Capitulo 11

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" ya es demasiado tarde para el arrepentimiento"

" ya es demasiado tarde para el arrepentimiento"

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Haruchiyo Akashi

Actualidad | 15 años

Observo a mi hermana que busca todas sus cosas para ir a la universidad, desde la mañanita empezó con desarreglar la casa en busca de lo que llevará.

—¿Haru no has visto mi libro de declamación judiciales? - me pregunta

—No - es lo único que le digo, ni siquiera se que libro es ese.

Vuelve a buscarlo en las gavetas de su armario, creo que lo consigue cuando sonríe feliz.

—¿Por qué no nos bañamos juntos? - se me acerca

Asiento, está empieza a quitarse la ropa poco a poco mientras hago lo mismo, se me apega y la cargo sosteniendo su trasero.

Ambos vamos a la regadera, ella lo enciende y el agua caliente nos empieza a escurrir por todo el cuerpo.

Sus labios van a los míos juntando y disfrutando con deleite, la acorraló en la pared tocando a mi gusto su cuerpo.

Coloco la punta de mi miembro en su entrada donde me deslizó sin pensarlo más de dos veces. Jadea en mis labios formando una sonrisa genuina.

Sus manos van a mi cabello, acaricia mis mejillas, por último pasa su lengua por cada cicatriz que llevo en el rostro.

Empiezo a embestirla con fuerza, sus piernas se arrollan en mi cintura mientras nuestros labios siguen devorándose, felizmente me sonríe y repite cuánto me ama y le gusta.

Ambos jadeamos sincronizadamente, nunca me deja de sonreír y yo no dejo de darle las embestidas que le gustan.

Terminó por correrme en su interior mientras ella deja que su orgasmo la deje sin ganas, pero sin ganas de bañarse porque quiere que sigamos.

Eso es lo que siempre pasa cuando estamos juntos, una vez que empezamos no existe el final.

—¿No se te hace tarde? - le pregunto cuando me la llevo al lavamanos.

—Que importa si pierdo unos cuantos temas de clases - empiezo de nuevo a follarla

El sonido del agua cayendo hace que no se escuchen tanto sus gemidos, me muerde el labio cada que intento besarla.

Levanto una de sus piernas y la coloco en mi hombros para tener más acceso a su interior. Agarro su cuello con fuerza cada que me entierro más en ella.

Sonríe jadeando y tratando de no gritar, sería un problema si los demás que viven aquí lo escuchan, su interior me aprieta dándome entender que volver a correrse.

—Te Amo Haru - jadea con más fuerza mientras se deja llevar por el placer 

Dos estocadas fuertes hacen que termine de eyacular en su centro, mi rostro queda en medio de sus senos, tranquilizó mi respiración que apenas si puedo tomar aire.

—Ahora si, debemos darnos una ducha - me besa la frente

Me la llevo a la regadera de nuevo, terminamos y salimos, pero no para vestirnos si no para seguir con el acto en la cama.

Dónde estoy debajo de ella mirando su escultural cuerpo, sus ojos brillosos y los senos que rebotan cada que se deja caer encima de mi falo duro.

Me cubro el rostro con el antebrazo para tratar de tranquilizar mis jadeos, ella solo se limita a seguir brincando como suele hacerlo todo el tiempo.

Aprieto su muslo cuando estoy a punto de terminar de nuevo, tranquilizó los pensamientos para que no se termine el momento íntimo.

Ella ya debería de haberse ido pero aquí está sobre mi haciendo lo que más le gusta y le apetece.

Dejo de cubrirme el rostro para ver cómo termina, mis manos van a su cintura cuando se tira un poco hacia atrás, suelta un grito ahogado cuando se deja llevar por su propio derrame.

Me volteo para seguir las estocadas, ella no hace nada más que abrirse bien y hacer que termine por llegar al climax tan caliente.

Me recuesto sobre su pecho extasiado y con muchas ganas de seguir de nuevo.

—Estuvo genial - me dice levantando mi rostro para llevar sus labios a los míos – Pero debo irme - asiento sin protestar

Si le pido que se quede no lo hará, más por qué Takeomi está en casa, me quedo recostado sobre la almohada con los ojos pesados, necesito dormir más horas, toda la maldita noche después de que venimos de comer.

Me la pasé en la habitación de mi hermana follando con ella, casi pegue los ojos por unas dos horas y volví a lo mismo.

Ya se volvió una maldita adicción que no puedo ni controlar, quizá está mal pero si no tengo la rutina extasíante que llevo con Hiromi me vuelvo loco.

Me entra un desespero horrible, la ansiedad me hace temblar junto al puto sueño que me pone nervioso.

Cierro los ojos por un momento, no existe la bulla molesta, siento cómo la cama se hunde un poco mientras me deja un beso en el hombro

—Nos vemos al rato mi cielo - solo gruño como respuesta

Quiero despertarme y abrazarla, pero el sueño es pesado y términos dormido por tres horas más.

Cuando despierto solo me visto para salir a la guarida de Tenjiko, últimamente Muto está visitando a sus ex compañeros o sus antiguos amigos muy seguido.

La cuestión es claramente por que el rey de Tenjiko está por atacar a la Toman, no tengo aclarado el lugar ni mucho menos como es el plan exacto, me mantengo al margen de todo

Incluso del idiota de Ran que se mantiene haciendo sus chistes idiotas, su hermano es mucho más reservado que incluso me cae mejor.

Aguanto las malas caras de Kakucho que refleja su no confianza hacia mi.

Claro está que no debería de pasarme nada, no vengo aquí hacerme amigos de ellos o incluso compañeros de trabajo, estoy aquí por la vigilancia y la traición que hará Muto a mi líder.

Con eso es definitivo que terminaré matándolo por su traición y tonta alianza escondida de Mikey.

Guess who love you | Sanzu Haruchiyo ©✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora