Mal Momento - 𝐿𝑒𝑒 𝑆𝑢-ℎ𝑦𝑒𝑜𝑘

Capituló 2

LLEGUE A LA ESCUELA Y EMPECE A BUSCAR A MIS AMIGAS y amigos, les quería preguntar quien le gustaría salir después de clase.

En eso siento un gran peso logrando que caiga al suelo al perder mi equilibro, solo escuchó como se empieza a reír y veo a la dirección de la risa. El idiota de Cheong-san se había subido a mi espalda y eso provocó que mi uniforme se ensuciara, lo empiezo a golpear molesta.

— ¿Qué crees qué haces, idiota? —pregunte enojada.

— Lleva mi mochila —me mando Cheong-san y agitando su brazo con su mochila en sus manos.

Levantó mi ceja confundida, ¿quien se creía este para ordenarme eso? — ¿Y por qué? Para eso tienes manos —alejo su brazo de mi, pero el la vuelve acercar.

— Llegaste tarde —informó y eso me confundió más, ¿qué quería decir?—. Lo que significa que debes llevar mi mochila.

— No estamos en el preescolares,
Cheong-San. —comente volviendo alejar su brazo de mi— Pídeselo a On-Jo.

Tomo nuevamente mi camino, pero vuelvo a sentir un peso en mi espalda volviéndome a caer.

«Te voy a matar, Cheong-San», me dije a mi misma.

Tiro a Cheong-san a un lado y me levanto, solo veo como se me forma una sonrisa. Le doy una patada en sus piernas y tomo su mochila poniéndome en la parte de enfrente y empiezo a caminar. Si matar no fuera ilegal, Cheong-san ya estaría bajo tierra y uno que otro más.

[...]

Me fui al salón tirando la mochila de Cheong-san a el mismo solo veo como se le forma una sonrisa, me voy al mi mesa. Normalmente me siento a un lado de una chica que no conozco mucho, pero decidí hoy ponerme a un lado de la presidenta. Nam-ra, es alguien bastante solitaria, pero es una buena persona. Somos muy buenas amigas, aparte de que soy la vicepresidenta lo cual nos une más.

— ¡Hola, Nam-ra! —la nombre llamando su atención.

— Hola, Ha-na —contesta con una pequeña sonrisa.

Antes de volver hablar escucho como una voz chillona empezó a gritar, volteo a ver de quien se trataba y era la irritante de Na-yeon, ella solo se la pasa peleando con Gyeong-su, pero nunca entiendo el porqué.

— ¡Tu! —exclama Na-yeon al ver que Gyeong-su estaba sentado en su mesa—Quítate de mi mesa.

— Por supuesto, discúlpame —Gyeong-su se levanta de la mesa sin ningún problema—. No es para tanto, ¿si? —con su brazo empieza a limpiar la mesa.

— ¿Qué haces? Eres asqueroso —Nayeon quita su mochila y aleja a Gyeong-su de su mesa—

— ¿Qué dijiste? ¿Qué te pasa—se empieza a alterar y Cheong-san rodea sus brazos en el cuerpo de Gyeong-su.

— No hizo nada malo —dice Woo-Jin yendo a su mesa.

— Es que no entiendo. ¿Qué hice para que me odies tanto? —Pregunta Gyeong-su mientras Cheong-san lo aleja de Na-yeon.

— Todos a sus lugares. Ya vamos a empezar —anuncia la maestra Park entrando al aula.

Todos volvieron a su asiento como lo indicó la maestra y voltearon a ver a la maestra.

— Buenos días —saluda la maestra.

— Buenos días —saludamos todos al unison.

— Entreguen sus celulares —ordena la maestra cargando una caja donde normalmente dejamos los celulares.

Me levanté de mi asiento al igual que Nam-ra y dejamos nuestros celulares en la caja para volver a nuestros asientos.

— ¿Alguien ha hablado con Hyeon-Ju? —pregunta la maestra, pero nadie dijo nada—. ¿Nadie? ¿En serio nadie intentó llamarla?

— Nosotros ayer limpiamos el laboratorio juntos, pero después ya no la vimos —informa Joon-yeong.

— Si alguien sabe algo de ella, necesito que me avisen de enseguida, ¿ok? —dice la maestra y todos al unison le contestamos con un "si, maestra"—. Recuerden que es periodo de exámenes, deben organizarse —Empieza a escribir en su celular.

Algunos celulares empiezan a sonar.

— Si escuche eso. Entreguen sus celulares reales.

Dae-su y I-sak se levantaron de su asiento y dejaron sus celulares reales en la caja para volverse a sentar.

— On-jo. Este es tu celular viejo. Ven por el, por favor —menciona la maestra haciendo reír a casi todo el salón.

Después de unos minutos la clase dio inició.

— Como verán, en esta oración, "libre de" significa "que no está" —La maestra da algunos golpes a la pizarra y dirige su mirada hacia nosotros—. ¿Qué es lo que interpretan de esto?

Puedo ser una de las mejores estudiante, pero lo mío no es hablar en clase. Escondí mi cabeza con mis manos esperando que la maestra no me preguntara a mi.

Una chica que estaba sentada detrás de mi, se levanta de su asiento.

— ¿Qué opinas, Hee-su? —pregunta la maestra.

— Necesito ir a baño —le dice la chica a la maestra.

— Claro, ve. Bien, entonces. ¿Quien quiere dar su opinión? —vuelve a preguntar la maestra— ¿Presidenta? ¿Vicepresidenta?

Alce mi mirada y veo a Nam-ra quien me miraba fijamente, en susurros dice "tu" lo cual negué repetidas veces, pero seguía insistiendo.

— Todos somos prejuiciosos. Todos tenemos ideas preconcebidas sobre otras personas —hablé nerviosa.

— Eso es —me felicito la maestra.

Volteo a ver a Nam-ra que tenía sus dos pulgares arriba con una sonrisa, golpeó su pierna con la mía y volteo a ver a la maestra con una sonrisa divertida.

— Veamos que dice el sin calcetines. De pie. ¿Por qué te dicen así? —pregunta la maestra algo divertida.

— Es para explicar su comportamiento. Sin calcetines. —explica Joon-yeong y todos rieron.

— Odia los calcetines y nunca se los pone —Da-su dirige su mirada a Su-hyeok—. Y por esa razón, le apesta los pies —se tapa la nariz—

— Ok, sin calcetines. ¿Qué es lo que piensas sobre lo que dijo, Ha-na?

— Aah... —dice Su-hyeok y todos hicieron el mismo sonido—. Creo que tiene mucha razón.

— ¿Exactamente en que parte crees que tenga razón? —cuestiona la maestra—

Su-hyeok se quedo callada al no saber que decir, pero el tema de Su-hyeok quedo en el olvido en el momento en que alguien abre la puerta del aula. Hyeon-ju entra al aula ensangrentada y cae al suelo, todos incluyéndome me levanto de mi asiento preocupada.