bueno.

Le dijo a Yeonjun que volviera solo a casa y obedeció a los mayores, encontrándose ahora de frente a los cazadores de vampiros más poderosos de todos, y también los más antiguos.

—Supongo que ya sabrá el por qué está aquí —introdujo la más joven de ellos, quién tenía como cuarenta años y el cabello grisáceo.

—Realmente no lo sé —contestó, aunque en el fondo tenía unas leves sospechas pero no quería creerlas.

—¿No lo sabe? —alzó una ceja de forma arrogante.

—No.

—Bien, pues entonces iremos al grano —suspiró pesadamente— El director de la secundaria Gwangalli reportó hace dos días que la joven cazadora, Kim Minjeong, que además es estudiante de allí, ha demostrado comportamientos que demuestran su falta de humanidad: como por ejemplo, manipulación mental, cambio del color de ojos y súper velocidad.

—No sé de lo que me está hablando —dijo inmediatamente, haciéndose la desentendida.

La mujer le fulminó con la mirada.

—Voy a hacerle una pregunta señora Kang y quiero que me responda con la completa verdad sino usted terminará en prisión o peores casos, muerta.

Seulgi tragó grueso y finalmente asintió firme con la cabeza, comenzando a sudar de los nervios.

—¿Acaso usted ha estado ocultando a una dhampiro entre nosotros durante los últimos quince años?

No respondió.

—Si lo que teme es que le hagamos daño, eso no pasará. Sólo necesitamos que nos diga la verdad —agregó la mujer para convencerla más.

Y lo logró. Aquello fue suficiente para que Seulgi dijera la verdad, mientras no le hicieran daño a ella. Todo bien.

—Sí.

—¿Y por qué? —ahora preguntó otra persona diferente, un hombre para ser específicos. Este siendo diferente, pues tenía más aspecto de mayor y mirada oscura— ¿Por qué se ha atrevido a engañarnos y traicionarnos de esta manera?

—Porque quería proteger a mi sobrina, que es lo único que tengo de mi hermana fallecida... —mintió, esa no era la razón principal.

Silencio.

—¿Y cómo hizo para que nunca nos enteráramos?

La mujer azabache levantó la mirada, fijando su vista en los cuatro pares de ojos que la observaban. Entonces sonrió maliciosamente al entender todo.

Sweet Fangs ✦ | Winrina G!PDonde viven las historias. Descúbrelo ahora