POV JULIANA
Han pasado dos semanas desde aquella noche en que por un momento sentí que Valentina me correspondía y minutos después todo se fue a la mierda. No voy a mentir, la he extrañado demasiado, extraño esa amistad tan fugaz pero tan bonita que tuvimos, extraño el sonido de su risa pero más que nada, extraño esos ojos azules que he soñado en más ocasiones de las que me gustaría admitir. Lamentablemente desde muy pequeña he aprendido que... no siempre seré la persona que los demás elijan.
Hoy, me encuentro en una cafetería cerca de mi departamento tomándome un café con Kiara mientras esperamos a que Caro salga de sus asignaturas.
—Tienes que darle tiempo, Juli... Tienes que entender que Valentina estaba acostumbrada a un estilo de vida donde jamás salió de su zona de confort y luego de conocerte a ti, le volteaste el mundo en 180 grados— me decía Caro con naturalidad.
—Igual eso ya no importa— confesé con tristeza —hace un mes que nos dejamos de ver y me ha dejado muy claro con eso que ella ya no quiere saber de mí y aceptaré su decisión— terminé de decir mientras revolvía mi taza de café con una cuchara.
—Juliana— me dijo Kiara muy seria —pobre de ti que voltees y la saludes, porque te juro que ahora sí te chingo— fruncí mi ceño sin saber de qué o quién hablaba Kiara mientras ella miraba sobre mi hombro y de pronto escuché que alguien me llamaba.
—¿Juliana?— escuché detrás de mí con esa voz que podía reconocer a pesar del paso del tiempo.
Volteé hacia atrás y miré a la dueña de esa voz frente a mí, con esa sonrisa que me había vuelto loca por tanto tiempo.
—Esmeralda... hola— dije levantándome de mi silla para caminar hacia esa chica de ojos verdes que por mucho tiempo fueron mi perdición.
Después de unos minutos platicando con Esmeralda regresé a la mesa donde se encontraba Kiara pagando la cuenta de nuestra mesa y sin voltear a verme salió caminando delante de mí.
—Kiara... — dije detrás de ella siguiéndola a la salida de la cafetería.
—Kiara, no te puedes enojar porque la saludé— insistí mientras íbamos llegando a su carro que se encontraba en el estacionamiento.
Kiara seguía sin contestarme entonces decidí acercarme a ella —Bebé... ¿me vas a seguir igno—pero antes de que pudiera continuar, mi dulce amiga estampó su bolsa en mi hombro.
—¿Auch? ¿Qué te sucede?— le pregunté.
—¡Te dije! ¡Maldita sea, Juliana! — gritó con frustración abriendo la puerta de su auto y sentándose en el lugar del piloto. Yo seguía en shock parada a un lado del auto.
—¡Súbete al maldito auto! — volvió a gritarme Kiara y antes de que volviera a golpearme preferí subir en silencio.
POV VALENTINA
Toda la semana estuve pensando en Juliana. Quería buscarla y pedirle perdón, que me diera una segunda oportunidad para ser su amiga y no fallarle. Claro que para este momento ya estaba consciente de que sentía algo por ella y que no podía olvidar sus besos ni su tacto, pero también sabía que solo era una confusión, que yo no podía ofrecerle algo más que una amistad.
Con nervios y todo, tomé la decisión de ir a 'Corazones Compasivos' a buscar a Juliana.
—Muchas gracias— le dije a Alirio mientras me abría la puerta de la camioneta para ayudarme a bajar. Sentí un nudo en el estómago al ver la entrada del edificio. —Por favor, espérame justo aquí... Si decido quedarme te enviaré un mensaje para que no me esperes—.
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