Here With Me

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El día del clásico estaba a la vuelta de la esquina.

Puede tomarse literal, porque era el día de entrenamiento antes del tan esperado Barça vs Madrid.

La incomodidad en los vestuarios se había disipado y fue remplazado por la emoción pero inseguridad por el partido próximo. El Madrid no se sentía preparado para un partido como el clásico desde que su último partido importante quedara en un empate, no estaba la seguridad de que ganarían.

Las dudas no eran en vano y se veían reflejadas en Sergio y Luka. Ramos, el capitán del equipo, defensa central y podría decirse que uno de los mejores defensas que tenían, era sin duda un pilar importante que estaba flaqueando por culpa de los acontecimientos en su vida.

Sus últimos juegos no habían sido favorables, Zidane lo sabía bien y había mantenido su atención en él. Era notorio que su juego flaqueaba con su confianza y su mente parecía atormentarlo, Sergio era importante para que el equipo no cayera y ahora el pilar se estaba desmoronando, dejando una defensa débil en el Real Madrid.

Luego estaba Modrić, quien parecía normal y quién Zidane no había tomado demasiada importancia hasta que analizó el último partido contra el Bayern.

El croata era bueno fingiendo, pretendiendo que estaba jugando como siempre lo hacía, que se mantenía fuerte y nada le afecta, y podrías no notarlo, pero Zidane era su entrenador y lo había visto muchas veces en el campo, así que pudo diferenciarlo.

Estaba flaqueando igual que Sergio. Luka era importante para el Real Madrid, era sin duda la conexión entre la defensa y el ataque, ahora se estaba desestabilizando en cada juego, dudando en cada jugada, tropezando sobre sus propios pies, cuestionando cada pase; los muros del Madrid se estaban cayendo en pedazos sobre dos de sus mejores jugadores, Zidane lo sabía mejor y tenía que pensar en sus opciones.

Estaban en el entrenamiento, practicando posesión, velocidad y tiro, todos estaban tensos y se notaba en sus cuerpos. Vio a Cristiano hacer su tiro con la mandíbula apretada y siendo seguido por Luka, quién comenzó la pista con obstáculos para la velocidad, tambaleante e indeciso al momento de llegar al balón.

- "¡Luka, no dudes! - gritó el director técnico reprendiéndole por hacer un tiro mediocre que sería fácil de predecir para el portero. El nombrado solo tensó sus hombros y vio cómo se iba a esperar su turno al final, siendo seguido por Sergio que parecía hablar con él.

Zidane estaba preocupado y no fue una sorpresa cuando los reunió a ambos para darles un charla que terminó en regaño.

...

Sergio no sabía donde estaba su mente y sabía que Luka estaba teniendo el mismo problema.

Después de que Zidane les diera una riña se dio cuenta que no era el único que no podía concentrarse. No lo había notado, pero luego de observarlo un rato se dio cuenta. Eran cambios pequeños pero que afectaban toda su forma de jugar.

Otra cosa que había notado era que todo el equipo estaba tenso, razón por la que Marcelo sugirió que cenarán esa noche todos juntos, sin alcohol y terminaran temprano para poder prepararse para el día siguiente. Y de cierta manera lo hizo, porque todo fueron risas y bromas en la mesa del restaurante, nadie mencionó su deficiencia en los partidos pasados o cualquier cosa relacionada con partidos que pudiera hacerlos sentirse más presionados de lo que ya lo estaban. Fue divertido y comieron como una familia; ayudó al menos en el momento.

La cena también fue la razón por la que Luka estaba sentado a su lado en el auto mientras Sergio conducía hacia la casa del mayor. Había sugerido recogerlo y dejarlo en su hogar temprano ese día como una sugerencia de Marcelo, aunque lo haría de todos modos como lo hace gran parte de los días. Amaba el olor de la colonia de Lukita mezclado con la lavanda del ambientador del auto, aunque amaba todo de Luka de todas maneras.

Perfecto || lukamosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora