Cap. 7 Bienvenida de nuevo

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Amaris:

Han pasado varios días, me miro en el espejo llevo un vestido blanco con unos tacones, me hice un recogido lindo para no estar tan despeinada, ya lista bajo a cenar.

Llego y esta mi padre sentado en la punta del comedor y mi madre a su lado sonriente, aunque se muy bien que esa sonrisa es falsa, la pregunta es porque? la señora se acerca con las últimas bandejas y las pone en el comedor, me siento contenta.

Miro la comida, es tan extravagante que sospecho de mis padres, voy a sacar una papa frita pero la voz de Ascian me detiene.

— Amaris aún no han llegado los invitados. — Me detengo, lo sabía.

— Lo sabía es una cena de negocios no es así?.

— Querida por favor. — Dice Claira, suena el timbre y se acomoda el vestido.

— Buenas noches Ascian, y cómo has crecido Amaris. — Un hombre de la misma edad de mi papá podría decir, saluda alegre al entrar junto con una mujer y Amias.

Saludamos, ellos toman asiento, Amias se hace a mi lado, y sus padres al otro ciertamente son parecidos.

— Podemos cenar. — Comienzan a hablar todos, no digo nada y yo que creía que era una cena familiar.

— La empresa ha crecido mucho Ascian.

— Así es, el fruto del esfuerzo... — Los dos hablan.

— Espero que el viaje no haya sido molesto. — Dice mamá cogiendo más ensalada.

— Para nada querida, está cena está exquisita, como en Francia. — Así que es comida francesa, Amias me mira, pero yo no a él.

— Ece estás molesta por lo de la fiesta, lo puedo ver. — Bien que lo sepas.

— Espero que te guste la comida es la primera ves que la hacen acá, claro de este tipo Imre. — Bufa molesto, no es que sea su culpa, son los desquiciados nada más y nada menos que de su grupo.

— Lo lamentó, no debí dejarte sola. — Parece que lo dice en serio.

— Está bien. — Como tranquila, me pica la garganta y tomo agua. — No deberíamos hablar así. — Digo porque estábamos hablando en vos baja, siendo un poco sospechosos.

— No, y no te vayas a enfadar conmigo. — Lo miro confusa, la cena continua entre risas y charla de socios.

— Bueno tenemos que dar una noticia a la familia. — Dice ella elevando la copa.

— De tantas copas me drogaron. — Digo para mi misma, muy bajo pero Amias escucho.

— Amaris ellos ya no te pueden lastimar.— Dice a mi oído, me alejo sin parecer grosera. — Nunca. — Habla normal y Claira lo mira.

— Mas bien porque no lo hablamos con ella y luego celebramos. — Dice mamá con una sonrisa que parece real pero, no lo es.

— No, ya está decidido. — Los miro perdida muy perdida.

— Ascian no lo hemos hablado todavía con ella. — Se levanta de la silla, daría un brinco si estuviera sola.

Siempre Te AmaréDonde viven las historias. Descúbrelo ahora